El control del d¨¦ficit amenaza los fondos para formar en trasplantes
La ONT alerta de que las ayudas son b¨¢sicas para el sistema La ca¨ªda de accidentes laborales y de tr¨¢fico obliga a buscar nuevas v¨ªas para mantener las donaciones
La Ley de Estabilidad Presupuestaria que controla al mil¨ªmetro que comunidades y municipios gasten solo lo que deben, es decir, que se ajusten a su l¨ªmite de d¨¦ficit, amenaza las subvenciones destinadas a formar a los profesionales sanitarios en materia de trasplantes. El castigo del Ministerio de Hacienda a las cinco autonom¨ªas d¨ªscolas ¡ªComunidad Valenciana, Murcia, Andaluc¨ªa, Catalu?a e Islas Baleares¡ª se ha llevado por delante ya subvenciones para programas de todo tipo, desde arqueolog¨ªa a digitalizaci¨®n de archivos. Se teme que ahora el recorte afecte al funcionamiento de una de las joyas de la corona de la sanidad p¨²blica espa?ola: el sistema de trasplantes, exportado a medio mundo. La Organizaci¨®n Nacional de Trasplantes (ONT), dependiente del Ministerio de Sanidad, recuerda que las ayudas para la formaci¨®n son una parte fundamental del engranaje del sistema. Mientras, el ministerio de Crist¨®bal Montoro matiza que a¨²n no hay nada decidido.
La ley ha endurecido las condiciones de acceso a las subvenciones del Gobierno a las autonom¨ªas incumplidoras. Desde hace un a?o, las ayudas y convenios deben pasar una criba espec¨ªfica y estricta de Hacienda, que emite un informe para concederlas. El de la ONT todav¨ªa no se ha hecho. La convocatoria anual de subvenciones para esta organizaci¨®n est¨¢ a punto de publicarse. Se trata de un fondo de algo m¨¢s de dos millones de euros, a repartir entre las 17 autonom¨ªas. Cantidades que se destinan a que los servicios de salud, hospitales y sociedades cient¨ªficas formen a sus profesionales. M¨¢s de 14.000 han pasado por estos cursos. Un elemento cada vez m¨¢s importante en un sistema en el que el n¨²mero de donaciones puede haber tocado techo, y en el que la pauta reside en buscar, junto a los profesionales, nuevas v¨ªas y donantes.
Rafael Matesanz, coordinador de la ONT, se?ala que para el sistema es fundamental que estas subvenciones lleguen a buen puerto. ¡°Nuestra red de coordinaci¨®n de trasplantes se basa en ellas. Este dinero nos ha permitido establecer toda la estructura que tenemos¡±, se?ala. Matesanz admite que la normativa que pone en peligro ahora esas ayudas es general, y que no afecta solo a los trasplantes. ¡°Interactuaremos con Hacienda para hacerle ver que este tema es muy sensible¡±, dice. Porque aunque esos fondos se destinen a la formaci¨®n, el agujero que provocar¨ªa dejar a cinco regiones sin ayudas repercutir¨ªa ¡°l¨®gicamente¡±, dice Matesanz, ¡°en que se hagan m¨¢s o menos trasplantes¡±.
Las comunidades se reparten dos millones de euros al a?o
La radiograf¨ªa de la donaci¨®n en Espa?a, l¨ªder mundial de manera ininterrumpida desde hace 21 a?os, ha cambiado. Las muertes por traumatismos han descendido ¡ªdebido a la ca¨ªda de los accidentes de tr¨¢fico y la siniestralidad laboral¡ª, tambi¨¦n los accidentes cerebrovasculares. Hay menos fallecimientos por causas que permitan la donaci¨®n, y los donantes son cada vez mayores. Factores a los que se a?ade que las donaciones en las unidades de cuidados intensivos han tocado techo: all¨ª se detecta a la mayor¨ªa de los pacientes aptos y, salvo negativas familiares, ya lo hacen.
Por eso, la ONT busca ahora otros caminos para sostener un sistema que permite realizar 4.211 trasplantes al a?o. Una de ellas es tratar de localizar a los posibles donantes que entran en los hospitales por las urgencias. Un estudio de la ONT y de la Sociedad Espa?ola de Medicina de Urgencias y Emergencias (Semes) revela que uno de cada 2.000 de estos enfermos podr¨ªa ceder sus ¨®rganos. Sin embargo, solo el 30% de ellos fallece en la UCI, la ¨²nica unidad hospitalaria desde donde se puede donar. ¡°Por eso, la formaci¨®n de los urgenci¨®logos para evitar que se pierdan esos posibles donantes, y tratar de canalizarlos para que puedan hacerlo, es esencial¡±, incide Tom¨¢s Toranzo, presidente de la Semes.
Tambi¨¦n lo es para las otras dos v¨ªas que pueden lograr que el n¨²mero de donantes ¡ªm¨¢s de 1.600 al a?o¡ª se mantenga: la donaci¨®n en vivo y la canalizaci¨®n de los pacientes que mueren por parada cardiorrespiratoria fuera del hospital.
Algunas de las comunidades susceptibles de perder la subvenci¨®n est¨¢n seriamente preocupadas. Es el caso de Andaluc¨ªa, por ejemplo. Su consejera de Salud, Mar¨ªa Jes¨²s Montero, consider¨® ayer ¡°absolutamente intolerable¡± que el Gobierno ¡°supedite¡± las subvenciones destinadas a la pol¨ªtica de trasplantes al cumplimiento del objetivo de estabilidad. El perjuicio para esta autonom¨ªa puede ser grande porque solicita las subvenciones de manera unificada y luego las reparte por los centros y hospitales. ¡°El que determinadas comunidades tuvieran acceso a estos fondos y otras no tendr¨ªa un efecto cualitativo de p¨¦rdida de cohesi¨®n del sistema. Algo b¨¢sico en materia de trasplantes¡±, remarca Matesanz.
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