El ¡®boom¡¯ de la prensa digital latinoamericana
Un 'boom' de publicaciones digitales agita el periodismo de la regi¨®n
En los congresos de periodistas latinoamericanos se habla mucho de literatura, pol¨ªtica, crimen organizado y hasta de ron y cumbia, llegada la hora. A esos temas ¨²ltimamente se ha a?adido un par m¨¢s: Google Analytics y Twitter. Una veintena de p¨¢ginas web repartidas por todo el continente est¨¢ haciendo periodismo con est¨¢ndares altos de calidad. Una mezcla de profesionales con experiencia en los medios tradicionales y j¨®venes nativos digitales fiscaliza a los Gobiernos y documenta la historia del narcotr¨¢fico en una zona donde ejercer esta profesi¨®n resulta en ocasiones peligroso.
Esta forma de periodismo no podr¨ªa existir sin las facilidades y los bajos costos que proporciona la Red a la difusi¨®n de las noticias. ¡°Desde M¨¦xico hasta la Patagonia hay montones de ejemplos. Se nutren de investigaciones, algo que en estos pa¨ªses era poco com¨²n¡±, reflexiona Rosental Alves, el director del Centro Knigth para el Periodismo en las Am¨¦ricas de la Universidad de Texas.
Estos medios en l¨ªnea son, para Rosental, una prueba fant¨¢stica de que es posible hacer un buen trabajo con una redacci¨®n peque?a y relativamente barata. ¡°Se est¨¢ gestando algo¡±, responde el profesor cuando se le pregunta si existe un boom period¨ªstico en la regi¨®n.
Plaza P¨²blica, de Guatemala forma parte de este movimiento. A sus fundadores les gusta decir que hacen slow journalism (periodismo reposado): llegan tarde al escenario de la noticia, casi siempre cuando todos los periodistas de otros medios se han ido, e intentan reconstruir el rompecabezas de lo ocurrido. El proyecto naci¨® financiado en dos terceras partes por la Universidad jesuita Rafael Land¨ªvar. Su vocaci¨®n fue desde el principio la de contar las entretelas del poder. Comenzaron cuatro periodistas y ahora mismo integran la plantilla 15 personas. Entre ellas, un ingeniero inform¨¢tico que baja y clasifica informaci¨®n p¨²blica con ayuda de robots y un antrop¨®logo con experiencia en estad¨ªstica para hacer an¨¢lisis.
Los medios tradicionales tambi¨¦n se han subido a la Red
¡°Al nacer pens¨¢bamos que pod¨ªamos ser un complemento para los medios tradicionales, no la competencia¡±, cuenta Mart¨ªn Rodr¨ªguez Pellecer, el director. La p¨¢gina web logr¨® un acuerdo con Wikileaks para obtener los documentos secretos sobre su pa¨ªs revelados por Julian Assange y de ese material se ayudaron para escribir los perfiles de los candidatos a las ¨²ltimas elecciones en el pa¨ªs. En otra investigaci¨®n denunciaron que la industria del az¨²car, el sector m¨¢s poderoso de Guatemala, empleaba a ni?os. Plaza P¨²blica tiene unas 90.000 visitas al mes de 50.000 usuarios ¨²nicos, una cifra nada despreciable en un pa¨ªs donde solo hay tres millones de personas con acceso a Internet, una de cada tres.
Una pol¨¦mica vivida hace pocas semanas demuestra sus intentos por fomentar la transparencia. El director decidi¨® quitar una columna de opini¨®n y cerr¨® el blog a dos colaboradores por criticar al Papa. Los columnistas habituales de la web firmaron una carta en la que consideraban el hecho como censura. El director replic¨® que era una frontera editorial que hab¨ªan acordado no traspasar por su vinculaci¨®n con la universidad. ¡°Para explicarlo mejor quedamos en un caf¨¦. Nos agarramos a tomatazos pero fue un debate de altura. Result¨® una experiencia fascinante de rendici¨®n de cuentas a los lectores y a los columnistas¡±, rememora Rodr¨ªguez Pellecer.
