Una escuela de Luisiana obliga a sus alumnas a hacerse pruebas de embarazo
El Estado obliga al centro a modificar la norma que le permite expulsar a las que se nieguen
El Departamento de Educaci¨®n del Estado de Luisiana dio este martes un plazo de una semana al Instituto P¨²blico Delhi para que cambie la pol¨ªtica del centro que obliga a las alumnas de las que sospeche que est¨¦n embarazadas a hacerse una prueba de embarazo y expulsa a quienes se opongan y a las que, finalmente, s¨ª lo est¨¦n. El director del instituto indic¨® que hab¨ªa contratado a un grupo de abogados para que estudiaran la petici¨®n. Las clases comienzan el 15 de agosto.
El ultim¨¢tum llega un d¨ªa despu¨¦s de que el grupo de derechos civiles Uni¨®n Americana de Libertades Civiles (ACLU en sus siglas en ingl¨¦s) alertara sobre la pol¨ªtica sobre embarazo del instituto en una carta remitida a su director, en la que se le exig¨ªa que la eliminara por ser inconstitucional. ¡°Adem¨¢s de violar la Constituci¨®n, la norma incumple el T¨ªtulo IX de la Enmienda de Educaci¨®n de 1972 que impide a las escuelas excluir a cualquiera de sus estudiantes de las clases o de cualquier actividad ¡®bas¨¢ndose en el embarazo de un alumno, un falso embarazo, el parto o la recuperaci¨®n del mismo¡±, denunciaba en la misiva Marjorie R. Esman, directora ejecutiva de ACLU.
El ultim¨¢tum llega un d¨ªa despu¨¦s de que la Uni¨®n Americana de Libertades Civiles alertara sobre la pol¨ªtica sobre embarazo del instituto en una carta remitida a su director, en la que se le exig¨ªa que la eliminara por ser inconstitucional
De acuerdo con las normas sobre embarazo de estudiantes del Instituto Delhi, aprobadas en 2006 y? publicadas en la p¨¢gina web: ¡°Cualquier alumna de la que se sospeche que pueda estar embarazada y que se niegue a someterse al test de embarazo ser¨¢ considerada como si efectivamente estuviera embarazada y se le ofrecer¨¢ la oportunidad de que estudie desde casa. Si no la acepta, se le aconsejar¨¢ que busque otro lugar donde continuar su formaci¨®n¡±.
En el comunicado que el director del instituto, Chris Broussard, remiti¨® el mi¨¦rcoles al diario Daily News, ¨¦ste se sorprend¨ªa de que las normas violaran la Constituci¨®n. ¡°Nunca hab¨ªamos tenido ninguna queja ni de los alumnos ni de sus padres sobre la pol¨ªtica de embarazo¡±, indicaba Broussard. ¡°El Instituto P¨²blico Delhi no se ha puesto en contacto con nosotros y no sabemos exactamente qu¨¦ har¨¢, si eliminar¨¢ la medida o la suspender¨¢¡±, explica Esman por tel¨¦fono. La activista indica que en una ¡°comunidad peque?a y de extracci¨®n rural¡± como Delhi ¡°es l¨®gico¡± que pocas estudiantes se atrev¨ªan a denunciar la pol¨ªtica del centro que ¡°est¨¢ basada en el estereotipo arcaico de que una estudiante embarazada es un mal ejemplo para sus compa?eras por haber quebrantado las supuestas normas de buen comportamiento¡±, dice.
Castigos corporales y muestras de afecto
La obligaci¨®n de someterse a pruebas de embarazo no es la ¨²nica medida cuestionable de las normas de conducta del Instituto P¨²blico Delhi. Entre sus 216 p¨¢ginas puede leerse que se admite "un castigo corporal razonable para los estudiantes indisciplinados". Por castigo corporal se entiende "palmear las nalgas de los alumnos". El centro tampoco admite muestras p¨²blicas de afecto porque reflejan "falta de buen gusto". Entre esos gestos de cari?o se incluyen "cogerse de la mano en las instalaciones del recinto, abrazarse, darse besos, acariciarse o sentarse en el regazo de otra persona".
El Instituto Delhi es un centro p¨²blico que, adem¨¢s, se beneficia de subvenciones estatales adicionales. El 23% de los 600 alumnos de la instituci¨®n pertenecen a minor¨ªas, el 5% son discapacitados y el 53% tienen derecho a men¨² escolar gratuito o a mitad de precio. Para formar parte del programa de ayudas estatales, los colegios deben cumplir estrictamente con las normas federales y estatales de educaci¨®n. Esman no se explica c¨®mo al Estado de Luisiana se le ha podido pasar desapercibida durante estos a?os la pol¨ªtica sobre embarazo del Instituto Delhi en sus evaluaciones. ¡°Puede deberse a una negligencia, no lo s¨¦, pero las reglas est¨¢n publicadas en su p¨¢gina web¡±, indica.
Este peri¨®dico no ha recibido contestaci¨®n por parte del Departamento de Educaci¨®n de Luisiana a cerca de c¨®mo no se percataron antes de la existencia de estas normas ni de qu¨¦ sanciones podr¨ªan recaer sobre el centro. Despu¨¦s de contactar en varias ocasiones con el Instituto Delhi, tampoco ha recibido una respuesta concreta sobre c¨®mo va a cumplir con las exigencias de las autoridades para que cambie su pol¨ªtica.
Esman no se explica c¨®mo al Estado de Luisiana se le ha podido pasar desapercibida durante estos a?os la pol¨ªtica sobre embarazo del Instituto Delhi en sus evaluaciones
El caso de Luisiana no es aislado, muchos otros colegios no ofrecen el mismo trato a las alumnas que est¨¢n embarazadas, seg¨²n un informe publicado en junio por el Centro Nacional de Leyes de la Mujer. ¡°Pese a los muchos avances en la educaci¨®n de las mujeres y las ni?as desde 1972, muchas escuelas siguen impidiendo a sus alumnas embarazadas o que han sido madres que participen en sus actividades, expuls¨¢ndolas, presion¨¢ndolas para que cambien de centro y sancion¨¢ndolas por faltar a clase por tener que ir al ginec¨®logo¡±, indicaba el informe.
ACLU ha denunciado a un colegio de Nuevo M¨¦xico, controlado por la Oficina Federal de Asuntos Indios, por haber reincorporado a una chica de 15 a?os a quien primero expulsaron por estar embarazada, tras obligarse a hacer p¨²blico su embarazo ante todos los alumnos. ¡°Hay much¨ªsimos situaciones similares, pero muy pocos se denuncian. Si no los conocemos, no podemos hacer mucho¡±, se lamenta Esman.
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