La ola imparable de la universidad privada arrolla a la p¨²blica
Pronto se producir¨¢ el ¡®sorpasso¡¯ en n¨²mero de centros: hay 50 dependientes de la Administraci¨®n y 46 de la empresa y la Iglesia, pero los gobiernos auton¨®micos estudian o tramitan una decena m¨¢s
Si el ritmo de creaci¨®n no se frena, en unos meses habr¨¢ en Espa?a m¨¢s universidades privadas que p¨²blicas. La ola de privatizaci¨®n parece imparable. Hay 50 campus p¨²blicos y la Administraci¨®n no abre ninguno desde que en 1998 se aprob¨® la Polit¨¦cnica de Cartagena. Mientras, la privada suma ya 46 ¨D31 aprobados en estos ¨²ltimos 26 a?os¨D y estudia o tramita al menos otros diez. Ya hay m¨¢s alumnos inscritos en m¨¢steres privados que en p¨²blicos, y en Madrid, por ejemplo, ya se cuentan m¨¢s los estudiantes privados de primero de Medicina (que pagan hasta 23.000 euros por curso) que los que acuden a la p¨²blica (1.240 euros por a?o). El Gobierno confiesa que de esta avalancha le preocupan, sobre todo, dos aspectos: la baja calidad de muchos proyectos, y que la universidad se convierta en un simple mercado en el que los estudiantes ricos siempre dispongan de una puerta de entrada. El secretario de Estado de Ciencia, Innovaci¨®n y Universidades, Juan Cruz Cigudosa, lo expresa as¨ª: ¡°En nuestra historia reciente, la universidad ha sido el mejor ascensor social que existe, porque prepara a la gente para el futuro. Si disminuimos nuestra actividad controladora [de la calidad], haremos un flaco servicio a la sociedad¡±.
La titularidad de estas entidades privadas es diversa: hay una quincena larga relacionadas con la Iglesia, tres pertenecen a obispados, otras tres dependen del entorno del Opus Dei, la Asociaci¨®n Cat¨®lica de Propagandistas va camino de incorporar la quinta, los jesuitas disponen de cuatro y los Legionarios de Cristo, una. Los centros religiosas se gestionan por medio de fundaciones que no reparten dividendos, sino que est¨¢n obligados a revertir los beneficios en su universidad. La banca tiene dos y hay dos m¨¢s semip¨²blicas (UOC de la Generalitat y Vic). La veintena restante est¨¢ en manos de empresarios particulares, como el due?o del Deportivo Alav¨¦s, o en las de grandes conglomerados empresariales (Planeta planea abrir la tercera o el grupo de comunicaci¨®n Vocento es accionista de una).
Pero el debate se encuentra en la incorporaci¨®n de fondos de inversi¨®n a este sector. Permira compr¨® en 2018 por 770 millones de euros la Universidad Europea, que dispone de centros en Madrid, Valencia, Tenerife y M¨¢laga. Tendr¨¢ pronto uno en C¨¢ceres y ha manifestado su inter¨¦s en Gij¨®n. Este a?o, tras llevar a cabo el primer ERE de profesores en una universidad espa?ola, se ha quedado como socio minoritario de la Europea tras vender la mayor parte, por 2.200 millones, a otro fondo: EQT (Idealista y Parques Reunidos). Otro caso: en 2019, el 70% de la Alfonso X el Sabio, con centros en Madrid y M¨¢laga, acab¨® en manos de CVC por 1.100 millones. El fondo tantea la venta de su participaci¨®n por unos 2.000 millones, seg¨²n Bloomberg.
Rafael Albarr¨¢n, el socio responsable de educaci¨®n de la consultora Ernest Young Espa?a que asesora a estos fondos, no hablar¨ªa de nuevo furor: ¡°Desde hace unos a?os se invierte en colegios, universidades, formaci¨®n profesional, incluso, esto es m¨¢s reciente, en formaci¨®n continua¡±. Tambi¨¦n en residencias universitarias. ¡°Los fondos no quieren s¨®lo tener rentabilidad, sino aportar un beneficio a la sociedad. Se buscan activos y compa?¨ªas que realmente generen un impacto social y/o medioambiental positivo, y que, con una inversi¨®n de capital privado, influyan en la sociedad¡±. Y ah¨ª, seg¨²n Albarr¨¢n, encaja la universidad. El atractivo de la universidad para los inversores, seg¨²n este consultor, se basa tambi¨¦n en que, como los grados duran cuatro a?os, se puede prever la caja. Y se vive un momento de transformaci¨®n digital y tecnol¨®gica que obliga al trabajador a someterse a una formaci¨®n continua ¡°que es atendida de manera combinada por la universidad p¨²blica y privada, con una calidad excepcional en ambos casos¡±.