Volviendo al debate, para el director de Plaza P¨²blica lo mejor de la regi¨®n se est¨¢ haciendo en la Red: ¡°Hay un boom de la web latinoamericana. El mejor periodismo se est¨¢ haciendo online¡±.
¡°Los pol¨ªticos nos tratan con desd¨¦n¡±, afirma el director de Animal Pol¨ªtico
Hay opiniones en contra de esta frase tan rotunda. Los medios tradicionales tambi¨¦n se han subido al tren de Internet y de la cr¨®nica period¨ªstica. Se enfrentan a los mismos problemas de seguridad por andar husmeando en temas espinosos. Salvador Frausto, editor general de la revista Domingo del peri¨®dico mexicano El Universal, cree que existe ese boom en la regi¨®n pero considera que no es exclusivo de los medios nativos digitales. M¨¢s bien cree que es culpa de Garc¨ªa M¨¢rquez. ¡°Los que hacemos periodismo narrativo e investigaci¨®n hemos pasado por cursos o talleres de su fundaci¨®n. Descubrimos ah¨ª que la cr¨®nica es el modelo m¨¢s acertado para retratar la realidad. Despu¨¦s se puede hablar de formatos, pero el esfuerzo y las ganas de unos y otros son similares¡±, dice Frausto.
Lo que llama la atenci¨®n es el gran protagonismo que han adquirido los medios online en tan poco tiempo. Este fen¨®meno se produce a pesar del escaso desarrollo de las telecomunicaciones en algunas partes del continente, pero parad¨®jicamente se vale del consumo masivo de las redes sociales por parte de los j¨®venes. Esa constante interconectividad permite a las webs mantener un di¨¢logo abierto con sus lectores. ¡°Prueba enviar un tuit a los grandes medios. No te van a contestar. No hay nadie al otro lado¡±, reta Daniel Moreno, director de Animal Pol¨ªtico, un portal mexicano.
En M¨¦xico se recogen firmas para que se aumente el n¨²mero de megas
Ram¨®n Alberto Garza, fundador de Reporte ?ndigo, estaba dispuesto al di¨¢logo. Arm¨ªn G¨®mez Barrios, miembro de la c¨¢tedra? Sociedad de la Informaci¨®n y el Conocimiento?del Tecnol¨®gico de Monterrey, cree que el de Garza es un caso paradigm¨¢tico. ¡°Se deslig¨® de dos gigantes como Televisa y Reforma y fund¨® su propia revista digital, lo que atrajo la atenci¨®n de inversores. Otros siguieron su ejemplo¡±, escribe v¨ªa correo electr¨®nico.
Garza puso en marcha en 2006 una redacci¨®n centrada en la investigaci¨®n y en seguir una agenda propia. ¡°A eso sumamos otra forma de producir informaci¨®n a?adiendo lo multimedia. El v¨ªdeo, las im¨¢genes y el hecho de estar en contacto con la gente por redes sociales nos enriqueci¨® mucho¡±, cuenta. En 2007, el portal gan¨® el International Summit Award 2007, un premio de Naciones Unidas a la mejor experiencia web.
Lo curioso es que Reporte ?ndigo ha seguido el camino inverso a los dem¨¢s medios. Surgi¨® en Internet pero hace 10 meses lanz¨® la edici¨®n impresa. ?No convierte eso a Garza en un kamikaze? ¡°No¡±, contesta, ¡°pens¨¢bamos que la conexi¨®n a redes iba a ser mejor para estas fechas pero no es as¨ª. No queremos marginar a buena parte de la poblaci¨®n mexicana¡±. Otro ejemplo es Animal Pol¨ªtico. La redacci¨®n, en el barrio de La Condesa del DF, est¨¢ decorada por hombres de traje con cabezas de animal. Cuenta con 17 trabajadores y 1,7 millones de visitantes ¨²nicos al mes, seg¨²n Daniel Moreno, que cree que el inter¨¦s de los j¨®venes por la informaci¨®n es uno de los factores clave para explicar el fen¨®meno, pero no el ¨²nico. La agenda de la sociedad civil y la de los propios j¨®venes marcan la pauta del portal.
