¡°Mi neura me da de comer¡±

Marta Romo tiene 35 a?os y ya ha creado cuatro empresas y dos asociaciones, desde que a los 18 montase su primer negocio: un puesto de helados Camy. Para esta emprendedora la edad ha sido un obst¨¢culo, porque su aspecto ani?ado no resultaba cre¨ªble ante los directivos a los que ten¨ªa que formar para que lideraran sus organizaciones o para orientarles en sus carreras profesionales. Pero, como cree que todo es posible ¡ª¡°confiar en la vida y en tus capacidades es lo que te ayuda a crear¡±¡ª, ech¨® mano de dos de sus armas, la escritura y la ciencia, que se han convertido en sus mejores aliadas.

Esta pedagoga, coach, neuropsicoeducadora, especialista en programaci¨®n neuroling¨¹¨ªstica y en eneagrama, est¨¢ escribiendo su segundo libro en solitario (ha publicado cinco en equipo) y ha empezado a mejorar el cerebro de personas con trastornos de sue?o, d¨¦ficit de atenci¨®n, epilepsia... con un aparato de neurofeedback que regula las ondas cerebrales, que acaba de comprar.

As¨ª es como ha conseguido ganarse la credibilidad que necesitaba en un mundo, dice, ¡°en el que el concepto de confianza est¨¢ muy devaluado. La sociedad que hemos montado se basa en la indefensi¨®n aprendida. Desde peque?os ning¨²n estamento nos env¨ªa el mensaje contrario. Ni educadores, ni pol¨ªticos, ni religiosos, ni empresas nos dicen: ?t¨² puedes! y nos creemos que no somos capaces de conseguir nuestros sue?os¡±. En su caso, esa fuerza para pensar que todo es posible, que pod¨ªa hacer aquello que se propusiera (lo que ella llama sus superpoderes), se la imprimieron sus padres. Y una profesora pedagoga, que le anim¨® a hacer, a responsabilizarse, la llev¨® a estudiar la profesi¨®n de la que ahora est¨¢ enamorada.

"La sociedad que hemos montado se basa en la indefensi¨®n aprendida"

Convencida de que ¡°creer es crear¡±, Marta Romo recomienda precauci¨®n ¡°porque lo que te construye a veces tambi¨¦n te destruye¡±. Ella lo ha probado. ¡°Cuando eres fuerte en algo, se te da bien, tiendes a utilizarlo permanentemente. Tanto que te llega a obsesionar y se convierte en tu debilidad. Es como una droga a la que hay que poner l¨ªmites¡±, advierte. En su opini¨®n, ¡°todos somos neur¨®ticos, aunque no estemos enfermos. Mi neurosis es que me encanta quedar bien con la gente y ayudarla. Y esa neura es la que me da de comer. Le estoy agradecida, pero tengo que tener cuidado porque es adictiva¡±.

Por eso ha aprendido, gracias a la neurociencia, que los pensamientos repetitivos y dirigidos pueden generar nuevos h¨¢bitos. ¡°Si todos manipulan nuestros cerebros, los padres, los profesores, los pol¨ªticos, la publicidad... ?Por qu¨¦ no vamos a manipularlo nosotros mismos en nuestro propio beneficio?¡±, dice.

Ahora, se?ala mientras da buena cuenta de las patatas souffl¨¦, que tanto le gustan y de una carne argentina ¡°bien hechita¡±, Marta se enfrenta a la tarea de pasar de ser emprendedora a empresaria. Be-Up, la consultora que fund¨® hace cinco a?os junto a su socia, Pilar Jeric¨®, ahora tiene una plantilla de 23 personas y va a salir fuera de Espa?a. ¡°El emprendedor disfruta tanto de lo que hace que interviene en todo. Ser empresario es descubrir el placer de ser prescindible, de confiar en la gente y en lo que has creado, para emprender en otras facetas de su vida, que es lo que quiero en este momento¡±, asegura esta pedagoga que iba para bailarina o misionera.