Llegar a fin de mes, ?imposible?
Mientras acaba la crisis se pueden dise?ar estrategias de ahorro e inversi¨®n que generen ingresos de forma continuada Las aplicaciones para comparar precios pueden ayudar a las familias
Ganar m¨¢s dinero. Estirar el que entra en casa. Dos historias. Una misma trama. Una contada desde el lado de la inversi¨®n y la otra, desde el ahorro. Pero ambas son una preocupaci¨®n cotidiana para miles de familias espa?olas que ven que los ingresos no cubren los gastos. ?Se puede combatir esta situaci¨®n? ?Sirven los comparadores y las aplicaciones m¨®viles para comprar m¨¢s barato? ?Y las redes sociales? ?Es factible lograr una rebaja de la hipoteca o del alquiler? ?Con el certificado de eficiencia energ¨¦tica se paga menos luz? ?Es posible transformar la Bolsa en una n¨®mina? Hay que ahorrar. Hay que invertir. Pero c¨®mo, d¨®nde y cu¨¢nto.
Ahorrar se ha convertido en el mantra de nuestro tiempo. Y si hablamos de art¨ªculos y servicios existen dos maneras de darle forma, reflexiona Juan Jos¨¦ Peso-Vi?als, socio de la consultora Daemon Quest by Deloitte, ¡°los comparadores (viajes, seguros, alimentaci¨®n) y la compra colectiva¡±.
En Espa?a, algo m¨¢s del 50% de los usuarios m¨®viles, seg¨²n la agencia de publicidad madvertise, ya efect¨²a alg¨²n tipo de compra a trav¨¦s del m¨®vil. Esta cifra augura un cambio radical en c¨®mo compramos y ahorramos. Pero no solo en nuestro pa¨ªs. De hecho, la presi¨®n en el punto de venta es tan elevada que en Estados Unidos varios supermercados ya han prohibido el uso de tel¨¦fonos inteligentes en sus establecimientos para comparar precios, ya que muchas veces la mejor oferta reside, justo, en la competencia.
Por lo tanto, armados con el smartphone, el ahorro 2.0 se impone. Cada vez surgen m¨¢s comparadores y aplicaciones que ayudan a las familias a ce?irse al presupuesto. Money, PocketMoney, Mi presupuesto o Money Saver gestionan gastos e ingresos de las finanzas caseras. Aunque tal vez sean los comparadores de precios dentro de las tiendas las aplicaciones que estos d¨ªas disfrutan de mayor aceptaci¨®n. Ah¨ª encaja Supertruper, que permite buscar y comparar precios de cualquier tipo de producto escaneando el c¨®digo de barras o tecleando el nombre del art¨ªculo. Tambi¨¦n hay aplicaciones especializadas en hallar descuentos, como Appzapp o Appsfire.
Tretas para el ahorro casero
Si descontamos el alquiler o el pago de la hipoteca, las tres partidas b¨¢sicas de cualquier hogar son la electricidad, el gas y el agua. Este tr¨ªo comparte la caracter¨ªstica com¨²n de que sus tarifas cada vez son m¨¢s caras. Con esta evidencia sobre la mesa, la OCU (Organizaci¨®n de Consumidores y Usuarios) plantea varias estrategias de ahorro para hacerles frente. Tomen nota.
1. Electricidad
La mejor opci¨®n es contratar la tarifa de discriminaci¨®n horaria. Si nuestro hogar es capaz de efectuar un 30% del consumo en horario valle (de 22 a 12 horas de la ma?ana) esa tarifa ya nos interesa. El ahorro puede llegar hasta el 10%. Y si no es posible desplazar el consumo a esa franja, la mejor opci¨®n es la Tarifa de ?ltimo Recurso (TUR).
2. Gas
No es aconsejable contratar el suministro de gas con el de la electricidad en una sola compa?¨ªa. La ¨²nica ventaja es que se recibe una sola factura. Las tarifas son siempre mejores si se hace de manera separada. Tambi¨¦n hay que tener cuidado con las ofertas vinculadas a la contrataci¨®n del mantenimiento de la caldera. Suelen ser temporales.
