Un maestro de la puerta giratoria

¡°Yo hablo de sanidad sin apellidos¡±, contest¨® Manuel Lamela en julio de 2011 cuando los periodistas le preguntaron si no supon¨ªa un conflicto de inter¨¦s su salto de la p¨²blica a la privada: de consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid entre 2003 y 2007 a empresario del sector. Aquel d¨ªa presentaba lo que parec¨ªa un proyecto de ¨¦xito. Nac¨ªa Madrid Centro M¨¦dico, una ¡°asociaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro¡± que iba a ¡°potenciar el turismo sanitario de primer nivel¡± hacia las cl¨ªnicas privadas madrile?as. Entre ellas, Capio, MD Anderson, La Luz... Muchos de sus representantes estaban aquel d¨ªa en una sede oficial cedida por el Ayuntamiento de Madrid arropando a Lamela. Tambi¨¦n dos consejeros del Gobierno de Esperanza Aguirre y dos concejales del equipo de Alberto Ruiz-Gallard¨®n. Una y otra administraci¨®n le hab¨ªan facilitado cr¨¦ditos y subvenciones.

El exconsejero habl¨® de cifras de negocio futuro y adelant¨® que ten¨ªa apalabrada una gran feria de la salud en Ifema para el a?o siguiente. Hoy no queda nada de todo aquello. La p¨¢gina web de Madrid Centro M¨¦dico no tiene contenido, la feria nunca se celebr¨® y el ¨²nico rastro que queda de aquel proyecto es la sociedad mercantil Madrid Medical Destination, esta s¨ª, con ¨¢nimo de lucro y que, seg¨²n el Registro Mercantil, tiene el mismo objeto social que la ¡°asociaci¨®n¡±.

Un a?o antes, Lamela, abogado del Estado nacido en Burgos en 1962, hab¨ªa hecho otro anuncio: la construcci¨®n de un complejo sanitario privado ¡ªrecuperaba un proyecto de Mutua Madrile?a desechado en 2008 por los riesgos de la costosa operaci¨®n¡ª a trav¨¦s de la sociedad Madrid Ciudad de la Salud, S. A. Una vez m¨¢s, de aquello solo permanece una inscripci¨®n en el registro. Apenas hab¨ªan pasado dos a?os de la salida de Lamela del Gobierno de Aguirre, que lo coloc¨® en la Consejer¨ªa de Transportes tras apearlo de Sanidad despu¨¦s del esc¨¢ndalo de las supuestas sedaciones irregulares en el hospital Severo Ochoa de Legan¨¦s. Y m¨¢s o menos por esas fechas (noviembre de 2010) fue cuando la consultora Assignia, actual gestora del hospital del Tajo que ¨¦l inaugur¨®, le fich¨® como consejero.

Hoy la actividad de Lamela se ramifica, al menos sobre el papel, en decenas de sociedades mercantiles. Algunas son accionistas ¨²nicas de las otras; la mayor¨ªa est¨¢n dedicadas al ¨¢mbito sanitario. Varias comparten domicilio con la Fundaci¨®n Lafer, ¡°instituci¨®n privada e independiente sin ¨¢nimo de lucro¡± de la que el exconsejero de Sanidad es presidente. Se trata de la principal actividad de Lamela o, al menos, la que en los ¨²ltimos dos a?os ha tenido alguna repercusi¨®n p¨²blica. A finales del a?o pasado se vio al exconsejero en un encuentro sobre ¡°oportunidades de negocio en Uruguay¡±. La fundaci¨®n se dedica, entre otras cosas, a impartir dos m¨¢steres, uno de ellos de ¡°comunicaci¨®n en salud¡±, que cuesta unos 6.000 euros.

A trav¨¦s de un portavoz de la fundaci¨®n, el exconsejero declin¨® ayer ¡°hacer ning¨²n tipo de declaraci¨®n, dado que en la actualidad desarrolla su actividad profesional en el ¨¢mbito privado¡±. Su ¨²ltima aventura empresarial se llama Farmapartners, se cre¨® hace menos de 15 d¨ªas y est¨¢ dedicada a asesorar a las oficinas de farmacia. Nace justo cuando el Gobierno se plantea liberalizar el sector. Con dos proyectos fallidos a sus espaldas, ?ser¨¢ este el negocio definitivo?