Persiguiendo al calamar gigante en Asturias
Varias expediciones espa?olas han buscado el 'Architeuthis dux'
En las costas de Asturias, y desde hace muchos a?os, los ejemplares de Architeuthis son tema de conversaci¨®n de las gentes del mar. Ellos los llaman peludines, debido al aspecto pelado que muestran cuando son izados a bordo despu¨¦s de un arrastre de varias horas, avistados flotando sobre la superficie del mar o varados en la costa. Poca atenci¨®n hab¨ªan recibido estos calamares gigantes ¡ªahora de actualidad por haberse conseguido en aguas de Jap¨®n la primera filmaci¨®n de un ejemplar en su medio natural¡ª por parte de los cient¨ªficos asturianos, y tambi¨¦n espa?oles en general, hasta que Luis Laria, presidente de la Coordinadora para la Protecci¨®n de las Especies Marinas (Cepesma) llam¨® la atenci¨®n sobre ellos, al contactar con el grupo de investigaci¨®n de Ecolog¨ªa y Biodiversidad (Ecobiomar) del Instituto de Investigaciones Marinas que el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas tiene en Vigo. All¨ª yo (su director), y mis colaboradores, en especial ?ngel F. Gonz¨¢lez, llev¨¢bamos a?os estudiando los cefal¨®podos y ya hab¨ªamos tenido en nuestras manos varios ejemplares, pero procedentes de Namibia y Sud¨¢frica.
En el invierno de 1995 efectuamos la disecaci¨®n del primer ejemplar de las costas cant¨¢bricas, una hembra inmadura de 104 kilogramos de peso, en Luarca, y desde entonces las operaciones de esta ¨ªndole se han sucedido ininterrumpidamente, hasta completar el n¨²mero de 27 ejemplares hasta la fecha. La frecuencia de calamares gigantes en los caladeros de Carrandi, pr¨®ximos a los ca?ones submarinos de Llanes, Lastre y Avil¨¦s, la proximidad de la zona, a menos de 30 millas al norte de la costa, y la existencia de un puerto base ¨CGij¨®n- con todas las facilidades para operaciones log¨ªsticas de gran envergadura, nos llev¨® a sopesar la posibilidad de organizar expediciones cient¨ªficas para tratar de filmar, por primera vez, esas extraordinarias y huidizas criaturas, donde las expediciones internacionales realizadas en Kaikoura hab¨ªan fracasado. As¨ª naci¨® el proyecto Kraken que se concret¨® en colaboraci¨®n con la productora de documentales Transglobe Films.
Suele haber de calamares gigantes en los caladeros pr¨®ximos a los ca?ones submarinos de Llanes, Lastre y Avil¨¦s
Ese proyecto se concibi¨® en cinco acciones: en primer lugar, una precampa?a en 2001 para conocer a fondo la batimetr¨ªa, la topograf¨ªa y el ecosistema donde moran esas criaturas en Asturias; en segundo t¨¦rmino, varias expediciones, la segunda a realizarse en verano de 2003; en tercer lugar, la producci¨®n de un documental; en cuarto, la presentaci¨®n de los resultados en exposiciones por toda Espa?a; y por ¨²ltimo, la edici¨®n de un libro donde se sintetizasen todas las operaciones, resultados y descubrimientos del proyecto.
La expedici¨®n preliminar o precampa?a zarp¨® del puerto de Gij¨®n el 5 de octubre de 2001 a bordo de los buques Cient¨ªfico e Investigador, de 52 y 44 metros de eslora respectivamente. Veintid¨®s miembros de la expedici¨®n, entre cient¨ªficos y t¨¦cnicos, bajo mi direcci¨®n, y 18 tripulantes se involucraron en el proyecto durante una intensa semana. La enorme profundidad en la que viven estos animales requiri¨® el empleo de material t¨¦cnico muy sofisticado, capaz de soportar presiones de hasta 100 atm¨®sferas y temperaturas cercanas a dos grados cent¨ªgrados. Tres sistemas de c¨¢maras sujetas a boyas en superficie con un sofisticado sistema de grabaci¨®n, ¨²til para m¨¢s de 15 d¨ªas de trabajo ininterrumpido (equipo original dise?ado ex profeso por Joaqu¨ªn Gracia), y comunicadas con la cabina de recepci¨®n- Calipso- mediante cable de fibra ¨®ptica, una c¨¢mara m¨®vil, y un veh¨ªculo submarino operado por control remoto (ROV), capaz de descender hasta 300 metros de profundidad, y asimismo equipado con otra c¨¢mara fueron los sistemas empleados para filmar en completa oscuridad al Kraken. Parte importante en esta expedici¨®n fueron los sistemas de atracci¨®n utilizados, compuestos por cebos ac¨²sticos, luminosos y org¨¢nicos.
Tras levantar un plano topogr¨¢fico detallado del fondo mediante ecosondas, se delimit¨® la zona de trabajo, consistente en un tri¨¢ngulo equil¨¢tero de dos millas de lado, en cuyos v¨¦rtices se logr¨® colocar una de las tres boyas mencionadas, con su c¨¢mara fija. A la par se realizaron perfiles de temperatura, salinidad y profundidad as¨ª como pescas de plancton mediante redes Bongo. Todo ello con objeto de precisar las condiciones hidrogr¨¢ficas del h¨¢bitat donde viven los calamares gigantes en el caladero de Carrandi, as¨ª como para tratar de capturar larvas y juveniles de los mismos, que son desconocidas, junto con su fauna acompa?ante. Pese al mal tiempo atmosf¨¦rico siempre presente, en esa precampa?a se puso a punto la metodolog¨ªa de trabajo, se conjuntaron los equipos humanos, a la par que se adquirieron importantes datos que proporcionaron una visi¨®n bastante precisa, y novedosa, de las caracter¨ªsticas del ecosistema donde moran estos gigantes marinos.
