¡°Los cuervos sobrevuelan el Vaticano¡±
Los periodistas italianos bautizaron pronto como un Vaticanleaks el ¨²ltimo esc¨¢ndalo del Vaticano, de febrero pasado. No fueron originales. La fuga (en ingl¨¦s, leak) de papeles ante las narices de Benedicto XVI parec¨ªa obra de Wikileaks, esa versi¨®n impertinente de la Wikipedia, en un goteo que lleg¨® al colmo de desvelar hasta un complot para asesinar al mism¨ªsimo pont¨ªfice. Su mayordomo, Paolo Gabriele, sigue preso como ¨²nico culpable del robo de documentos. Al fondo, queda al descubierto lo que ya es un secreto a voces dentro y fuera del Estado de la Ciudad del Vaticano, el m¨¢s peque?o (44 hect¨¢reas) del mundo: la lucha entre cardenales por suceder al anciano papa alem¨¢n, crecientemente ensimismado a sus 85 a?os.
No hace falta leer a Maquiavelo para entender que la mejor manera de destruir una organizaci¨®n es atacar a su centro de gravedad. En la Iglesia romana, esa figura es el Papa, que ostenta todos los poderes, incluso el de proclamarse infalible y sostenerlo como dogma. Debilitado el Papa, el edificio amenazar¨ªa ruina. En realidad, el propio Ratzinger era consciente de su fragilidad desde el momento de su elecci¨®n, que logr¨® clamando que su iglesia era ¡°una vi?a devastada por jabal¨ªes¡±. Ahora, su peri¨®dico de cabecera, L'Osservatore Romano, inspirado por un jesuita sin pu?al en estas peleas, Federico Lombardi, lo define como ¡°un pastor rodeado por lobos¡±.
Hay una f¨®rmula que define mejor la situaci¨®n de Benedicto XVI, dicha sea en lat¨ªn, el idioma oficial del Vaticano aunque sean cada vez menos los jerarcas que entienden la lengua de Ovidio, y muchos menos los que la hablan. ¡°A fronte praecipitium a tergo lupi¡±: al frente un precipicio y los lobos a la espalda. Sin embargo, este Papa parece no enterarse. ¡°Lo que m¨¢s me ha sorprendido es el poco poder que tiene y lo poco que manda¡±, sostiene el vatican¨®logo Eric Frattini. En octubre publica en Espasa Los cuervos del Vaticano. Benedicto XVI en la encrucijada. Ah¨ª ofrecer¨¢ 47 documentos del Vaticanleaks, la mitad a¨²n sin desvelar y algunos con efectos sobre Espa?a, como la posici¨®n del Vaticano ante peticiones de ETA para mediar entre la banda criminal y el Gobierno.
Lo que m¨¢s me ha sorprendido es lo poco que manda Benedicto XVI"
La primera conclusi¨®n del Vaticanleaks es que en la Santa Sede (as¨ª se autocalifica, sin modestia, la m¨¢xima instituci¨®n de la Iglesia romana, y a su jefe m¨¢ximo como Santo Padre), es que en Ciudad del Vaticano, con apenas 900 habitantes, se peca mucho. Las tentaciones mayores son el dinero y el poder. ¡°O sea, la dichosa corrupci¨®n¡±, ironiza Frattini, de origen genov¨¦s.
El detonante de la pelea de ahora lo produjo el arzobispo Carlo Maria Vigan¨°. Por carta, le contaba a Benedicto XVI varios casos de corrupci¨®n, pero no fue atendido, sino removido a la Nunciatura de EE UU. Tambi¨¦n conoci¨® el Papa las quejas de un matrimonio holand¨¦s que manda millones de euros a la Santa Sede y le preguntaba si merec¨ªa la pena seguir con tales donaciones a la vista de tanto despilfarro. Frattini pone un ejemplo: cada a?o por Navidad, el Papa gasta 600.000 euros en montar el bel¨¦n de San Pedro.
Adem¨¢s del complot para matar al Papa (el secreto figura en una carta del colombiano Dar¨ªo Castrill¨®n cont¨¢ndole a Benedicto XVI, en alem¨¢n, que el cardenal Paolo Romeo coment¨® en un viaje a China: ¡°El Papa morir¨¢ en 12 meses¡±), el Vaticanleaks desvel¨® la complicada situaci¨®n de Ettore Gotti Tedeschi, el hombre de Emilio Bot¨ªn en Italia como responsable del Santander Consumer Bank SpA. Gotti presid¨ªa el Banco Vaticano y sab¨ªa demasiado. ¡°Cuando la polic¨ªa entr¨® en mi casa, pens¨¦ que era la gente que ven¨ªa a pegarme un tiro¡±, ha dicho en atestado policial. ¡°Visto lo visto, en el pr¨®ximo conclave para elegir Papa los vaticanistas tendr¨¢n que convertirse en corresponsales de guerra¡±, resume Frattini.
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