La gesti¨®n privada de la sanidad se extiende en las autonom¨ªas del PP
Extremadura, Castilla-La Mancha o Galicia siguen los pasos de Madrid y Valencia
Las ra¨ªces del sector privado est¨¢n cada vez m¨¢s extendidas en la red sanitaria p¨²blica. Esta tendencia no siempre se manifiesta de forma tan espectacular como acaba de suceder en Madrid, con la apuesta de, entre otras medidas, entregar de una tacada al sector privado el control integral de seis hospitales. Pero el goteo de f¨®rmulas privatizadoras es un hecho y se extiende en de forma creciente en distintas autonom¨ªas, especialmente las gobernadas por el PP.
Castilla-La Mancha, La Rioja y Extremadura son algunas de las ¨²ltimas comunidades en sumarse a una corriente que tiene como alumnos aventajados a Madrid y la Comunidad Valenciana, que comenz¨® a andar este camino en 1999 con el hospital de Alzira. Las estrategias privatizadoras tambi¨¦n cuentan con ejemplos recientes en Castilla y Le¨®n, Galicia o Baleares. El caso de Catalu?a es distinto, debido a la naturaleza tan particular de su sistema de gesti¨®n sanitaria, donde tradicionalmente ha existido una estrecha relaci¨®n p¨²blico-privada.
Lo advierte la consultora PricewaterhouseCoopers (PwC) en su informe Temas candentes de la Sanidad espa?ola para 2012. En tiempos de crisis ¡°es el momento de relanzar la colaboraci¨®n p¨²blico-privada¡±, eufemismo que implica la cesi¨®n al sector empresarial de porciones de la red p¨²blica sanitaria. La situaci¨®n de asfixia financiera de las Administraciones p¨²blicas junto a la mayor eficiencia del sector privado son los principales argumentos que sostienen esta filosof¨ªa.
Varios modelos
La gesti¨®n privada de la sanidad p¨²blica es muy heterog¨¦nea, aunque se puede dividir en dos grandes grupos en funci¨®n de si el sector privado asume o no la atenci¨®n sanitaria.
- Concesi¨®n administrativa con gesti¨®n sanitaria integral. Es el llamado modelo Alzira e implica la entrega a la empresa del control sobre la parcela sanitaria (m¨¦dicos y enfermeros), y la no sanitaria (limpieza, mantenimiento, restauraci¨®n...). Puede limitarse a hospitales (como en Madrid y Castilla-La Mancha) o a todo un departamento de salud (Valencia).
- Concesi¨®n sin gesti¨®n cl¨ªnica. En este caso, la empresa, adem¨¢s de construir el hospital, asume el equipamiento, el mantenimiento y servicios auxiliares pero nunca la atenci¨®n sanitaria. Es lo que suceder¨¢ en los centros de Extremadura o Vigo.
Para los detractores del avance de la sanidad privada, la crisis no es m¨¢s que una excusa de una maniobra dirigida a debilitar la red sanitaria p¨²blica y aprovecharse de las oportunidades de negocio que ofrece.
Estas son algunas de las f¨®rmulas privatizadoras que se est¨¢n aplicando o est¨¢n pendientes de desarrollar en Espa?a.
- Castilla-La Mancha. La autonom¨ªa que preside Dolores de Cospedal tiene previsto sacar a licitaci¨®n la gesti¨®n integral (de servicios tanto sanitarios como no sanitarios) de los hospitales p¨²blicos de Almansa y Villarobledo, ambos en Albacete; y Tomelloso y Manzanares, en Ciudad Real.
La modalidad elegida para esta concesi¨®n administrativa es el denominado modelo Alzira. Bajo esta f¨®rmula, la Administraci¨®n traslada a una empresa la responsabilidad de atender las necesidades asistenciales de los habitantes de un departamento de salud (normalmente de unos 200.000 habitantes), a cambio de pagar una cuota por el cuidado de cada uno de estos habitantes (639 euros por cabeza en la Comunidad Valenciana). El modelo Alzira tiene una versi¨®n reducida (solo el hospital) y una ampliada (el hospital y los centros de salud que dependen de ¨¦l). El Gobierno de Cospedal ha apostado por la ampliada, como indica una portavoz de la Consejer¨ªa de Sanidad de la Junta.
La concesionaria puede tener que construir o no el hospital. Este no es el caso de los cuatro hospitales que se ceder¨¢n a la ¨®rbita privada. Pero s¨ª podr¨ªa serlo en el hospital de Toledo, cuyas obras se han paralizado y del que a¨²n no se ha decidido el tipo de gesti¨®n que seguir¨¢.
