La pobreza h¨ªdrica se agudiza
El cambio clim¨¢tico perjudica a¨²n m¨¢s a las regiones que dependen de la lluvia para abastecerse
No se van a cumplir estrictamente los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) vinculados al abastecimiento de agua potable y saneamiento. Encima, el cambio clim¨¢tico agudiza ya la disponibilidad de este recurso h¨ªdrico en varios puntos del mundo, en especial en los pa¨ªses m¨¢s pobres. Analistas de diversos organismos internacionales, como la OMS y Unicef, y el ¨²ltimo informe del Panel Intergubenamental de Expertos sobre el Cambio Clim¨¢tico (IPCC) no pintan un panorama muy halag¨¹e?o para un planeta en el que cada d¨ªa mueren 2.000 ni?os por enfermedades, especialmente diarreas, asociadas a un nulo o deficiente acceso a fuentes de agua potable.
?A mediados del mes de febrero, la Asamblea General de la ONU celebr¨® una reuni¨®n de alto nivel para afrontar la lacra que supone que, a¨²n hoy, cientos de millones de personas sigan sin agua potable, saneamiento y electricidad en sus hogares, y para pensar en resolver estas graves carencias m¨¢s all¨¢ de 2015, fecha marcada para cumplir con los ODM. En esos d¨ªas, la agencia de noticias IPS public¨® un completo art¨ªculo de Thalif Deen, experto divulgador de reuniones y acuerdos en torno a la ONU, donde los m¨¢s altos responsables de esta organizaci¨®n asum¨ªan el ¡°fracaso h¨ªdrico¡±.
El primero en ejemplificar esta realidad fue el propio presidente de la Asamblea General, John Ashe, quien repiti¨® las cifras de la verg¨¹enza: ¡°783 millones de personas viven sin agua potable y 2.500 millones no tienen saneamiento adecuado¡±. Y en un gui?o a lo que est¨¢ por venir a?adi¨®: ¡°Alrededor del 80% de la poblaci¨®n mundial vive en ¨¢reas con graves amenazas a la seguridad h¨ªdrica¡±.
De lo que est¨¢ por venir tendr¨¢ mucha culpa el cambio clim¨¢tico. Los primeros datos del quinto informe del IPCC, presentados en septiembre del pasado a?o, pronostican graves alteraciones en el ciclo del agua. ¡°En la regi¨®n mediterr¨¢nea, Oriente Pr¨®ximo, suroeste de EE UU y sur de ?frica se reducir¨¢ la escorrent¨ªa [agua disponible] y la humedad del suelo¡±, explican en el resumen del informe, y Thomas Stocker, copresidente del grupo de trabajo que lo ha elaborado, afirm¨® en la presentaci¨®n que ¡°es muy probable que las olas de calor ocurran con mayor frecuencia y duren m¨¢s¡±. ¡°Conforme se vaya calentando la Tierra, prevemos que las actuales regiones h¨²medas recibir¨¢n mayores precipitaciones, y las regiones secas, menos¡±.
M¨¢s sequ¨ªas
No hace falta esperar para comprobar c¨®mo se agudizan estos cambios. Hace ya diez a?os, WWF puso rostro a las consecuencias de este fen¨®meno con su campa?a Testigos del clima. Penina Moce, madre de cinco hijos y habitante de la isla de Kabara, del archipi¨¦lago de Fiyi, resum¨ªa su situaci¨®n: ¡°La isla de Kabara no tiene r¨ªos y dependemos de las lluvias para obtener agua potable. Nuestra capacidad de almacenamiento es escasa¡±. El incremento de las sequ¨ªas y una mayor erosi¨®n costera perjudican a unas poblaciones que, como en el caso de ?frica, dependen al 95% de las lluvias como recurso h¨ªdrico, al no existir pantanos ni otras infraestructuras de abastecimiento.
Crear esas infraestructuras (balsas de recogida de agua de lluvia, canales, acequias, tanques¡), adaptar las plantaciones y las variedades de cultivo a las nuevas condiciones clim¨¢ticas y fomentar el desarrollo de las energ¨ªas renovables, en especial la solar, son algunas de las medidas que se est¨¢n poniendo en pr¨¢ctica para paliar el impacto clim¨¢tico asociado al agua.
