A menor nivel educativo, m¨¢s obesidad

Las diferencias socioecon¨®micas ¡ªla renta, el nivel de estudios...¡ª explican muchas de las desigualdades en salud de la poblaci¨®n espa?ola. A menos ingresos, mayor prevalencia de, por ejemplo, dolencias como la diabetes. En el caso de la obesidad, considerada uno de los principales factores de riesgo de varias enfermedades cr¨®nicas, el nivel de estudios genera una brecha aparentemente insalvable. La incidencia de la obesidad ¡ªdefinida como una proporci¨®n de grasa que supere un 25% y un 33% de la masa corporal total en hombres y mujeres, respectivamente¡ª en mujeres con estudios primarios es cuatro veces superior a la de aquellas con estudios universitarios.

As¨ª lo concluye un informe del Ministerio de Sanidad, reci¨¦n publicado, que ha estudiado la informaci¨®n obtenida en las encuestas nacionales de salud realizadas entre 2001 y 2012 para sacar conclusiones sobre los factores de riesgo de las enfermedades cr¨®nicas. En esta d¨¦cada, la frecuencia de la obesidad en la poblaci¨®n adulta aument¨® en un 3,8% (un 2% en mujeres y un 5,7% en hombres). Si en mujeres el nivel de estudios determina hasta cuatro veces m¨¢s incidencia, en los hombres la brecha se reduce: solo el doble.

¡°Los estudios muestran que la calidad de la dieta de las personas con menor nivel educativo es tambi¨¦n menor. Suele contener m¨¢s grasas perjudiciales¡±, explica Miquel Porta, catedr¨¢tico de Salud P¨²blica de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona e investigador del Imim. ¡°Tambi¨¦n sabemos que una parte de la epidemia de obesidad no se debe a que la gente haga poca actividad f¨ªsica ¡ªel paradigma del exceso de ingesta de energ¨ªa comparado con el gasto de energ¨ªa¡ª; varios investigadores trabajan ahora en hip¨®tesis preocupantes: obes¨®genos ambientales, sustancias qu¨ªmicas que contribuyen a la acumulaci¨®n de grasa y que tambi¨¦n se encuentran en mayor medida en las dietas de menos calidad¡±.

La obesidad est¨¢ considerada como uno de los principales factores de riesgo de distintas enfermedades cr¨®nicas y problemas de salud, como la diabetes mellitus, la hipertensi¨®n arterial, enfermedad coronaria y cerebrovascular y algunos tipos de c¨¢ncer. Seg¨²n las estimaciones que menciona el informe, la obesidad explica el 80% de los casos de diabetes del adulto, el 55% de los de hipertensi¨®n arterial y el 35% de los casos de enfermedad coronaria. Un estudio de investigadores de la Universidad Aut¨®noma de Madrid publicado en la European Journal of Clinical Nutrition en 2003 calcul¨® que, en Europa, al menos una de cada 13 muertes podr¨ªa estar asociada a la obesidad.

El informe de Sanidad repasa el resto de factores de riesgo de enfermedad cr¨®nica. M¨¢s del 40% de la poblaci¨®n adulta espa?ola (39% en hombres y 49,9% en mujeres) se declar¨® inactiva en su tiempo libre. Y una vez m¨¢s, las personas con nivel de estudios m¨¢s bajo declararon que no realizaban actividad f¨ªsica en una proporci¨®n un 60% superior que aquellos con nivel m¨¢s elevado. En la mayor¨ªa de comunidades aut¨®nomas, sin embargo, la prevalencia de inactividad f¨ªsica ha descendido en la ¨²ltima d¨¦cada.

Ocurre algo similar con el porcentaje de fumadores: eran el 34,5% en 2001 y para 2011/12 ya se hab¨ªan reducido al 27,1%. En hombres, la tendencia descendente se observ¨® en todos los grupos de edad. En mujeres, se observ¨® en aquellas con una edad inferior a los 45 a?os, ya que en las mujeres de 45 a 64 a?os la tendencia en el porcentaje de fumadores fue ascendente.

El porcentaje de consumidores de alcohol en cantidades que suponen un riesgo cr¨®nico para la salud tambi¨¦n desciende: era 4,1% en 2003 y 1,2% en 2011/12. Por sexos, las mujeres bebedoras de riesgo pasaron del 1,5% en 2003 a 0,3% en 2011/12, mientras que en hombres esos porcentajes fueron 6,9% y 2,1%, respectivamente.

En consumo insuficiente de frutas tambi¨¦n han mejorado ligeramente las estad¨ªsticas: del 30,5% en 2011 al 28,6% pasada una d¨¦cada.