El problema son las finanzas: el 57% de estas p¨¢ginas genera p¨¦rdidas
¡°Los medios tradicionales, por lo menos en M¨¦xico, generan informaci¨®n sobre la clase pol¨ªtica y para la clase pol¨ªtica (¡) hay poca cobertura de los temas ciudadanos, de la sociedad civil, que son los temas que m¨¢s consumen los j¨®venes¡±, explica. Las noticias m¨¢s le¨ªdas en su portal en 2012 tienen que ver con el Yo Soy 132, un movimiento en M¨¦xico que reivindica la limpieza de las instituciones.
?Cu¨¢l es la relaci¨®n de los medios digitales con el poder? ¡°Nos tratan con desd¨¦n. A la clase pol¨ªtica los medios digitales no le parecen importantes porque estos hablan con los j¨®venes y es un p¨²blico que no conocen. Son mundos diferentes¡±, agrega.
El de los j¨®venes transita por Twitter y Facebook. Latinoam¨¦rica es la regi¨®n m¨¢s involucrada en redes sociales a nivel global, seg¨²n un estudio de junio de 2012 de Comscore. Solo en abril de ese a?o, 175 millones de latinos mayores de 15 a?os visitaron al menos una red social. En M¨¦xico, donde hay otras webs interesantes como Sin Embargo o R¨ªo Doce de Sinaloa, varias asociaciones civiles est¨¢n recaudando firmas para sacar adelante la primera iniciativa ciudadana en la historia del pa¨ªs, Libre Internet para Todos. Con ese plan se espera que el 90% de la poblaci¨®n tenga una conexi¨®n de cinco megas de velocidad en cuatro a?os. Visto as¨ª, en el futuro habr¨¢ m¨¢s lectores para estos medios.
Rosental, en cambio, le resta importancia a la brecha digital que sufre la regi¨®n y no cree que sea un factor decisivo. ¡°La gente olvida que esa brecha siempre existi¨®. La circulaci¨®n de peri¨®dicos en estos pa¨ªses es peque?a. Todos los diarios de un mismo pa¨ªs latinoamericano no suman lo que uno metropolitano en Estados Unidos. Estos no son medios de masas. Ahora estamos m¨¢s all¨¢, estamos frente a una masa de medios¡±, reflexiona.
Garc¨ªa M¨¢rquez: ¡°El mundo se le escap¨® al periodismo y hay que reinventarlo¡±
Hasta Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez parece que ha dicho algo al respecto. En una reuni¨®n de la Fundaci¨®n Nuevo Periodismo Latinoamericano (FNPI) dio su visi¨®n sobre la llegada del periodismo digital: ¡°Lo que sucede es que el mundo se le escap¨® al periodismo y ahora este debe reinventar el mundo¡±.
La cita la concede Jaime Abello Banfi, director de la FNPI. ¡°Estamos en una mudanza del papel a la web y se est¨¢n haciendo cosas muy interesantes, grandes cronistas escriben en medios online", se?ala. Abello encuentra especialmente interesantes los medios nativos digitales que nacen de manera independiente. Su preocupaci¨®n es que no logren autofinanciarse. La mayor¨ªa arrastra problemas financieros. El 57%, seg¨²n un estudio de la FNPI elaborado por Angel Alay¨®n, genera p¨¦rdidas. Solo el 18,5% declar¨® generar ingresos mayores a sus costos.