Los alumnos de la universidad privada crecen en grado ¨Dhan aumentado del 13,3% en 2015 al 21,8% de los inscritos en una carrera el pasado curso¨D, pero a¨²n est¨¢n lejos de la p¨²blica por el peque?o tama?o de sus campus en plena expansi¨®n en muchos casos. Es cierto que en Madrid cursan ya m¨¢s alumnos privados para ser m¨¦dicos que en la p¨²blica, pero eso no ocurre en el resto de Espa?a. En la capital pasa lo mismo con primero de Veterinaria (hasta 89.800 euros el t¨ªtulo privado) u Odontolog¨ªa (101.500 euros). Con respecto a los m¨¢steres, ya se ha producido el sorpasso: la privada copa el 63% de las plazas ofertadas y el 50,2% de los apuntados, gracias en parte a que se ha quedado con el negocio de los posgrados a distancia habilitantes para poder ejercer de profesor de secundaria o psic¨®logo cl¨ªnico.
¡°No nos preocupa que haya muchas privadas [es un derecho constitucional], sino la calidad que presentan. Hay muchos proyectos que est¨¢n en marcha que hemos enjuiciado muy desfavorablemente¡±, denuncia el secretario de Estado de Ciencia, Innovaci¨®n y Universidades. Los t¨¦cnicos del ministerio elaboran un informe basado, entre otros factores, en el perfil de los profesores, la financiaci¨®n o las instalaciones. El dictamen luego se discute y se vota en la Conferencia General de Pol¨ªtica Universitaria (CGPU), de la que forman parte los gobiernos auton¨®micos. Este informe es preceptivo pero no vinculante, de forma que los ejecutivos auton¨®micos pueden obviarlo. Desde la llegada de Pedro S¨¢nchez al Gobierno en 2018 se han emitido 21 informes desfavorables, cinco positivos y otros dos condicionados a cambios. Y tramita en la actualidad otras seis propuestas. Pese a los informes negativos, en este per¨ªodo se han aprobado en parlamentos regionales 11 campus. Esta semana Sumar y PSOE llevaron a la comisi¨®n de Ciencia del Congreso una proposici¨®n no de ley para que el informe se convirtiese en vinculante, pero PP, Vox y Junts votaron en contra.
Pr¨®ximamente, pese al informe negativo, se aprobar¨¢ en la Asamblea de Madrid la Universidad Abierta de Europa, la decimocuarta universidad privada de esta regi¨®n que guarda otras tres en la rec¨¢mara, y en Extremadura la Universidad Internacional para el Desarrollo (Uninde), su primer centro privado. Esta regi¨®n tiene en anteproyecto de ley otras tres. Baleares, otra comunidad sin centros universitarios privados, tambi¨¦n contar¨¢ pronto con otro: la Universidad de Mallorca. Asturias asegura que solo dar¨¢ su autorizaci¨®n a su primera privada, la Europea, si cuenta con el informe preceptivo favorable. Quien se resiste es el Gobierno de Castilla-La Mancha. Encima de la mesa tiene 10 propuestas que no estudiar¨¢ antes de que se apruebe su ley de universidades. ¡°No queremos convertirnos en una m¨¢quina de expedir t¨ªtulos ni en el sat¨¦lite de las universidades privadas de Madrid¡±, asegura Jos¨¦ Antonio Castro, director general de Universidades de Castilla-La Mancha. ¡°Muchas privadas dedican cero euros a investigaci¨®n. Hay que determinar que un porcentaje de su presupuesto propio lo dediquen a hacer ciencia. No vale que sus investigadores hayan captado 300.000 euros del ministerio, cinco millones de Europa... No¡±.
