Prisiones a?ade trabas para acceder al tratamiento contra la hepatitis C

Una juez de Sevilla ha ordenado a Instituciones Penitenciarias que administre a un preso el nuevo tratamiento para la hepatitis C que duplica las opciones de curaci¨®n de los afectados por la forma m¨¢s com¨²n del virus (el genotipo I). El f¨¢rmaco se aprob¨® a finales de 2011, pero su elevado coste llev¨® al Ministerio del Interior a establecer cupos para tratar la hepatitis C en las c¨¢rceles, donde la incidencia del virus supera el 25%. En los ¨²ltimos meses, Interior ha dado una vuelta de tuerca m¨¢s a las condiciones para administrar el f¨¢rmaco y ha decidido que hay que administrarlo con ingreso hospitalario en la Unidad Penitenciaria del Gregorio Mara?¨®n de Madrid, a pesar de que los m¨¦dicos que tratan a pacientes no reclusos sostienen que se puede tomar en la c¨¢rcel sin necesidad de estar ingresado.

As¨ª lo ha fijado tambi¨¦n la juez de Sevilla, a la que los abogados del preso hab¨ªan pedido la excarcelaci¨®n para que pudiera ser tratado por el Servicio Andaluz de Salud. Pero la juez rechaza esta opci¨®n porque el tratamiento puede ser dispensado ¡°sin problemas¡± en los centros penitenciarios, ¡°sin perjuicio de la remisi¨®n del paciente a los especialistas para controles programados¡±. La juez advierte de que ¡°no existe alternativa terap¨¦utica¡± al f¨¢rmaco recetado y que, si no se le trata, la enfermedad progresar¨ªa hacia una cirrosis hep¨¢tica o un c¨¢ncer de h¨ªgado ¡°en un relativo corto espacio de tiempo¡±. Seg¨²n el ¨²ltimo informe m¨¦dico, el virus est¨¢ ya en fase de cirrosis.

La decisi¨®n llega despu¨¦s de que Manuel Jes¨²s Troncoso, un recluso de 42 a?os coinfectado por hepatitis C y VIH, presentara una queja ante un juzgado de vigilancia penitenciaria porque Prisiones le niega los f¨¢rmacos que le prescribieron hace 1 a?o y 10 meses los especialistas del hospital Virgen del Roc¨ªo y al que Prisiones est¨¢ poniendo trabas desde que se aprob¨®. Este tratamiento se basa en una triple terapia que consigue tasas de curaci¨®n del 75% (frente al 40% del tradicional), pero que es tambi¨¦n mucho m¨¢s cara. Mientras la medicaci¨®n cl¨¢sica costaba unos 6.000 euros por a?o (la duraci¨®n estimada del tratamiento), con los nuevos f¨¢rmacos aumenta entre 44.534 y 59.629 euros.

El recluso de Sevilla se ha topado con otro inconveniente: Interior ha rechazado hasta ahora tratar a los presos coinfectados con hepatitis y VIH ampar¨¢ndose en que la ficha t¨¦cnica de los medicamentos no lo contempla. Sin embargo, la Agencia Espa?ola del Medicamento public¨® en 2012 un documento con las recomendaciones de uso de la terapia para estos enfermos, y el informe m¨¦dico de Troncoso advierte de que ¡°el hecho de que est¨¦ coinfectado por VIH aun hace m¨¢s necesario el tratamiento de la hepatitis¡±. Otro informe elaborado por el director de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del hospital Macarena de Sevilla advierte del peligro de que la enfermedad se complique hasta ser casi incurable. ¡°Cada d¨ªa que pasa sin tratamiento supone un riesgo de desarrollo de estas complicaciones, lo que en mi opini¨®n es inaceptable¡±, se?ala.

Seg¨²n ha admitido Prisiones a otras instituciones que han pedido informaci¨®n sobre el caso, hasta julio solo ha tratado a los presos monoinfectados y le hab¨ªa ofrecido a 15 el traslado al Gregorio Mara?¨®n. Ocho han rechazado irse, tres han iniciado el tratamiento y el resto, seg¨²n Interior, empezar¨¢n con la terapia ¡°a medida que la capacidad asistencial¡± lo permita. Entre los que han aceptado se encuentra, seg¨²n otras fuentes, un preso de Alicante al que una juez tambi¨¦n dio la raz¨®n para que Interior le tratara. Ante las reticencias de Prisiones a acatar el fallo, la juez dict¨® una orden en la que daba al Gobierno 15 d¨ªas para iniciar la terapia.

El diputado de IU Gaspar Llamazares ha presentado esta semana una proposici¨®n no de ley y una pregunta al Congreso para exigir al Gobierno explicaciones sobre el tratamiento a los presos con hepatitis C, y califica de ¡°triple cuello de botella¡± el protocolo creado por Interior para suministrar el f¨¢rmaco en Madrid.

A Troncoso le ofrecieron irse hace dos semanas, despu¨¦s de que la defensora del Pueblo, Soledad Becerril, que investig¨® de oficio su caso, sugiriera a Prisiones que le tratara. Pero el recluso prefiri¨® esperar la decisi¨®n de la juez porque no le garantizaban que el traslado implicase el tratamiento inmediato. La Asociaci¨®n Pro Derechos Humanos de Andaluc¨ªa, que apoya jur¨ªdicamente al preso, recurri¨® ayer el auto para pedir que concrete en un plazo de 15 d¨ªas el inicio de la terapia. La asociaci¨®n entiende que si no le atienden en ese plazo habr¨ªa que excarcelarlo para que pueda ser tratado a cargo del Servicio Andaluz de Salud.