Algunas pistas sobre el ¨¦xito de Asia

No es f¨¢cil explicar cu¨¢les son las razones concretas de los buenos resultados de Asia, pero se pueden barajar varias explicaciones generales y se pueden descartar otras. Entre las descartables podemos incluir en t¨¦rminos generales lo relacionado con el dise?o general del sistema educativo o las caracter¨ªsticas de los centros, ya que la diversidad de sistemas en Asia es tan grande o mayor que en Europa. Los centros son de todo tipo: grandes y peque?os, m¨¢s o menos aut¨®nomos, con mayor o con ninguna capacidad para determinar los contenidos curriculares y las actividades de los centros y, en general, con poca autonom¨ªa para seleccionar a su propio personal docente. Los sistemas no solo son diferentes unos a otros, sino que adem¨¢s han tenido historias radicalmente diferentes entre s¨ª.

Entre las explicaciones que no se pueden descartar hay tres que aparecen una y otra vez en las interpretaciones de este fen¨®meno, que no son excluyentes entre s¨ª. La primera es de car¨¢cter cultural y se aplica m¨¢s all¨¢ del ¨¢mbito de la educaci¨®n: el confucianismo imbricado en todo el ¨¢mbito cultural significado implica niveles de autoexigencia y de respeto a la autoridad del profesor que no existen en el mundo occidental, y que suponen resultados mejores con el mismo esfuerzo p¨²blico en educaci¨®n. Son por lo tanto los valores confucianos, pr¨¢cticamente irrepetibles en occidente, los que dan buenos resultados en PISA. Es una explicaci¨®n algo vaga y en cierto modo conservadora, en la medida en la que remite no a las pol¨ªticas educativas, sino a los valores de los participantes.

La segunda explicaci¨®n se refiere al nivel de exigencia establecido por los padres, y especialmente por las madres. Las mujeres asi¨¢ticas y en general el entorno familiar tienden a plantear niveles de exigencia muy elevados en t¨¦rminos no solo de las actividades propias de la escuela y la vigilancia del desempe?o, sino tambi¨¦n de una multitud de actividades extraescolares.

La tercera explicaci¨®n es algo m¨¢s prosaica, y se refiere al hecho de que hablamos de pa¨ªses con un sistema de escritura compleja, que exige un esfuerzo espec¨ªfico a los alumnos y un modelo de educaci¨®n altamente regulado. Las pruebas PISA, que no exigen escritura, ocultar¨ªan las dificultades del alumnado que aprende Kanji, Hanzi o Hancha para hacer un uso activo de su lengua escrita, aunque esto se podr¨ªa aplicar en mucha menor medida en el tambi¨¦n exitoso caso coreano.

Jaime Rivi¨¨re es profesor de Sociolog¨ªa de la Universidad de Salamanca