Juan Cay¨®n, rector de la decimotercera universidad privada aprobada en Madrid, UDIT (Universidad de Dise?o, Innovaci¨®n y Tecnolog¨ªa) y antes rector de la Antonio Nebrija, est¨¢ de acuerdo en que se pidan requisitos de calidad, pero pide competir ¡°en igualdad de condiciones con la p¨²blica¡± en las convocatorias de proyectos de investigaci¨®n nacionales e internacionales. UDIT, que naci¨® con el informe contrario del CGPU, va por buen camino, seg¨²n Cay¨®n. Cuentan con m¨¢s de 3.000 alumnos ¨Dantes eran una escuela de dise?o prestigiosa¨D, est¨¢n acreditando a profesores doctores y van camino de tener un programa de doctorado. ¡°A la larga yo creo que las universidades se van a reordenar. Que va a haber fusiones y desapariciones, sin duda. Pero probablemente tambi¨¦n entre las p¨²blicas¡±, a?ade Cay¨®n.
En 2021, el entonces ministro Manuel Castells impuls¨® el decreto de creaci¨®n y reconocimiento de universidades, que obliga a que el 50% de los alumnos de una universidad privada o p¨²blica sean de grado, que la mitad de los docentes hayan le¨ªdo la tesis o que se oferten 10 carreras y seis m¨¢steres como m¨ªnimo. Pero ahora el ministerio quiere endurecerlo. ¡°Nuestro principal objetivo es que la educaci¨®n superior tenga los mejores niveles de calidad docente y de actividad investigadora y vamos a emplear todos los medios legales a nuestro alcance para que sea as¨ª. Es un proceso que no est¨¢ acabado, sino en plena ebullici¨®n¡±, advierte el secretario de Estado.
¡°La posici¨®n de las comunidades deber¨ªa estar alineada con nosotros en el sentido de no favorecer la proliferaci¨®n de proyectos universitarios de baja calidad. Es decir, dirigir los recursos para la universidad p¨²blica, que es la ¨²nica forma de asegurar el proyecto que tenemos de pa¨ªs¡±, prosigue Cigudosa. ¡°Me preocupa que esto en Europa no est¨¢ pasando y que se nos puede percibir como un pa¨ªs en el que se expenden t¨ªtulos sin calidad y eso es lo que vamos a intentar quitar de ra¨ªz¡±, a?ade.
Varios pa¨ªses de Latinoam¨¦rica sucumbieron a una privatizaci¨®n de la universidad sin calidad y ahora intentan revertirla. All¨ª se llaman universidades garaje o patito. ¡±Es imposible que aguanten todas las privadas. En Chile tienen unos problemas incre¨ªbles porque han desaparecido universidades del mercado¡±, razona C¨¦sar Rendueles, cient¨ªfico titular en el Instituto de Filosof¨ªa del CSIC. El autor del ensayo Contra la igualdad de oportunidades sostiene que las primeras perjudicadas por este aumento de centros privados van a ser, precisamente, las privadas de larga tradici¨®n, que tienen una ¡°docencia digna¡±, y ahora se van a ver rodeadas de ¡°autoescuelas con pretensiones sin capacidad de dar un m¨®dulo de FP, a a?os luz de una p¨²blica¡±.
Rendueles diferencia varias din¨¢micas. Por un lado, opina que ¡°una vez que ya se han conquistado las ense?anzas medias y primarias, hay una extensi¨®n a la universidad de un modelo privado que se apoya desde el sector p¨²blico¡±. Y por otro lado, observa una ¡°apuesta por la destrucci¨®n de la educaci¨®n superior, tal y como la conocemos, porque se ve como un lugar de adoctrinamiento, donde se pierde el tiempo¡±. Y remarca el ¡°endeudamiento enorme de las familias, que hacen un gran sacrificio econ¨®mico¡±. En el curso 2019/2020, los hogares invirtieron 6.622 millones en educaci¨®n privada universitaria, seg¨²n los datos del INE.
En sus legislaciones, varias comunidades aut¨®nomas supuestamente van a tratar de fijar una calidad m¨ªnima. Ocurrir¨¢ en Madrid o en Andaluc¨ªa, donde se han autorizado cuatro universidades privadas en 10 meses. En esta ¨²ltima comunidad, tambi¨¦n una nueva ley exigir¨¢ a los centros privados que un 3% de sus ingresos anuales se dediquen a becas y otro 5% a investigaci¨®n.
