Tres preguntas sobre la reforma sanitaria

Pregunta. ?Cu¨¢l es su balance de la reforma sanitaria?

Respuesta. Tremendamente negativo. Se ha excluido a cientos de miles de personas de la atenci¨®n sanitaria, y eso no solo les perjudica a ellos sino a toda la comunidad; adem¨¢s, el Gobierno ha acabado tambi¨¦n con el derecho a la sanidad por el hecho de ser espa?ol. Y no podemos obviar que la reforma ha agrandado la brecha entre las comunidades aut¨®nomas. y el Ministerio de Sanidad es incapaz de cohesionar.

Adem¨¢s, desde el punto de vista de la econom¨ªa, la reforma no ha servido para hacer m¨¢s sostenible el sistema. Sigue teniendo d¨¦ficit. En 2012 ese d¨¦ficit fue de 9.000 millones de euros, en 2013, de 7.000¡­ Y mientras tanto, Ana Mato, la peor ministra de la democracia, como ya saben los ciudadanos tal y como se desprende de sus respuestas en las encuestas, est¨¢ escondida. No da la cara. Tiene pendientes 30 preguntas parlamentarias y solo ha ido a la Comisi¨®n de Sanidad del Congreso dos veces¡­

Pregunta. ?Cu¨¢l es su balance de la reforma sanitaria?

Respuesta. Es m¨¢s bien una contrarreforma, que adem¨¢s ha convertido al Ministerio de Sanidad en una delegaci¨®n del Ministerio de Hacienda. Su ¨²nica estrategia ha sido recortes, copagos y privatizaciones, y el resultado es un deterioro del sistema nacional de salud, como muestran los indicadores del propio sistema --con el aumento de las listas de espera, los recortes de personal--, que perciben los ciudadanos, tal y como revelan las encuestas. Ha creado, adem¨¢s, un desbarajuste organizativo por la pol¨ªtica de los colectivos excluidos. Una pol¨ªtica que adem¨¢s de perjudicar a este grupo, ha dejado al resto en una situaci¨®n de inseguridad.

El balance, en definitiva, es catastr¨®fico. La contrarreforma solo se aguanta porque tenemos un sistema con una dimensi¨®n y un nivel de compromiso muy importante. No han conseguido demoler el sistema, pero va a ser una tarea de titanes recomponerlo. Le han abierto v¨ªas de agua muy importantes a este transatl¨¢ntico.

P. ?Est¨¢ teniendo efectos?

R. Hemos comprobado ya consecuencias del copago farmac¨¦utico. Sabemos que se ha producido un efecto disuasorio en la retirada de los f¨¢rmacos en los enfermos cr¨®nicos, en los ancianos¡­ Las sociedades cient¨ªficas ya han alertado del impacto de esta medida en enfermos de c¨¢ncer, de hepatitis C o en personas con VIH, por ejemplo. Ahora tienen la barrera de la enfermedad y una barrera econ¨®mica cada vez m¨¢s importante. La contrarreforma tambi¨¦n est¨¢ teniendo un efecto muy negativo sobre las personas en situaci¨®n irregular, sobre todo en aquellos con enfermedades infecciosas.

Y no podemos olvidar los recortes. Entre 40.000 y 50.000 profesionales han salido del sistema sanitario p¨²blico, eso es un 10% del personal. Y las listas de espera, aunque tenemos datos muy parciales, han subido entre un 50% y un 40% en algunas comunidades. Eso demuestra que la afectaci¨®n del sistema ha sido grave. No estamos en la UCI, pero estamos en planta.

P. ?Habr¨¢ nuevas medidas?

R. El real decreto es una bomba de fragmentaci¨®n, tiene efectos a corto plazo, pero se va desarrollando con m¨¢s fuerza. Y si a eso le unimos que Hacienda y la UE han aflojado solo por razones electorales, la perspectiva no es buena. Tambi¨¦n es muy peligrosa la revisi¨®n de la cartera de servicios que est¨¢ haciendo el ministerio. Es muy peligroso hacer por ley algo tan m¨®vil, que deber¨ªa estar pendiente de innovaciones¡­ Y en la misma l¨ªnea estamos viendo tambi¨¦n un problema enorme en el retraso de la entrada en la financiaci¨®n de los f¨¢rmacos innovadores.

