El ni?o y la ara?a
La desinversi¨®n en sanidad genera pobreza y paro por la multitud de empresas auxiliares que proveen a los centros sanitarios
Una vez un ni?o, inconsciente como todos los ni?os, tomo un pa?uelo de papel y con ¨¦l, una ara?a de pared que, descuidada, hab¨ªa salido del junquillo protector. Con indiscutible habilidad t¨¦cnica y movimientos simples, fue arrancando una a una sus largas patas. Despu¨¦s dej¨® el cuerpo indefenso en el suelo y tras varias llamadas concluy¨®: ¡°Es sorda¡±.
La econom¨ªa y la sanidad espa?olas est¨¢n a punto de quedarse completamente sordas. Ya no responden a est¨ªmulos normales, no reaccionan y son inermes cuerpos a la deriva.
Alguien externo ha ido desmontando las naturales extremidades que permiten el movimiento espont¨¢neo. Primero desarticulando las sinergias, luego quitando m¨²sculo a m¨²sculo. Al final, nada funciona. El s¨ªmil del motor gripado que necesita aceite lubricante (el cr¨¦dito, pongamos por caso), se ha quedado completamente desfasado para explicar los males de nuestra sociedad. Ahora se trata de que el jarabe de palo indiscriminado, los recortes implacables y pseudoaleatorios, han provocado una par¨¢lisis total del sistema.
Es importante se?alar, como ejemplo, que el mayor hospital de la zona sur de Madrid, es tambi¨¦n su mayor empresa por n¨²mero de trabajadores y una de las mayores por presupuesto global. Sus d¨¢rsenas de entrada de insumos tienen proporciones fabriles. El dep¨®sito de combustible o de agua es mayor que el de una industria pesada. Cada vez que a ¨¦ste, como a los otros 200 grandes centros sanitarios de Espa?a, se le recortan unos pocos euros del presupuesto, por ejemplo para material fungible, hay un parado m¨¢s en Tarrasa y una f¨¢brica menos en Monforte de Lemos.
La desinversi¨®n en sanidad genera pobreza y paro por la multitud de empresas auxiliares que proveen a los centros sanitarios y se ven afectadas.
Por otro lado, la sin duda inconstitucional medida de reducci¨®n salarial de sanitarios y docentes, operada en estos ¨²ltimos a?os, provoc¨® un fallo en cadena nada menos que de otros grandes motores de la econom¨ªa: la venta de autom¨®viles y el turismo interior. ?Qui¨¦n compr¨® coche en el a?o posterior a ver c¨®mo desaparec¨ªa su paga de Navidad o se extingu¨ªan sus horas extraordinarias?, ?qui¨¦n reserv¨® vacaciones si, solo por causar dolor, fueron eliminados los pagos en especie consolidados, llamados ¡°d¨ªas moscosos¡±, en honor a aquel ministro que no ten¨ªa dinero, pero s¨ª imaginaci¨®n?
Dec¨ªa Garc¨ªa Lorca, en Poeta en Nueva York, que ¡°debajo de las divisiones / hay una gota de sangre de marinero¡±. Efectivamente, detr¨¢s de las grandes cuentas, fr¨ªamente analizadas en ruedas de prensa virtuales y sin preguntas, hay r¨ªos de sufrimiento humano.
La ara?a se queda sorda y nuestras autoridades zombies, siguen transmitiendo dolorosas recetas impuestas, sin cr¨ªtica, sin tacto y sin final previsible. Siguen arrancando cada pata de la maltrecha econom¨ªa espa?ola.
Juan Mart¨ªnez Hern¨¢ndez es m¨¦dico especialista en Medicina Preventiva y Salud P¨²blica
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