- La Rioja. Esta autonom¨ªa acaba de sacar a concurso la gerencia de la Fundaci¨®n Hospital de Calahorra, un centro p¨²blico con personal no funcionario. Es una modalidad muy particular: ¡°En lugar de una persona, quien ocupar¨¢ la direcci¨®n del centro ser¨¢ una empresa de forma que aporte su conocimiento a la gerencia del hospital¡±, explica a este diario el consejero de Sanidad, Jos¨¦ Ignacio Nieto. El precio de partida de la licitaci¨®n es de 415.000 euros, aunque tiene complementos variables en funci¨®n de los ahorros que pueda introducir la empresa, que tomar¨¢ el control de la parcela tanto sanitaria como no sanitaria.
- Extremadura. El Gobierno de Jos¨¦ Antonio Monago (PP) ha optado por la f¨®rmula de la concesi¨®n administrativa para dos de sus hospitales, pero a diferencia de Castilla-La Mancha, solo ceder¨¢ al sector privado el ¨¢rea no asistencial, mientras que se reservar¨¢ el control de las batas blancas, es decir, de todo lo que hace referencia al personal y los servicios sanitarios. Es el modelo PFI (iniciativa de financiaci¨®n privada). A cambio del canon anual que se entregar¨¢ a las empresas adjudicatarias, adem¨¢s de los servicios auxiliares (catering, mantenimiento, limpieza), se har¨¢n cargo de la construcci¨®n de los inmuebles.
Los centros elegidos para introducir la gesti¨®n privada en la sanidad p¨²blica extreme?a son el hospital de C¨¢ceres, cuya construcci¨®n se encuentra paralizada, y el de Don Benito-Villanueva, que debe levantarse desde los cimientos. De momento, seg¨²n una portavoz del departamento de Sanidad, se est¨¢n preparando las plicas y los contratos no saldr¨¢n a concurso hasta 2013.
- Madrid. La llegada de Esperanza Aguirre a la presidencia de la comunidad aut¨®noma abri¨® la puerta de la sanidad p¨²blica al sector privado y su sucesor, Ignacio Gonz¨¢lez, ha doblado la apuesta. Hasta el momento, exist¨ªan tres hospitales (Valdemoro, Torrej¨®n y M¨®stoles) y uno m¨¢s en proyecto (Collado Villalba) cuya gesti¨®n estaba totalmente privatizada. Junto a ellos, coexist¨ªan otros siete centros semiprivados, en los que la administraci¨®n solo manten¨ªa las riendas de la asistencia sanitaria. Gonz¨¢lez ha decidido entregar seis de estos siete hospitales ¡ªInfanta Leonor (Vallecas), Infanta Sof¨ªa (San Sebasti¨¢n de los Reyes), Infanta Cristina (Parla), Hospital del Henares, del Sureste y el del Tajo¡ª a la gesti¨®n privada integral (servicios sanitarios y no sanitarios), por lo que se sumar¨¢n a los otros cuatro que ya la ten¨ªan. Ello supondr¨¢ la consolidaci¨®n del modelo Alzira ¡ªrebautizado Valdemoro en Madrid¡ª fuera de la autonom¨ªa que lo impuls¨®.
El retroceso de peso del sector p¨²blico frente al privado tambi¨¦n afectar¨¢ a la atenci¨®n primaria. Si bien, de momento, el control de los centros de salud no se entrega a las empresas que controlan sus hospitales de referencia (como s¨ª suceder¨¢ en Castilla-La Mancha o ya ocurre en la Comunidad Valenciana), se externalizar¨¢ el 10% de los ambulatorios de la regi¨®n. El Gobierno madrile?o ha apuntado la posibilidad de hacerlo mediante la modalidad de las entidades de base asociativas (una especie de cooperativa de m¨¦dicos), aunque tambi¨¦n podr¨¢n ser gestionadas por consorcios o fundaciones.
- Comunidad Valenciana. Esta autonom¨ªa es la cuna de la privatizaci¨®n de la gesti¨®n de la red sanitaria p¨²blica, una opci¨®n que alent¨® Eduardo Zaplana en 1999 con la apertura del hospital de Alzira y que defendi¨® como el estandarte de la pol¨ªtica del PP en materia sanitaria. El inicio fue titubeante y necesit¨® un rescate para darle impulso. En principio, a la uni¨®n de empresas adjudicatarias se le cedi¨® solo el control integral del hospital ¡ªcomo sucede en Madrid¡ª. Pero, finalmente, se reformul¨® el contrato y se extendi¨® la gesti¨®n privada a los centros de salud de todo el departamento sanitario, un factor muy importante, porque en los centros de salud est¨¢ el control de acceso a los pacientes que llegan al hospital (y, por ello, la llave del control del gasto).
