Oriol Bohigas Mart¨ª, de la f¨ªsica nuclear al caos cu¨¢ntico
Coautor de una c¨¦lebre conjetura cient¨ªfica, buscaba nexos insospechados entre su disciplina y las matem¨¢ticas
Nacido en Barcelona en 1937, estudi¨® Ciencias F¨ªsicas en su universidad, participando activamente en los movimientos de oposici¨®n al r¨¦gimen franquista. En el a?o 1962 se traslad¨® a Orsay, cerca de Par¨ªs, para continuar sus estudios en el Instituto de F¨ªsica Nuclear fundado pocos a?os antes por Ir¨¨ne y Fr¨¦d¨¦ric Jolliot-Curie. El Gobierno franc¨¦s promov¨ªa con ¨¦xito la captaci¨®n de j¨®venes cient¨ªficos extranjeros para ayudar a impulsar su econom¨ªa. La conexi¨®n francoespa?ola en f¨ªsica nuclear y de part¨ªculas, que se ha mantenido desde entonces, debe mucho a este programa de becas y a sus primeros beneficiarios. En 1966 ingres¨® en el CNRS (el an¨¢logo de nuestro CSIC) y durante su carrera recibi¨® numerosas distinciones internacionales. Llegada la edad de jubilaci¨®n fue nombrado em¨¦rito, y sigui¨® activo en la investigaci¨®n hasta el pasado verano. El 22 de octubre falleci¨® a causa de un derrame cerebral.
El Departamento de F¨ªsica de la Universidad Aut¨®noma de Madrid, creada en 1968, liderado por el profesor Nicol¨¢s Cabrera, atrajo a destacados cient¨ªficos espa?oles en el extranjero. Bohigas estuvo contratado entre 1972 y 1974, pero decidi¨® regresar a Orsay cuando tuvo claro que el Ministerio del inefable Julio Rodr¨ªguez no respetaba las condiciones pactadas en su contrato de catedr¨¢tico. No obstante, esta breve estancia fue suficiente para ejercer, directa o indirectamente, una gran influencia en buena parte de los entonces j¨®venes cient¨ªficos espa?oles que quer¨ªan dedicarse a la f¨ªsica nuclear, a los que siempre acogi¨® en su laboratorio de Orsay. Muchos de nosotros, incluso sin haber colaborado directamente con ¨¦l, nos hemos beneficiado de sus consejos, orientaciones y cr¨ªticas.
Su actividad cient¨ªfica se inici¨® con el estudio de la estructura de los n¨²cleos at¨®micos. Pero su manera de entender la f¨ªsica, que pasaba por buscar relaciones entre campos aparentemente diversos, le llev¨® a las matrices aleatorias y de ¨¦stas, al caos cu¨¢ntico. Un sistema cl¨¢sico es ca¨®tico si dos trayectorias muy cercanas inicialmente llegan a divergir exponencialmente en el transcurso del tiempo. Un ejemplo es el tan manido ¡°efecto mariposa¡±, por el que las variaciones de presi¨®n atmosf¨¦rica debidas a un simple aleteo podr¨ªan llegar a producir un hurac¨¢n en un lugar muy distante. Pero si las trayectorias no tienen sentido en un sistema cu¨¢ntico, ?c¨®mo caracterizar el caos cu¨¢ntico? La celebrada conjetura de Bohigas, Giannoni y Schmit, afirma que las propiedades de las fluctuaciones estad¨ªsticas del espectro de energ¨ªa de un sistema cu¨¢ntico ca¨®tico son universales, y presentan las mismas caracter¨ªsticas que las de las matrices aleatorias, que solo dependen de las simetr¨ªas del sistema. Dicha conjetura, publicada en 1984, ha sido aplicada a diversos problemas en m¨¢s de mil art¨ªculos cient¨ªficos. La visi¨®n que ten¨ªa Bohigas de la f¨ªsica te¨®rica le llevaba a buscar conexiones insospechadas entre f¨ªsica y matem¨¢ticas. Por eso, a menudo se refer¨ªa en sus conferencias a dos sistemas muy diferentes: los n¨²cleos at¨®micos y la funci¨®n zeta de Riemann, tan importante en el estudio de los n¨²meros primos.
Oriol era persona de amplia cultura, mel¨®mano, conversador infatigable, mordaz a veces, de una gran agudeza cr¨ªtica siempre. En la Transici¨®n, enmend¨® las manifestaciones del presidente del Gobierno sobre el uso del catal¨¢n como idioma cient¨ªfico, impartiendo una conferencia sobre f¨ªsica nuclear en el Institut d¡¯Estudis Catalans. Heterodoxo, consigui¨® los m¨¢s altos puestos acad¨¦micos sin tener que defender una tesis doctoral.
Jes¨²s Navarro es profesor de Investigaci¨®n en el IFIC de Valencia (CSIC) y Alfredo Poves es catedr¨¢tico de la Universidad cut¨®noma de Madrid y miembro del IFT UAM-CSIC.
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