Los Propagandistas cat¨®licos piden ¡°coraje y rigor moral¡± a sus pol¨ªticos

Coraje y rigor moral. Los pol¨ªticos cat¨®licos tienen desde ayer esta reclamaci¨®n de la Asociaci¨®n Cat¨®lica de Propagandistas (ACdP) y de la Fundaci¨®n Universitaria San Pablo CEU. Se contiene en el manifiesto del congreso Cat¨®licos y Vida P¨²blica, celebrado este fin de semana bajo el t¨ªtulo Un nuevo compromiso social y pol¨ªtico. Del Concilio Vaticano II a la Nueva Evangelizaci¨®n. El cardenal Antonio Mar¨ªa Rouco cerr¨® el ¨®rdago con esta afirmaci¨®n: ¡°Las crisis nunca se resuelven contra Dios. Si alguien conoce de alguna crisis de la que se haya salido contra Dios, que lo diga¡±. Rouco clausur¨® el multitudinario congreso arropado por el presidente de la ACdP, Carlos Romero; el director general de la Fundaci¨®n San Pablo CEU, Ra¨²l Mayoral, y el director del congreso, Rafael Ortega.

?El Vaticano II, hace 50 a?os, anunci¨® una primavera para el catolicismo. No tienen esa impresi¨®n sus actuales dirigentes, que ven enemigos por doquier. Entre los pesimistas, sobresale Marcelino Oreja, que fue jefe de gabinete de Fernando Mar¨ªa Castiella, el poderoso ministro de Exteriores de Franco, y ¨¦l mismo responsable de esa cartera en los Gobiernos de Su¨¢rez.

Al servicio del Vaticano Oreja dibuja ahora un contexto muy pesimista. ¡°Negar a la Iglesia legitimidad para su expresi¨®n es inmoral y antidemocr¨¢tico¡±, dijo, dando por sentado que existe esa pretensi¨®n. Su relato de la transici¨®n desde el nacionalcatolicismo franquista (del que la jerarqu¨ªa cat¨®lica fue principal soporte, a cambio de incontables privilegios), al actual pluralismo religioso abri¨® el congreso. Oreja fue protagonista principal en las dos etapas, y el ministro que firm¨® en Roma, en 1976 y 1979, sucesivas renovaciones del siniestro Concordato de 1953. Ahora reconoce que los acuerdos, muy beneficiosos para Roma, se cerraron antes de la aprobaci¨®n de la Constituci¨®n (diciembre de 1978), pero que se acord¨® retrasar la firma, por prudencia, a enero de 1979.

¡°Es de lo que mejor me acuerdo de mi vida pol¨ªtica¡±, confiesa Oreja, ¡°preocupado¡±, dice, de que su condici¨®n de propagandista cat¨®lico pudiera interferir en sus obligaciones como ministro de Su¨¢rez. Miembro destacado de la ACdP desde hace 50 a?os, parec¨ªa responder a quienes tachan de preconstitucional lo concordado por ¨¦l a la muerte de Franco y le acusan de haber estado m¨¢s al servicio del Vaticano que de Espa?a.