Catalu?a, que alberga muchas de las mejores universidades de Espa?a, no autoriza una privada desde 2003. Ni siquiera tiene alg¨²n proyecto encima de la mesa. Mientras, un grupo de empresarios gallegos conf¨ªa en convertir un centro adscrito, Cesuga, en la segunda universidad privada de la comunidad.
Jos¨¦ Saturnino Mart¨ªnez, director general de la Agencia Canaria de Calidad Universitaria y Evaluaci¨®n Educativa (ACCUEE), crey¨® que con su peque?o tama?o las cuatro privadas del archipi¨¦lago (una quinta no est¨¢ a¨²n activa) no iban a tener capacidad para cumplir los requisitos del decreto de Castells, pero le han sorprendido. ¡°Tenemos universidades de 3.000 o 4.000 alumnos que son capaces de tener uno o dos programas de doctorado fuertes. Ven que se rascan el bolsillo, que han salido al mercado europeo, est¨¢n trayendo gente...¡±, se alegra. ¡°Lo que se est¨¢n gastando de m¨¢s en un doctorado es lo que les garantiza que tengan la licencia. Se dan cuenta que recuperan el dinero con los m¨¢steres¡±.
¡°Hace 25 a?os, cuando a¨²n se creaba alguna universidad p¨²blica, hab¨ªa un debate medi¨¢tico, pol¨ªtico, sobre si hab¨ªa demasiadas universidades, pero ahora que solo se abren privadas, nadie lo discute. Ah¨ª se ve d¨®nde pueden estar los intereses¡±, reflexiona Mart¨ªnez, profesor de sociolog¨ªa en la Universidad de La Laguna (p¨²blica).
Plazas a demanda
¡°Un estudiante que no puede acceder a una universidad p¨²blica y su familia tiene los recursos necesarios, puede ingresar en una privada. Entonces ?por qu¨¦ las p¨²blicas no ofrecemos m¨¢s plazas?¡±, plantea Eva Alc¨®n, presidenta de la conferencia de rectores (CRUE). ¡°La respuesta es muy sencilla: porque no tenemos recursos p¨²blicos necesarios. Implicar¨ªa desdoblar grupos, contratar a m¨¢s profesorado, se necesitan instalaciones...¡±.
Los expertos se?alan que las facultades crecen por doquier ¨Dtambi¨¦n p¨²blicas¨D , debido a la enorme demanda, sin tener en cuenta que pueden abocar al paro a miles de veterinarios, fisioterapeutas o psic¨®logos que se grad¨²an cada a?o. De nada sirve por ahora que los colegios profesionales alerten p¨²blicamente de la precariedad. ¡°Desde hace mucho tiempo venimos pidiendo ese mapa de titulaciones para poder planificar la oferta acad¨¦mica¡±, prosigue Alc¨®n. ¡°Muchas universidades hemos hecho una revisi¨®n exhaustiva de los planes de estudios. Adem¨¢s de poner nuevas titulaciones con demanda social, como Rob¨®tica o Bioqu¨ªmica, hemos reorganizado el resto¡±.
Antonio Abril, presidente de la Conferencia de Consejos Sociales de las Universidades P¨²blicas, el ¨®rgano que sirve de puente entre el mundo acad¨¦mico p¨²blico y el empresarial y cultural, es tremendamente cr¨ªtico. ¡°Las universidades p¨²blicas tienen que cambiar el sistema de gobernanza para dar entrada a la sociedad, para atender m¨¢s y mejor sus deseos. Porque tenemos un 9% de paro en egresados, un 36% de sobrecualificaci¨®n y mucha migraci¨®n de talento¡±, prosigue el ex director general de Inditex. ¡°Y en ese contexto entra el capital privado, que encuentra un nicho, porque hay algunos aspectos en los que superan a las p¨²blicas: la formaci¨®n en competencias profesionales, la cercan¨ªa a la empresa, su mayor capacidad para contratar profesionales y que trabajan m¨¢s el tema de la empleabilidad ¡°.
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