Los m¨¦dicos consideran que la decisi¨®n de abortar debe ser de la mujer
La Asamblea de los colegiados censura duramente la reforma de Gallard¨®n. Quien interrumpe su embarazo ¡°no ha de ser considerada de antemano como una enferma¡±, dicen
La Organizaci¨®n M¨¦dica Colegial aprob¨® ayer una declaraci¨®n institucional en la que censura la reforma de la ley del aborto. En ella, los m¨¦dicos critican que se deje en sus manos la responsabilidad de certificar si existen razones sanitarias tras la decisi¨®n de la mujer de interrumpir su embarazo. ¡°No es aceptable que una decisi¨®n tan importante quede en manos de terceros¡±, dicen. El anteproyecto despenaliza esta intervenci¨®n solo en caso de violaci¨®n o riesgo grave para la salud f¨ªsica o psicol¨®gica de la mujer. Un modelo similar, aunque m¨¢s restrictivo ¡ªelimina el aborto por malformaci¨®n y exige que ese peligro sanitario sea ¡°grave¡±¡ª, al que estuvo en vigor de 1985 a 2010; periodo en el que el 90% de las mujeres alegaban riesgo psicol¨®gico para abortar.
¡°La mujer que por distintas circunstancias decide interrumpir su embarazo no ha de ser considerada ni definida de antemano como una enferma mental¡±, dicen en su declaraci¨®n. Los m¨¦dicos destacan adem¨¢s que la nueva ley generar¨¢ graves desigualdades. Solo las mujeres con m¨¢s recursos podr¨¢n viajar a cualquier otro pa¨ªs europeo a interrumpir su embarazo.
El documento, elaborado por los 52 presidentes de los colegios de Espa?a, reclama que se incluya entre los supuestos despenalizados el aborto por malformaci¨®n fetal grave o enfermedad incompatible con la vida. Un punto que ya hab¨ªa propuesto la comisi¨®n deontol¨®gica. Con la ley actual, que permite a la mujer abortar sin tener que justificar una raz¨®n hasta la semana 14 de gestaci¨®n y hasta la 22 por razones sanitarias, existe la opci¨®n de interrumpir un embarazo por anomal¨ªas fetales extremadamente graves sin l¨ªmite temporal.
Los m¨¦dicos tambi¨¦n proponen al Gobierno que deje en manos de las menores de 16 y 17 a?os la decisi¨®n de abortar ¡ªalgo que el anteproyecto elimina al exigir consentimiento paterno¡ª, aunque creen que al menos uno de los representantes legales de estas j¨®venes debe ser informado. ¡°Se podr¨¢ obviar esta informaci¨®n cuando alegue fundadamente que eso le provocar¨¢ un conflicto grave¡±, dicen los facultativos.
El espacio que la nueva ley dedica a las pol¨ªticas de prevenci¨®n, as¨ª como a la educaci¨®n sexual es insuficiente para los m¨¦dicos, que reclaman mayor acceso a los anticonceptivos y que la p¨ªldora poscoital sea gratuita y se dispense en todos los centros de salud y orientaci¨®n familiar. Los puntos que la reforma dedica a la objeci¨®n de conciencia, que permitir¨¢ a todos los sanitarios alegar razones de conciencia para evitar ¡°colaborar¡± en la prestaci¨®n, tampoco satisfacen a los m¨¦dicos. En su declaraci¨®n institucional estos piden que solo puedan objetar los sanitarios que tengan una participaci¨®n directa en la intervenci¨®n, tal y como dicta ahora la ley.
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