3. Agua
Aqu¨ª maridan las recetas cl¨¢sicas y las nuevas. Mejor la ducha que el ba?o. Cerrar el grifo mientras nos afeitamos o nos lavamos los dientes e incorporar limitadores de caudal. Y unas cifras para reflexionar. El gasto de lavar la vajilla dos veces al d¨ªa oscila entre los 120 litros si se hace a mano con el grifo abierto, los 60 litros si se utiliza la pila llena de agua y los 25 si se pone el lavaplatos una vez al d¨ªa. As¨ª que esta ¨²ltima es la mejor opci¨®n.
Poco a poco, las aplicaciones van abarcando casi todos los territorios imaginables. Desde el an¨¢lisis de vuelos y hoteles (Kayak y Skyscanner) a la b¨²squeda de gasolina barata (GasAll o Gasolineras Baratas) pasando por compartir coche y trayecto (Amovens y CarPooling) para viajar a precio reducido.
Estas herramientas ¡ªalgunas de pago y otras gratuitas¡ª nos enfrentan con la idea de que ahorrar es algo tan sencillo y a la vez complejo como planificar ingresos y gastos. ¡°La clave radica es identificar qu¨¦ puedes recortar sin que se resienta tu calidad de vida¡±, apunta Francisco Mar¨ªn, presidente del comit¨¦ de educaci¨®n de EFPA (Asociaci¨®n Europea de Asesores y Planificadores Financieros).
Este enfoque, que pasa por mantener un cierto nivel de vida y a la vez generar un precio asequible, es el que han explotado durante estos ¨²ltimos tiempos las empresas de compra colectiva (Groupon, Privalia, Ofertix¡), que desde hace un par de a?os atraviesan su particular edad de oro. ¡°En el primer trimestre del ejercicio, las ventas han superado las del a?o pasado e incluso se han sobrepasado los objetivos¡±, avanza Miguel Giribit, director nacional de Privalia.
Por lo tanto parece evidente que Internet es un veh¨ªculo v¨¢lido para trazar una estrategia contra la precariedad, ya que abre la puerta a comprar m¨¢s barato. ¡°La tecnolog¨ªa ha derribado barreras de entrada, multiplicando escalas, generando una presi¨®n de precios en la Red que no existe en el mundo offline, lo que est¨¢ siendo aprovechado por los consumidores¡±, analiza Pablo Gonz¨¢lez, experto en medios sociales de la consultora Ernst & Young. Esta tendencia tambi¨¦n ha llegado a las redes sociales. Un reciente trabajo de la firma de marketing Social Bakers revela que la principal raz¨®n que esgrimen los consumidores para seguir a las marcas en estas redes es aprovechar las promociones. ¡°El 20% de las ventas de Privalia se efect¨²an a trav¨¦s de Facebook¡±, apostilla Jos¨¦ Luis Nueno, profesor de la escuela de negocios IESE.
Con esas reflexiones de fondo, resulta l¨®gico que Espa?a sea el pa¨ªs de la Uni¨®n Europea donde m¨¢s crecer¨¢ el comercio electr¨®nico. Los analistas de la consultora Forrester estiman que aumentar¨¢ un 18% anual hasta 2017, y para entonces ya mover¨¢ 9.100 millones de euros.
Sin embargo, frente a este cup¨®n de ahorro digital todav¨ªa se mantiene el de toda la vida. Ese de papel y tijera. ?Recuerdan? Los supermercados Dia, por ejemplo, a¨²n cuentan con ellos, se imprimen en la tienda y aseguran sus responsables que ¡°el descuento puede llegar al 50%¡± del precio del producto. Y, adem¨¢s, los art¨ªculos en promoci¨®n se renuevan cada dos semanas. Por el contrario, en Mango no creen que la crisis provoque que la gente se mueva de un canal a otro, pero s¨ª ¡°puede hacer que busquen descuentos, ya sea en Internet o en el mundo f¨ªsico¡±, indica un portavoz de la empresa textil.
