Especializado s¨ª, pero con bagaje

La implantaci¨®n del Espacio Europeo de Educaci¨®n Superior (EEES), conocido popularmente como Plan Bolonia, dio un vuelco al cat¨¢logo de titulaciones y a la mayor¨ªa de planes de estudio. El efecto no fue homog¨¦neo y algunas de ellas se especializaron m¨¢s, mientras otras mantuvieron un alto contenido generalista. Dos expertos de ¨¢mbitos bien diferentes, Joaqu¨ªn Prats, catedr¨¢tico de Did¨¢ctica de las Ciencias Sociales de la Universidad de Barcelona, y Xavier Ca?avate, director de la escuela de ingenier¨ªa del campus de la Universidad Polit¨¦cnica de Catalu?a en Terrassa, se encuentran cara a cara para reflexionar sobre la idoneidad de esta especializaci¨®n.

Haciendo un poco de memoria reciente, Prats recuerda que la teor¨ªa del Plan Bolonia apostaba por un modelo 3+2 (tres a?os de grado y dos de m¨¢ster), con unos grados con un alto contenido gen¨¦rico y muchos cr¨¦ditos troncales. La especializaci¨®n, preve¨ªa, ya vendr¨ªa de la mano de los m¨¢steres. ¡°Pero esto no se aplic¨® aqu¨ª¡±.

En Espa?a, el grado es de cuatro a?os, y ello obliga a dejar la mayor¨ªa de m¨¢steres en un a?o, y se quedan cortos. Por consiguiente, los grados, que ten¨ªan que ser muy b¨¢sicos, no pueden serlo tanto. Con cuatro a?os, alguna especializaci¨®n tiene que haber¡±, abunda Prats, que hasta hace pocos d¨ªas tambi¨¦n era presidente de la Agencia de Calidad del Sistema Universitario de Catalu?a.

Ambos expertos huyen desde el principio de las generalizaciones y apuntan que el efecto del EEES no ha sido igual en todas las titulaciones. Prats explica que en algunos ¨¢mbitos, como en la Facultad de Geograf¨ªa e Historia, se ha mantenido el n¨²mero de titulaciones ¨CGeograf¨ªa, Historia e Historia del Arte¨C con una parte de troncalidad, que despu¨¦s se ramifica en varias menciones o especializaciones en los ¨²ltimos cursos.

Hay muchas carreras que ya de por s¨ª tienen un alto grado profesionalizador, como las de Enfermer¨ªa, profesor o fisioterapeuta. Muchas, que antes hab¨ªan sido carreras de tres a?os, al a?adirles un curso, han ganado en contenidos generalistas. Por el contrario, a?ade Prats, Biolog¨ªa ¡°ha padecido un fuerte troceo¡± y considera excesivo el nivel de especializaci¨®n al que han llegado los grados de esta ¨¢rea.

Caso aparte son las ingenier¨ªas. Xavier Ca?avate explica que las titulaciones en las universidades polit¨¦cnicas se han mantenido casi inalterables. ¡°Casi podr¨ªamos decir que ha habido m¨¢s generalizaci¨®n. Hoy hay una base m¨¢s amplia de contenidos comunes¡±, asevera el ingeniero. Ca?avate subraya que las actuales titulaciones combinan una primera parte muy semejante en todas las ingenier¨ªas. En total son 120 cr¨¦ditos, equivalentes a dos cursos, con asignaturas iguales para todos los alumnos. Es a partir del tercer curso cuando el estudiante empieza a escoger materias y a especializarse. Ca?avate defiende esta f¨®rmula y considera que es la combinaci¨®n ideal entre bagaje general y especializaci¨®n.

¡°Esta f¨®rmula ser¨ªa lo deseable y el modelo que deber¨ªan seguir muchas otras carreras. Ahora la normativa fija que haya un m¨ªnimo de 60 cr¨¦ditos comunes, pero esto no es suficiente¡±, a?ade Prats. Este experto defiende que los grados deben tener una fuerte base generalista, con una m¨ªnima especializaci¨®n. En su opini¨®n, es el m¨¢ster el que debe ayudar a profundizar.

Con todo, Prats reconoce que no existe un modelo v¨¢lido para todos los ¨¢mbitos y apela al ¡°sentido com¨²n¡±. Como ejemplo, el catedr¨¢tico de la UB echa mano de una conversaci¨®n reciente con el rector de la Universidad de Lisboa, que le confesaba haber encontrado en el cat¨¢logo de titulaciones de su campus una llamada Gestor en Campos de Golf. ¡°Entender¨ªa que fuera una especialidad de m¨¢ster, pero es una ridiculez como grado, se est¨¢ pervirtiendo el esp¨ªritu de lo que deber¨ªa ser un grado¡±, espeta.

ALUMNOS RENACENTISTAS

¡°La Universidad no es un centro de formaci¨®n ocupacional, no hacemos formaci¨®n a medida para las empresas¡±, apostilla Ca?avate. Prats defiende el modelo de anteriores carreras en las que hab¨ªa materias y contenidos comunes a todos los ¨¢mbitos de conocimiento, que enriquec¨ªa al alumno. ¡°Es como el modelo de hombre del Renacimiento, pero adaptado a los tiempos actuales¡±, aclara el catedr¨¢tico. El ingeniero coincide en este punto. ¡°Hace un tiempo se inculcaba a los alumnos que ten¨ªan que centrarse en un ¨¢mbito muy concreto. Pero esto funciona solo a nivel de investigaci¨®n. Antes te met¨ªan en un microrreino del que te costaba salir. Yo creo que deber¨ªamos tender a aumentar y ser adaptativos¡±, asevera Ca?avate.

Ambos expertos coinciden en que la Universidad no debe depender tanto de los cambios del mercado laboral y de la sociedad. ¡°Su objetivo es facturar licenciados intelectualmente potentes para que sean capaces de adoptar diferentes roles a lo largo de su vida. Esto requiere tener una base cultural y unos conocimientos transversales¡±, suscriben.

Y en todo este sistema, ?qu¨¦ papel juegan los m¨¢steres? En este punto la opini¨®n de ambos expertos es similar. Apuestan porque los posgrados sean una herramienta de especializaci¨®n, de orientaci¨®n a la investigaci¨®n o como complemento formativo hacia otros ¨¢mbitos (por ejemplo, un ingeniero que quiera tender hacia la gesti¨®n). Tambi¨¦n ambos docentes coinciden en que este tipo de formaci¨®n es prescindible. ¡°Los m¨¢steres no son necesarios. Hasta ahora, un ingeniero t¨¦cnico solo hac¨ªa la carrera [de tres a?os] y encontraba trabajo sin problema. Ahora estas carreras duran un a?o m¨¢s, as¨ª que los alumnos salen m¨¢s formados¡±, defiende Ca?avate. ¡°Mucha gente decide hacer uno para hacer algo mientras encuentra un trabajo¡±, a?ade Prats.

Ambos acaban el debate valorando positivamente la aplicaci¨®n del Plan Bolonia. ¡°Ha racionalizado el mapa de titulaciones¡±, aseveran. Eso s¨ª, reconocen que siempre hay flecos que arreglar, pero no quieren ni o¨ªr hablar de una nueva reforma universitaria cuando apenas acaba de salir de las aulas la primera promoci¨®n 100% Bolonia.