El Gobierno va a continuar profundizando en las pol¨ªticas que se ha visto obligado a retrasar o a paralizar. Pero continuar¨¢. Aunque si hubiera un m¨ªnimo de sensibilidad de cara al Pacto de Estado por la sanidad, que estamos debatiendo ahora, deber¨ªa aprovechar el auto del Tribunal Constitucional sobre el recurso de Navarra, en el que avala la atenci¨®n a los extranjeros en situaci¨®n irregular, para devolverles el derecho a la sanidad. El Constitucional ya lo dice: no se puede anteponer el criterio de ajuste al derecho a la salud y a los derechos humanos; un ajuste, adem¨¢s, que est¨¢ en duda.

Pregunta. ?Cu¨¢l es su balance de la reforma sanitaria?

Respuesta. El balance no puede ser positivo.Hay un antes y un despu¨¦s de este decreto, que cambi¨® totalmente nuestro sistema sanitario. Ha pasado de ser de una concepci¨®n universal a una concepci¨®n de aseguramiento. Nosotros pedimos en el Congreso que se hiciera a trav¨¦s de un proyecto de ley, para que pudiera debatirse y pactarse, y el Gobierno se neg¨® alegando la urgencia. Una urgencia que luego hemos visto que no era tal,? porque a la hora de la verdad muchas medidas que se han demostrado equivocadas no se han puesto en marcha, como los copagos por el transporte sanitario no urgente, los dietoter¨¢picos o los f¨¢rmacos de dispensaci¨®n ambulatoria¡­?

En la pr¨®xima Comisi¨®n de Sanidad del Congreso se votar¨¢n las conclusiones de lo que podr¨ªa ser un pacto por la sanidad de los grupos pol¨ªticos, y el principal escollo que hay, donde no nos ponemos de acuerdo por la postura del Partido Popular, es en la universalidad de la sanidad. Nosotros defendemos que es un derecho de la ciudadan¨ªa; ellos la ven como un aseguramiento.

P. ?Est¨¢ teniendo efectos?

R. La reforma es un paso hacia atr¨¢s important¨ªsimo. Est¨¢ impidiendo que algunas personas tomen su medicaci¨®n correctamente por problemas econ¨®micos. Eso deber¨ªa estudiarse a fondo. Los copagos, y m¨¢s en estos momentos tan complicados, pueden generar muchos problemas. Tambi¨¦n hay problemas en el acceso a los f¨¢rmacos innovadores, cuya entrada en el sistema de los f¨¢rmacos financiados se est¨¢ retrasando mucho.

La reforma se emprendi¨® te¨®ricamente para ahorrar, pero no se ha ahorrado, lo que se ha hecho es obligar al ciudadano a pagar m¨¢s. Me parece bien que los ciudadanos paguen por los f¨¢rmacos de manera modulada en funci¨®n de la renta, pero lo que no puede ser es el tipo de copago que se ha hecho. Los tramos son injustos y deber¨ªa haber un tope mensual para no penalizar m¨¢s a los m¨¢s enfermos. La ministra Ana Mato no dice la verdad cuando dice que los discapacitados est¨¢n dispensados del copago por los f¨¢rmacos. Los ¨²nicos que no pagan son los grandes discapacitados. El resto tiene que pagar exactamente igual que los activos, a pesar de que el coste econ¨®mico de su vida diaria es mucho m¨¢s alto. Aqu¨ª no hay compensaci¨®n, y sin un tope mensual muchas de estas personas no pueden tratarse como deber¨ªan.

P. ?Habr¨¢ nuevas medidas?

R. El coste social de la reforma puede ser grande. Y mucho me temo que habr¨¢ m¨¢s medidas, sobre todo en el campo de la industria farmac¨¦utica. Medidas sin avisar, de la noche a la ma?ana. Y nos preocupa mucho c¨®mo va la marcha de las pol¨ªticas emprendidas por el Gobierno. Est¨¢n intentando tambi¨¦n recentralizar y tomar medidas por cosas que no son competencia suya, como temas de profesionales, de organizaci¨®n de servicios¡­