Pero si algo muestra este viaje por el ahorro es que no todos los sectores son iguales. Hay uno donde es bastante sencillo meter la tijera: el autom¨®vil. El precio medio de los veh¨ªculos de segunda mano no deja de caer por efecto del plan Pive 2 (ayuda m¨ªnima de 2.000 euros a quienes den de baja definitiva su coche de m¨¢s de 10 a?os). Tanto es as¨ª que AutoScout 24 ¡ªespecializada en veh¨ªculos de ocasi¨®n¡ª sit¨²a el importe medio de un autom¨®vil de este tipo en 12.248 euros, un 2,7% menos que el a?o pasado. Sin embargo hay que darse prisa si quiere ingresar algo por su venta. Al quinto a?o, un coche ya ha perdido el 59% de su valor inicial. En el primero, se deja un 19%.
Internet permite conseguir
El tiempo merma a los coches, pero tambi¨¦n a las familias. Y no solo desde las aristas de la econom¨ªa. ¡°Cuando nos dicen que la recuperaci¨®n se producir¨¢ a largo plazo se va instalando en muchas personas una sensaci¨®n de incertidumbre, de no saber qu¨¦ pasar¨¢ con su situaci¨®n personal. ?Podr¨¦ aguantar estas dificultades econ¨®micas durante m¨¢s tiempo?¡±, se pregunta el psic¨®logo Vicente Prieto. ¡°Estas circunstancias no tienen por qu¨¦ desencadenar autom¨¢ticamente trastornos psicol¨®gicos aunque s¨ª facilitan que se den alteraciones emocionales¡±. El galeno cita problemas psicosom¨¢ticos, pensamientos recurrentes de preocupaci¨®n, irritabilidad, aislamiento social, cuadros ansioso-depresivos, insomnio.
Problemas de un calado evidente y que si, por lo menos, se alivian recurriendo a algunas de estas recetas de ahorro bienvenidas sean. As¨ª que habr¨¢ que poner en valor la econom¨ªa del ahorro y su influencia en la salud mental de las personas. Y entender que estos consejos hay que escucharlos de una manera nueva, y darse cuenta de que se tratan de peque?as victorias en una complicada batalla.
Las empresas
La vivienda, para bastantes familias espa?olas, es responsable de muchas noches de ese insomnio del que habla el psic¨®logo. Pero se pueden articular algunas estrategias sencillas y efectivas. ¡°Si tiene una hipoteca y le cuesta llegar a fin de mes, tal vez sea el momento de renegociar con la entidad financiera. Pues prefieren buscar soluciones antes que quedarse con la casa¡±, asegura Luis Corral, consejero delegado de Foro Consultores. Y si lo que le ahoga es el alquiler, ¡°tambi¨¦n es tiempo de otra negociaci¨®n, pero ahora con el casero, porque el propietario siempre preferir¨¢ tener un inquilino que pague, aunque sea menos, que la vivienda vac¨ªa, con los gastos que conlleva¡±, asevera este experto.
Y dentro de casa, los analistas de Euroconsult recuerdan que la certificaci¨®n energ¨¦tica ser¨¢ obligatoria a partir del 1 de junio para todos los inmuebles que se vendan o alquilen. Esta medida puede suponer un ahorro en energ¨ªa del 60% para una vivienda que ¡ªdespu¨¦s de acometer las reformas necesarias¡ª mejore su etiqueta energ¨¦tica con el fin de ser m¨¢s eficaz en el consumo de luz, agua y gas. Por ejemplo, una casa unifamiliar de 100 metros cuadrados en Madrid que pase de la letra E (la menos eficiente y que es com¨²n al 70% de los inmuebles) a la A (la m¨¢s eficiente) ahorrar¨¢ 2.500 euros al a?o.
El 20% de las compras
Si bien la factura de la luz es una de las que m¨¢s escuece en el bolsillo, otra, sin ninguna duda, es la fiscal. Silvia Piedra y Jaume Duch, abogados del bufete Cuatrecasas, Gon?alves Pereira, manejan algunas ideas. Dado los elevados ¨ªndices de morosidad (un problema que afecta sobre todo a aut¨®nomos y pymes), el fisco permite que en caso de impago de facturas solo haya que tributar por los importes que realmente se han percibido. Y aunque no existen muchos gastos deducibles, Hacienda ha incorporado este a?o como novedad una medida que facilita regularizar la situaci¨®n de los contribuyentes que hayan aplicado la deducci¨®n por las cantidades depositadas en cuentas vivienda y que en el plazo de cuatro a?os desde su apertura no hayan podido destinar ese dinero a la adquisici¨®n de la casa.