M¨¢s all¨¢ del dinero, han ido poco a poco obteniendo reconocimiento internacional y la prensa extranjera ha comenzado a utilizarlos como una fuente fiable. Will Grant, periodista de la oficina de la BBC en M¨¦xico, dice que ¡°muchos sitios web peque?os e independientes y algunos blogs est¨¢n demostrando ser un recurso importante de informaci¨®n¡±. El corresponsal cita a El Faro, de El Salvador.
Quiz¨¢ este sea el medio m¨¢s prestigioso de esta nueva oleada, aunque suena chistoso decir eso cuando ellos llevan 15 a?os en l¨ªnea, mucho antes de cualquier revoluci¨®n digital. Formado por una plantilla de 22 personas, no comenz¨® en Internet por un ataque de innovaci¨®n, sino porque no hab¨ªa presupuesto para m¨¢s. A?os despu¨¦s sigue sin lograr beneficios. Combaten los n¨²meros rojos con fondos de cooperaci¨®n y trabajan en una estrategia tecnol¨®gica que por fin les haga rentables.
Carlos Dada (El Faro): ¡°No hay m¨¢s credibilidad por estar ¡®online¡±
Por la redacci¨®n de El Faro, que gan¨® el premio Ortega y Gasset, han pasado periodistas de la talla de John Lee Anderson. Sus periodistas ejercen en un entorno de violencia e impunidad. ¡°No es f¨¢cil trabajar en este tipo de pa¨ªses donde la democracia est¨¢ en desarrollo. Las instituciones son d¨¦biles pero asumimos que este trabajo tiene riesgos. Nos llegan amenazas y mensajes de incomodidad. Somos incisivos y por tanto no caemos bien a ninguno de los Gobiernos con los que hemos ejercido¡±, sostiene Carlos Dada, el director de la publicaci¨®n galardonado en 2011 con el Mar¨ªa Moors Cabot, el prestigioso galard¨®n de la Universidad de Columbia, y el Anna Politkovskaya por su labor de investigaci¨®n.
Dada no comparte el entusiasmo por el boom del periodismo v¨ªa web. ¡°Internet nos ha servido para estar en contacto con otros periodistas, para leer sus reportajes, aprender, pero no creo que El Faro tenga m¨¢s o menos credibilidad por estar online¡±.
Los reporteros de Confidencial, un portal de Nicaragua dirigido por Carlos Fernando Chamorro, se enfrentan a problemas parecidos en cuanto a seguridad. ¡°La principal amenaza es el Gobierno y la clase pol¨ªtica, a la que no le gusta que la est¨¦n investigando¡±, razona Carlos Salinas, periodista del medio y colaborador de EL PA?S. Se tienen que abrir paso en un pa¨ªs de 5,6 millones de personas en el que apenas hay 600.000 conectados a Internet. Reciben 4.000 visitas diarias. ¡°Lo que hacen tiene mucho m¨¦rito y mucha repercusi¨®n¡±, les concede Rosental.
En los ¨²ltimos tiempos, estos sitios comparten contenidos. Establecen alianzas. Coordinados por Insight Crime, Animal Pol¨ªtico, El Faro, Plaza P¨²blica y Verdad Abierta, de Colombia, realizaron investigaciones sobre las formas de esclavitud en Am¨¦rica Latina que est¨¢ propiciando el narcotr¨¢fico, desde ni?os hasta todo tipo de profesionales que se est¨¢n viendo obligados a trabajar a la fuerza para el crimen organizado.
Este fen¨®meno period¨ªstico no solo florece en el norte y en el centro del continente. Tambi¨¦n se dan casos en Per¨² (Idl reporteros), Chile (Ciperchile), Argentina (Puercoesp¨ªn, Chequeando), Brasil (Apublica) o Colombia (La Silla Vac¨ªa), por citar algunos. Exista boom o no, lo cierto es que un batall¨®n de periodistas latinoamericanos huyen del oficialismo, pisan el terreno, investigan, cotejan y denuncian la corrupci¨®n y la delincuencia. En resumidas cuentas, hacen periodismo.
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