¡°El arte tiene que ser disfrutado por todos¡±
La artista recrea en una escultura de luz la historia de Tabacalera
A Grimanesa Amor¨®s (Lima, 1962) es mejor preguntarle d¨®nde no ha expuesto que d¨®nde lo ha hecho. Se acaba mucho antes. Con intervenciones p¨²blicas repartidas por todos los rincones del mundo, esta artista, neoyorquina por propia decisi¨®n desde los 20 a?os, cuando se march¨® para estudiar los rudimentos del oficio en la Art Students League de Nueva York y ser una artista ¡°como esas de las novelas de Hemingway¡±, es ahora una de las protagonistas de la temporada madrile?a. Su instalaci¨®n titulada Fortuna,expresamente creada para ser expuesta en una de las salas del edificio de Tabacalera en Madrid, es una espectacular escultura de luz con la que quiere hacer un homenaje a la antigua f¨¢brica de tabaco recreando el impacto que a ella le produjo la contemplaci¨®n de la aurora boreal en Islandia; un ambicioso objetivo para una mujer convencida de que el arte tiene que despertar sensaciones y emociones en todo espectador, sea cual sea el origen y preparaci¨®n.
?¡°Creo que los artistas tenemos que compartir nuestra obra con el p¨²blico. No creo en el arte para escogidos y entendidos. Cada uno tiene que aportar a la comunidad lo que puede¡±, dice.
Para la entrevista, Grimanesa Amor¨®s escoge una cafeter¨ªa de Lavapi¨¦s que a muchos madrile?os pasa inadvertida. Situada en una cuarta planta del Madrid m¨¢s multirracial y multicultural, las vistas son impresionantes. All¨ª ha almorzado ella cada d¨ªa que ha pasado dedicada a montar su complicada instalaci¨®n, por lo que los camareros la saludan por su nombre. Simp¨¢tica y curiosa, es de esas personas a las que les gusta mezclarse con el vecindario. As¨ª hace en las ciudades a las que, por motivos de trabajo tiene que desplazarse de manera habitual.
Retomando su idea de compartir, Amor¨®s cuenta que, desde muy jovencita, sinti¨® ganas de colaborar con la Cruz Roja o con Teresa de Calcuta. ¡°Detesto el ego¨ªsmo, creo que todos tenemos que mirar a los que est¨¢n al lado¡±. Ese inter¨¦s por los dem¨¢s es uno de los elementos que sustenta sus obras. La naturaleza y el escenario en el que la obra ser¨¢ ubicada, son los otros dos pilares de su forma de entender el arte.
No es esta la primera vez que la artista visita Madrid. La anterior ocurri¨® hace cuatro a?os, durante una edici¨®n de Arco. Fue entonces cuando visit¨® el edificio de Tabacalera, a¨²n con la reforma sin concluir. ¡°Husmeando entre las ruinas, qued¨¦ fascinada con el edificio. En uno de los s¨®tanos descubr¨ª un mont¨®n de rollos con los que hac¨ªan el filtro de los cigarrillos. Le ped¨ª a un vigilante, Carlos, que me los guardara y el hombre lo ha hecho¡±. Esos rollos est¨¢n incorporados en la instalaci¨®n como asientos para los visitantes que quieran contemplar detenidamente las evoluciones de la luz.
A su Lima natal viaja en alguna ocasi¨®n, pero Grimanesa se siente neoyorquina (sin parar repite la muletilla You know?). All¨ª cumpli¨® su sue?o de ser artista y all¨ª se cas¨® con un ingeniero neoyorquino y tuvo a su hija Shamir, de 16 a?os. La ni?a ocupa el n¨²mero uno de su lista de prioridades y es su mayor motivo de orgullo porque considera que le ha sabido mostrar s¨®lidas bases para moverse por el mundo tomando sus propias decisiones. ¡°Es una ni?a bien construida. No solo porque la amamant¨¦ durante cuatro a?os y medio [bromea], sino porque mi marido y yo hemos tratado de que fuera una mujer libre y responsable de sus actos, lo mismo que quiero para todas las mujeres. Todas tenemos que poder cumplir nuestros sue?os. Me da mucha pena cuando veo que no ocurre as¨ª¡±.
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