'Yihad' feminista en 'topless'
Feministas ¨¢rabes y europeas reivindican, exhibiendo sus senos, que la tunecina Amina deje de estar secuestrada por posar en Facebook desnuda de cintura para arriba
?¡°?Nuestros senos pueden m¨¢s que vuestras piedras!¡±, gritaban, el jueves, un pu?ado de mujeres exhibiendo sus pechos ante algunas embajadas de T¨²nez en Europa y ante algunas mezquitas como la de Bras en Sao Paulo (Brasil). Con su ¡°yihad en topless¡±, como lo describ¨ªan algunas, replicaban a la amenaza an¨®nima de aquellos, probablemente salafistas, que hab¨ªan pirateado las webs del movimiento feminista Femen escribiendo: ¡°Os cortaremos las mamas y las daremos a nuestros perros para que las coman¡±. Otros ataques inform¨¢ticos, m¨¢s benignos, como el que padeci¨® la p¨¢gina de Facebook de la rama tunecina de Femen, consistieron en sustituir las reivindicaciones feministas por vers¨ªculos del Cor¨¢n e im¨¢genes de la peregrinaci¨®n a La Meca.
Hace ya tres semanas que estall¨® la guerra, por ahora sobre todo virtual pero salpicada con alg¨²n forcejeo, entre feministas occidentales, y tambi¨¦n algunas valientes ¨¢rabes, por un lado, y los islamistas radicales que cuentan en sus filas a algunas mujeres.
Fue Amina Tyler, tunecina de de 19 a?os, la que desencaden¨® las hostilidades. El 1 de marzo se exhibi¨® fumando y desnuda, de cintura para arriba, en su p¨¢gina de Facebook y con la siguiente frase escrita en ¨¢rabe en sobre su t¨®rax: ¡°Mi cuerpo me pertenece y no representa el honor de nadie¡±. Amina os¨® adem¨¢s dejarse entrevistar, eso s¨ª ya con el rostro pixelado por seguridad, por Ettounsiya TV.
Cont¨® ante las c¨¢maras las amenazas de muerte que hab¨ªa recibido, su reciente encuentro en Par¨ªs con las fundadoras ucranianas de Femen y el objetivo que persegu¨ªa: ¡°protestar contra la situaci¨®n de la mujer en el mundo ¨¢rabe¡±. Sin su desnudez parcial su mensaje no habr¨ªa tenido tanto eco, recalc¨®.
M¨¢s que eco provoc¨® la ira de los islamistas radicales como el ulema tunecino Adel Almi que propugn¨®, para empezar, que Amina fuese ¡°azotada cien veces¡±. Despu¨¦s, ¡°debido a la gravedad de su pecado, merece ser lapidada hasta la muerte¡±. El ulema expuso sus tesis en Ettounsiya TV, pero rehus¨® sentarse donde lo hizo Amina porque la butaca era ¡°impura¡±. Mujeres con un mero hiyab (pa?uelo) o con niqab, es decir el velo negro que cubre el cabello y el rostro, colgaron tambi¨¦n sus fotos en la red social junto con un letrero en el que se pod¨ªa leer: ¡°Mi cuerpo es propiedad de Al¨¢¡±.
Aunque el partido islamista moderado Ennahda gan¨® las elecciones en 2011, T¨²nez es, de todos los pa¨ªses que han pasado por la llamada ¡°primavera ¨¢rabe¡±, aquel en el que los laicos tienen m¨¢s peso. Pero apenas se solidarizaron, en un primer momento, con una joven de la que dec¨ªan que hab¨ªa ¡°ido demasiado lejos¡± con su provocaci¨®n o que ¡°no era esa la mejor manera de defender sus ideas¡±.
Amina desapareci¨® a mediados de marzo. La introdujeron probablemente a la fuerza en un coche en el centro de T¨²nez y la trasladaron a una remota aldea. Su t¨ªa reivindic¨® despu¨¦s, en un v¨ªdeo, el secuestro de la sobrina por la familia. La retendr¨¢n, dijo, hasta que deje de estar loca. Las secciones de Femen en Kiev y Par¨ªs perdieron el contacto telef¨®nico que manten¨ªan a diario con la joven.
Femen se moviliz¨®. Convoc¨®, el jueves pasado, sus concentraciones ante embajadas tunecinas y mezquitas en Europa y en Am¨¦rica para exigir la libertad para Amina. Pero la novedad es que un pu?ado de mujeres ¨¢rabes sali¨® en apoyo de Amina posando tambi¨¦n con los senos al aire, pero con el rostro, a veces, tapado por miedo a las represalias
Algunas, como la actriz marroqu¨ª Lubna Azabal o la cineasta tunecina Nadia el Fani, lo hicieron incluso a cara descubierta. El Fani ha sido ya tantas veces condenada a muerte por los extremistas¡ Otras, por ¨²ltimo, m¨¢s p¨²dicas o m¨¢s cautas, como la economista tunecina Monia Sanekli, escriben tribunas en la que resaltan que Amina ¡°tiene m¨¢s moralidad que cualquier otra mujer que se disfraza con un niqab o que apoya al poder¡±.
En T¨²nez, Egipto, Libia etc¨¦tera la ¡°primavera ¨¢rabe¡± ha supuesto una explosi¨®n de libertades que aprovechan ahora las feministas para defenderse de los embates islamistas. Aunque, jur¨ªdicamente, la mujer goza en T¨²nez de la misma situaci¨®n ventajosa ¨Cla mejor del mundo ¨¢rabe- que antes del derrocamiento de la dictadura, los salafistas y Ennahda, el principal partido de la coalici¨®n de Gobierno, presionan para que se recorten sus derechos.
Ennahda trat¨®, por ejemplo, en agosto, que en la nueva Constituci¨®n la mujer fuese considerada como ¡°complementaria¡± del hombre y no su alter ego, pero fracas¨®. Ahora la Asociaci¨®n Tunecina de Mujeres Dem¨®cratas teme que se intente suprimir el derecho al aborto. La presi¨®n social en la calle, en los lugares p¨²blicos les obliga adem¨¢s a vestir con m¨¢s recato. Pero, a diferencia de los tiempos de la dictadura, las mujeres pueden defenderse y hasta provocar para luchar por sus derechos. Es lo que hizo Amina y, pese a que exhibir los senos, est¨¢ tipificado en el c¨®digo penal como un ¡°esc¨¢ndalo p¨²blico¡±, la fiscal¨ªa de T¨²nez no la ha perseguido.
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