Alemania proh¨ªbe la zoofilia

El Bundesrat, la C¨¢mara que representa a los estados federados alemanes, aprob¨® el viernes pasado una reforma a una ley federal que puso fin a una agitada y curiosa pol¨¦mica que naci¨® el a?o pasado y que hab¨ªa dejado al desnudo un pol¨¦mico y oscuro cap¨ªtulo de la sociedad alemana. Por primera vez, el Bundesrat decidi¨® prohibir el "uso de animales para actividades sexuales", un pecado que ser¨¢ castigado con multas que ascienden a los 25.000 euros.

Aunque Alemania hab¨ªa sido tolerante en el pasado con la pr¨¢ctica de la zoofilia, decidi¨® aceptar en 2012 una antigua reclamaci¨®n de las asociaciones que protegen a los animales y que exig¨ªan que la pr¨¢ctica sexual entre seres humanos y animales fuera prohibida en el pa¨ªs. La iniciativa de las asociaciones civiles fue apoyada por el Ministerio de Agricultura que redact¨® una reforma a una ley federal.

En diciembre pasado, el Bundestag aprob¨® la reforma a la ley, una decisi¨®n que ignor¨® una protesta iniciada por el grupo Compromiso Zo¨®filo para la Tolerancia y la Claridad (ZETA en sus siglas en alem¨¢n) que dirige Michael Kiok, un bibliotecario de M¨¹nster y que mantiene una apasionada relaci¨®n amorosa con su perra de raza pastor alem¨¢n, Cissy, desde hace siete a?os.

El grupo ZETA inici¨® una campa?a nacional para impedir la prohibici¨®n de la zoofilia con un argumento contundente. "Las leyes morales, tales como la prohibici¨®n de la zoofilia, no tienen nada que hacer en un Estado de derecho", repiti¨® Kiok en un sinn¨²mero de entrevistas que fueron publicadas en la prensa germana, en un in¨²til intento para impedir la iniciativa legal que llev¨® a cabo el Parlamento Federal alem¨¢n en diciembre pasado entrara en vigor. "Es m¨¢s f¨¢cil comprender a los animales que, por ejemplo, a la mujeres", dijo el bibliotecario al peri¨®dico Tagesspiegel.

Kiok, que estuvo casado, confes¨® que hab¨ªa oprimido durante a?os su inclinaci¨®n por los animales despu¨¦s de haber tenido su "primera experiencia a los 15 a?os", llego el viernes a Berl¨ªn para participar en una manifestaci¨®n de protesta que se realiz¨® frente a la sede del Bundesrat.

"Nos sentimos como criminales" admiti¨® el bibliotecario, quien confes¨® que al menos otros 100.000 alemanes que practican regularmente la zoofilia en el pa¨ªs, compart¨ªan su sufrimiento. Datos de organizaciones civiles elevan el n¨²mero hasta dos millones de personas, una cifra dif¨ªcil de comprobar.

Mientras los representantes de los estados federados, reunidos en el plenario del Bundesrat iniciaban el tr¨¢mite para aprobar 17 nuevas leyes federales, en la calle los zo¨®filos exhib¨ªan carteles donde se pod¨ªan leer frases apropiadas al mundo del bestialismo: "Amamos a los animales"; "Rechazamos todo tipo de violencia y abusos que pueda causar sufrimientos y nos duele el alma ver sufrir a los animales"; "No podemos hacer nada contra nuestras inclinaciones, por eso ejercemos nuestras inclinaciones con responsabilidad".

Despu¨¦s de conocer el resultado de la reuni¨®n del Bundesrat, Michael Kiok abandon¨® la manifestaci¨®n con la derrota marcada en su rostro. El hombre que dio la cara para defender la zoofilia tendr¨¢ que separarse de Cissy para evitar pagar una multa de 25.000 euros, al igual que toda la familia de zo¨®filos que viven en el pa¨ªs.

A pesar de la derrota legal, Kiok admiti¨® que su grupo ZETA recurrir¨¢ a la Corte Suprema para invalidar la ley que proh¨ªbe el sexo entre seres humanos y animales en el pa¨ªs. La ley aprobada el viernes por el Bundesrat deber¨¢ ser ratificada por el presidente de Alemania, Joachim Gauck.