Bajo este nuevo dise?o de gesti¨®n total de servicios sanitarios y no sanitarios de toda el ¨¢rea de salud (centros de salud y hospitales), la f¨®rmula se extendi¨®. El centro de Alzira dio paso a los hospitales hermanos de Torrevieja, D¨¦nia, Manises y Elche, el ¨²ltimo en abrir las puertas, en 2010. En estos momentos, los servicios p¨²blicos de salud del 20% de la poblaci¨®n valenciana, en torno a un mill¨®n de habitantes, dependen de empresas privadas.
- Galicia. El Gobierno gallego ha optado por un modelo semiprivado para acometer el macrohospital de 1.465 camas que se est¨¢ construyendo en Vigo. La modalidad elegida es el PFI: en encargar al sector privado la construcci¨®n del centro, el mantenimiento y el equipamiento de las instalaciones, as¨ª como ceder los servicios no sanitarios a cambio de una cuota anual. Como sucede con los dos hospitales en proyecto de Extremadura, se trata de la primera iniciativa de esta comunidad aut¨®noma en la que se acude al sector privado para construir infraestructuras sanitarias p¨²blicas.
- Baleares y Castilla y Le¨®n. Ambas autonom¨ªas han recurrido a la f¨®rmula PFI con matices. El hospital Son Espasses (Palma de Mallorca) ha entregado a la concesionaria la construcci¨®n, el equipamiento, el mantenimiento y los servicios no m¨¦dicos. El de Burgos, adem¨¢s, la alta tecnolog¨ªa.
¡°Lo de Alzira ahora ya no tiene sentido¡±
Justo en el momento en que la Comunidad de Madrid ha ampliado a otros seis hospitales el modelo Alzira, la f¨®rmula de privatizaci¨®n sanitaria que consiste en ceder la gesti¨®n integral de un hospital p¨²blico o un departamento de salud entero a una empresa privada, la Generalitat valenciana, responsable de su dise?o e impulsora de su expansi¨®n, no cuenta entre sus planes de futuro con extender el modelo a nuevos centros. ¡°Ahora mismo, para nosotros ya no tiene sentido extender esta f¨®rmula a otras zonas de salud¡±, se?ala a este diario una portavoz de la Consejer¨ªa de Sanidad valenciana.
Y ello a pesar de que el Gobierno valenciano cuenta con dos hospitales ya construidos que no es capaz de poner en marcha por falta de fondos para equiparlos y que resultar¨ªan unos candidatos ideales para cederlos al sector privado. Son los hospitales de Lliria (120 camas) y Gandia (240). Tambi¨¦n hubo un momento en el que la Generalitat se plante¨® extender el modelo privatizador a hospitales de media y larga estancia, lo que hubiera resultado, una vez m¨¢s, toda una novedad en el escenario de la privatizaci¨®n de recursos p¨²blicos.
Pero la Generalitat valenciana anda en estos momentos metida en otra batalla relacionada tambi¨¦n con la gesti¨®n sanitaria que, de nuevo, ha situado a esta comunidad en el punto de mira de la experimentaci¨®n en la privatizaci¨®n de servicios. Y esta iniciativa es incompatible con nuevos alziras, seg¨²n las autoridades valencianas.
Se trata del denominado modelo de gesti¨®n compartida. En esencia, consiste en agrupar todos los servicios no sanitarios de los 18 departamentos de salud en los que se divide la Comunidad Valenciana y concentrarlos en pocas manos (privadas), para potenciar las econom¨ªas de escala y reducir costes.
La idea original consist¨ªa en ceder al sector privado parcelas asistenciales. Pero, finalmente, tras distintas reformulaciones, el dise?o final consiste en concentrar todos los servicios externalizados de la sanidad valenciana. Se han dividido en tres grandes grupos: servicios generales (limpieza, lavander¨ªa, restauraci¨®n, mantenimiento), servicios concertados (oxigenoterapia, hemodi¨¢lisis) y log¨ªstica (almacenes, distribuci¨®n, compra). De los dos primeros se sacar¨¢n a concurso siete lotes y del tercero, tres.
De esta forma, la Generalitat solo se concentrar¨¢ en la gesti¨®n sanitaria. Todo lo dem¨¢s, depender¨¢ de unos pocos operadores privados. ?Y los hospitales paralizados? ¡°Ya se finalizar¨¢n cuando haya posibilidades econ¨®micas¡±, dice la Generalitat.
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