Pero todo esto sucede en la bancada del ahorro. ?Y en la inversi¨®n?
El autom¨®vil es un sector
El peri¨®dico The Washington Post narraba hace pocos d¨ªas la historia de Dylan Collins, un joven de 25 a?os que consigue ingresos de seis cifras (en d¨®lares) al a?o operando como day trader (especulador diario) en la Bolsa. Dice Collins que gran parte de lo que sabe lo aprendi¨® de adolescente en el p¨®quer digital. Esta historia (que para muchos ser¨¢ la constataci¨®n de la relaci¨®n entre los casinos y los mercados financieros) es el extremo. Entre medias, grises. ¡°Es cierto que se puede transformar la Bolsa en una n¨®mina. De hecho, es una corriente de moda¡±, reflexiona Daniel Pingarr¨®n, analista de la agencia burs¨¢til IG Markets. ¡°Pero es un mundo dif¨ªcil y, aunque no hay estad¨ªsticas oficiales, parece ser que un gran n¨²mero de personas que intenta vivir del parqu¨¦ fracasa¡±.
Descartadas opciones radicales, los mercados permiten diferentes estrategias para que mensualmente entre dinero en casa. Por ejemplo, Ahorro Corporaci¨®n ofrece un consejo interesante. ¡°Se podr¨ªa planificar una cartera de acciones para que d¨¦ un flujo de dividendos que generen ingresos de manera recurrente¡±, aseguran sus expertos.
Renegociar la hipoteca
Detr¨¢s de esta propuesta hay un ejercicio claro de optimismo. El Ibex 35 se halla, m¨¢s o menos, a la mitad de su r¨¦cord. Si creemos que en alg¨²n momento Espa?a volver¨¢ a crecer, no parece descabellado pensar que el selectivo deber¨ªa acercarse a esos niveles. A fin de cuentas, el ¨ªndice S&P 500 y el DAX alem¨¢n viven en m¨¢ximos.
Esa mirada a largo plazo parece imprescindible en Bolsa con el fin de transformar el tiempo en ganancias. Ya lo dice Santiago Daniel, responsable de inversiones de Deutsche Bank: ¡°No es inteligente intentar predecir el movimiento a corto plazo del mercado ni tampoco creerse mejor que ¨¦l¡±.
Otras propuestas con menos sobresaltos son las que recomienda Miguel ?ngel Bernal, profesor del Instituto de Estudios Burs¨¢tiles (IEB). ¡°Frente a la precariedad que vivimos, dar¨ªa dos recomendaciones: la renta corporativa (emitida por empresas de primera l¨ªnea) y los dep¨®sitos bancarios. Estos ¨²ltimos dan una rentabilidad del 3%, en contraposici¨®n a una inflaci¨®n que camina hacia el 1%¡±.
Todas estas estrategias, que transitan por los predios del ahorro, la fiscalidad, la inversi¨®n o el consumo, tienen que servir para ayudar a sortear estos meses de dificultades. Pero tambi¨¦n como palanca para trazar estrategias vitales nuevas, que acompa?en a ese tiempo. Al fin y al cabo, ¡°la ilusi¨®n y la motivaci¨®n tenemos que inventarla todos los d¨ªas. Porque podemos vivir con poco dinero, pero es mucho m¨¢s dif¨ªcil vivir sin esperanza¡±, cierra Vicente Prieto.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
Archivado En
- Crisis econ¨®mica
- Ahorro
- Smartphone
- Vida y Artes
- Recesi¨®n econ¨®mica
- Gadgets
- Telefon¨ªa m¨®vil multimedia
- Coyuntura econ¨®mica
- Telefon¨ªa m¨®vil
- Bolsa
- Telefon¨ªa
- Internet
- Espa?a
- Mercados financieros
- Telecomunicaciones
- Econom¨ªa
- Comunicaciones
- Sociedad
- Finanzas
- Tecnolog¨ªas movilidad
- Tecnolog¨ªa
- Ciencia
- Especial Ahorro inteligente