En pa¨ªses como Sri Lanka, que ocupa la isla situada al sureste de India, las consecuencias de las recurrentes sequ¨ªas tambi¨¦n se hacen notar y piensan en las energ¨ªas renovables como alternativa porque el ¨²nico recurso local y renovable con el que cuentan es el agua, a trav¨¦s de las presas hidroel¨¦ctricas. La falta de lluvias, adem¨¢s de reducir sus cosechas de arroz, obliga al pa¨ªs a importar combustibles f¨®siles que laminan su econom¨ªa e independencia energ¨¦tica y contribuyen a fomentar el fen¨®meno causa de sus desgracias, el cambio clim¨¢tico. En declaraciones a IPS, Riza Yehiya, experto esrilanqu¨¦s en el manejo de riesgos clim¨¢ticos, advierte que los gobernantes no est¨¢n tomando en serio estos cambios: ¡°Los que est¨¢n en el poder lo ven como una cosa pasajera¡±.
Pero el mayor esfuerzo deben hacerlo las econom¨ªas y los pa¨ªses m¨¢s pudientes. Seg¨²n Girish Menon, director de programas internacionales de la organizaci¨®n WaterAid, ¡°la ayuda internacional para el agua y el saneamiento cay¨® alrededor de mil millones de d¨®lares entre 2009 y 2011, en parte debido a la crisis financiera mundial¡±. Esta aportaci¨®n se recuper¨® en 2012, pero todav¨ªa est¨¢ en la mitad del presupuesto estimado para financiar los compromisos sobre el agua de los ODM.
Invertir en solucionar estos problemas es hacerlo en mejorar las condiciones de salud, educaci¨®n y, en definitiva, de vida de un tercio de la poblaci¨®n mundial, como se encargan de recordar en estos d¨ªas las ONG Ongawa y Alianza por la Solidaridad, que participan en la Marcha Mundial por el Agua y el Saneamiento 2014. Desde Ongawa recuerdan adem¨¢s ¡°la discriminaci¨®n, la desigualdad y el desgaste para la salud de mujeres y ni?as, que se ven obligadas a emplear seis horas diarias para acceder a fuentes de agua¡±.
La crisis tambi¨¦n corta el agua
¡°Muchas familias no tienen acceso a una necesidad vital como es una vivienda digna, pero tampoco al agua, el gas y la luz¡±. Esta frase no se refiere a ning¨²n pa¨ªs en desarrollo, sino a Espa?a. La Alian?a contra la Pobresa Energ¨¨tica, que agrupa a diversos colectivos sociales de Catalu?a, hac¨ªa esta afirmaci¨®n recientemente en la presentaci¨®n de un modelo de moci¨®n municipal a aprobar por los Ayuntamientos para garantizar el suministro del agua, entre otros servicios, a personas que no pueden pagarlo.
Seg¨²n la Asociaci¨®n Espa?ola de Operadores P¨²blicos de Abastecimiento y Saneamiento (Aeopas), actualmente se tramitan 500.000 avisos de cortes de suministro de agua anuales por impago, un 30% m¨¢s que hace cuatro a?os. De ellos, se ejecutaron 300.000. La Organizaci¨®n de Consumidores y Usuarios (OCU) calcula que en un 20% de los hogares espa?oles existen dificultades para pagar los recibos del agua.
Disponibilidad de m¨ªnimos de agua potable, condonaci¨®n de las deudas y que como principio de precauci¨®n no se produzca ning¨²n corte sin poder demostrar que en el hogar hay capacidad econ¨®mica para hacer frente al recibo b¨¢sico es lo que exigen desde la Alian?a contra la Pobresa Energ¨¨tica. Fernando Morcillo, director de la Asociaci¨®n Espa?ola de Abastecimiento de Aguas y Saneamiento (AEAS), que agrupa a los principales operadores, afirma no haber detectado tantas incidencias como se denuncian: ¡°En cualquier caso, los servicios de aguas cuentan con elementos de acci¨®n social para tratar estos temas mediante la reducci¨®n de la cuota, y existe un procedimiento reglado con advertencias y plazos de regularizaci¨®n antes de llegar a un corte que decide siempre la Administraci¨®n local, no el operador¡±.
Para demandar y asegurar el suministro de agua y el saneamiento como servicios p¨²blicos esenciales para todas las personas se present¨® a mediados de febrero en el Parlamento Europeo una iniciativa ciudadana, Right2Water, respaldada por 1.900.000 firmas.
Hace unos d¨ªas, la Comisi¨®n Europea respondi¨® a la iniciativa publicando una comunicaci¨®n en la que se compromete a implantar una serie de medidas e invita a los Estados miembros a que ¡°redoblen sus esfuerzos para garantizar el suministro universal de agua sana, limpia y asequible¡±.
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