Un museo de Luarca es el que m¨¢s n¨²mero de Architeuthis dux tiene en el mundo
La segunda campa?a se desarroll¨® del 10 al 27 de septiembre de 2002. Esta vez la meteorolog¨ªa acompa?¨® y se pudieron situar en los v¨¦rtices del tri¨¢ngulo las tres c¨¢maras fijas, que filmar¨ªan a 550, 660 y 780 metros de profundidad, grabando durante 24 horas seguidas los 15 d¨ªas previstos.
Desgraciadamente, y por causas desconocidas, la primera boya desapareci¨® al sexto d¨ªa llev¨¢ndose con ella toda la grabaci¨®n efectuada. Esa boya estaba ubicada a poco m¨¢s de 200 metros de donde una pareja de arrastreros captur¨® un Architeuthis macho de 43 kilogramos, que fue trasladado a bordo del Investigador, donde fue examinado por los sorprendidos cient¨ªficos de Ecobiomar y Oscar Soriano, bi¨®logo del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN). Se trataba del primer macho capturado al sur del paralelo 55? N, estaba funcionalmente maduro, y mostraba esperma en varios de sus brazos.
Se trabaj¨® con la c¨¢mara m¨®vil y con el veh¨ªculo submarino aut¨®nomo, obteni¨¦ndose cientos de horas de filmaci¨®n que guardaban im¨¢genes originales y novedosas de organismos de diferentes ecosistemas, pero ninguna del calamar gigante. En la primavera de 2003 se inaugur¨® en el MNCN, en Madrid, una exposici¨®n sobre el proyecto donde se expusieron los materiales utilizados. Durante seis meses, los visitantes pudieron contemplar el interior de las boyas donde se instal¨® el avanzado sistema de grabaci¨®n en discos duros, las c¨¢maras y los cebos utilizados, el buque Investigador y los sistemas de posicionamiento con los que se instalaron las c¨¢maras, las im¨¢genes del abismo y las criaturas que lo pueblan... Toda la informaci¨®n, en fin, de lo que ha sido la campa?a y de lo que es el abismo cant¨¢brico donde se llevaron a cabo los rodajes. Y, por supuesto, todo lo que se sabe hasta la fecha sobre los calamares gigantes y, en concreto sobre las dos especies ¡°estrella¡± del caladero de Carrandi: el Architeuthis y el Taningia danae con dos espectaculares maquetas a tama?o real, con las que el p¨²blico, que acudi¨® en gran n¨²mero al museo, pudo sentir la sensaci¨®n de estar cara a cara frente a un aut¨¦ntico Kraken. El ¨¦xito de esa exposici¨®n ha llevado a que el Museo del Mar de Galicia, en Vigo, se interesara por ella, all¨ª se inaugur¨® en septiembre de 2004.
El 1 de marzo de 2004, la segunda cadena de Televisi¨®n Espa?ola, pas¨® el documental de 53 minutos El proyecto Kraken: en busca del calamar gigante. Dirigido por Fernando Gonz¨¢lez Sitges y producido por Javier Linares, ese documental de Transglobe Films muestra en im¨¢genes las vivencias de este proyecto, as¨ª como la biolog¨ªa del calamar gigante, su historia y la aventura que supone intentar capturarlo en im¨¢genes. Ya se ha traducido a varios idiomas y proyectado en otras cadenas de televisi¨®n de todo el mundo.
El CSIC ha trabajado en un proyecto que ha demostrado con ADN que hay una ¨²nica especie en el mundo
La vida ha seguido y aunque no ha habido posibilidad de nuevas campa?as, se han seguido diseccionado calamares gigantes varados o capturados en toda la pen¨ªnsula Ib¨¦rica. El Museo del Calamar Gigante en Luarca [http://www.cepesma.org/quienes-somos/centro-del-calamar-gigante/] es el que m¨¢s n¨²mero de Architeuthis dux tiene en el mundo. Hemos seguido publicando en revistas nacionales e internacionales, as¨ª como libros y art¨ªculos de divulgaci¨®n. Actualmente, el calamar gigante puede considerarse un invertebrado marino emblem¨¢tico para favorecer la educaci¨®n ambiental y la protecci¨®n de los ambientes marinos, sobre todo de los ca?ones submarinos. Hay calamares espa?oles en muchos museos del mundo, especialmente es de rese?ar el macho y la hembra del Ocean Hall [http://www.mnh.si.edu/exhibits/ocean_hall/] en el Museo Nacional de Historia Natural (Washington DC).
Hemos trabajado en un proyecto donde se ha puesto de manifiesto mediante ADN que hay una ¨²nica especie en el mundo. Tambi¨¦n hemos contribuido a demostrar que los ruidos submarinos de origen humano son nocivos para estos grandes calamares, y, por ello, a mejorar en algo las normas para disminuir este impacto en los organismos marinos. En fin, que aunque los calamares gigantes no sean el motivo principal de nuestras investigaciones, constituyen un material muy interesante, aunque espor¨¢dico, para investigaciones y, adem¨¢s, de gran atractivo para la gente en general.
?ngel Guerra, experto en Ecolog¨ªa y Biodiversidad marina, trabaja en el Instituto de Investigaciones Marinas (CSIC, Vigo)
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