Los autobuses del futuro
Los avances tecnol¨®gicos en el sector prev¨¦n coches m¨¢s ecol¨®gicos, c¨®modos y seguros a medio y largo plazo
Cuando pensamos en planes de movilidad, el autob¨²s suele ser el pariente pobre por detr¨¢s de otros modos de transporte como el tren, el metro o el tranv¨ªa. Pero es el medio de transporte p¨²blico por excelencia en muchos pa¨ªses y ciudades del mundo: en 2011, un 8,8% de los viajes por tierra realizados en Europa fueron en autob¨²s, frente al 7,1% del tren, seg¨²n Eurostat, la oficina estad¨ªstica de la UE.??Varios factores contribuyen a esa fama de transporte poco pr¨¢ctico y poco sostenible. Los autobuses, en la mayor¨ªa de los casos, comparten tr¨¢fico con el resto de veh¨ªculos¡ªlo que reduce su velocidad y los hace poco pr¨¢cticos. Adem¨¢s, muchos ¨®mnibuses a¨²n circulan con ruidosos y contaminantes motores di¨¦sel.
Pero esa mala reputaci¨®n est¨¢ cambiando. Varios proyectos patrocinados por la Comisi¨®n Europea, como 3iBS (abreviatura inglesa de Sistema de Autobuses Inteligente, Innovador e Integrado) o el Sistema de Autobuses Europeo del Futuro, empiezan a esbozar c¨®mo ser¨¢n los autobuses de los pr¨®ximos 20 a?os. Nuevos motores, m¨¢s eficientes y menos contaminantes, permitir¨¢n reducir el impacto ambiental del transporte p¨²blico por carretera.
La nueva generaci¨®n de motores di¨¦sel, dise?ados bajo las restrictivas normativas comunitarias Euro VI, debe emitir hoy un 28% menos de mon¨®xido de carbono y un 92% menos de ¨®xidos de nitr¨®geno que los motores de hace 15 a?os. ¡°Las nuevas normas han supuesto un gran cambio¡±, afirma Umberto Guida, director de proyectos europeos de la Uni¨®n Internacional de Transporte P¨²blico (UITP). ¡°Regulan por primera vez las emisiones de gases que antes no se consideraban¡±.
Los fabricantes ponen sus miras en nuevos combustibles y formas de producci¨®n
Pero esta clase de tecnolog¨ªa tiene sus l¨ªmites. ¡°Desarrollar esta clase de motores ha costado tanto dinero y esfuerzo¡±, sigue contando Guida, ¡°que los fabricantes est¨¢n poniendo sus miras en otros combustibles y formas de propulsi¨®n¡±. La principal traba es el coste. ¡°Hay que tener en cuenta que los autobuses son una inversi¨®n considerable y el mercado no es muy grande¡±, se?ala Guida. ¡°Por ahora, cada fabricante tira por su lado¡±, confirma Rafael Barbadillo, presidente de Asintra, la patronal espa?ola de las empresas de transporte por carretera. ¡°Algunos apuestan por los autobuses a gas natural, otros por los de gas licuado, otros por los h¨ªbridos...¡±
A¨²n es pronto para saber cu¨¢ntas emisiones pueden reducirse usando estas nuevas tecnolog¨ªas. Los expertos s¨ª est¨¢n de acuerdo en una cosa: queda mucho para el autob¨²s 100% el¨¦ctrico, sin emisiones in situ. ¡°No le veo futuro de momento¡±, reconoce Roc¨ªo Cascajo, investigadora del Centro de Investigaci¨®n del Transporte en la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid. El problema es el mismo que el del coche 100% el¨¦ctrico: el coste y la escasa autonom¨ªa de las bater¨ªas. ¡°En un autob¨²s normal, de 12 metros de largo, solo con el espacio que ocupan las bater¨ªas deber¨ªamos renunciar a entre 30 y 50 pasajeros por viaje¡±, apunta Guida.
Aunque estos sistemas son menos contaminantes y m¨¢s eficientes energ¨¦ticamente, ¡°la propulsi¨®n no hace un buen servicio¡±, en palabras de Guida. Las tecnolog¨ªas que m¨¢s interesan al pasajero son las que hacen que su trayecto en autob¨²s sea m¨¢s r¨¢pido y confortable. Gran parte de las iniciativas de la Comisi¨®n Europea han servido para poner a prueba equipos que mejoran la calidad del viaje.
¡°Se han probado autobuses m¨¢s grandes y m¨¢s largos¡±, enumera Cascajo. ¡°Los nuevos dise?os tienen puertas m¨¢s grandes, que es algo que no parece importante, pero s¨ª lo es: si la gente puede entrar m¨¢s r¨¢pido el autob¨²s est¨¢ menos tiempo en la parada¡±. Otras innovaciones son la instalaci¨®n de enchufes para cargar dispositivos m¨®viles, luces que se adaptan al ambiente, y otras que se?alan qu¨¦ asientos est¨¢n vac¨ªos. Esta iluminaci¨®n utiliza bombillas LED, de bajo consumo, parte de unos nuevos sistemas el¨¦ctricos que procuran gastar menos energ¨ªa, especialmente en el aire acondicionado. ¡°La investigaci¨®n sobre c¨®mo gestionar mejor la energ¨ªa es una de las m¨¢s interesantes¡±, apunta Guida.
Las tecnolog¨ªas que interesan a los pasajeros son aquellas que le permiten llevar un viaje r¨¢pido y confortable
Adem¨¢s, se han probado equipamientos que facilitan la planificaci¨®n del viaje. ¡°En Majadahonda [una localidad a 17 kil¨®metros de Madrid] se instal¨® un sistema que permit¨ªa al viajero no solo ver a qu¨¦ hora llega el autob¨²s, sino tambi¨¦n si hay un atasco de tr¨¢fico en la carretera a Madrid o si el tren de cercan¨ªas [la estaci¨®n est¨¢ a cerca de tres kil¨®metros del centro de la poblaci¨®n] tiene retraso¡±, cuenta Cascajo.
Una parte esencial del confort y la seguridad del viaje depende del ch¨®fer. ¡°Los motores el¨¦ctricos, que aceleran muy r¨¢pido, obligan a conducir de forma menos agresiva¡±, se?ala Guida. ¡°Adem¨¢s, llevar el veh¨ªculo de forma m¨¢s gradual permite ahorrar combustible y reducir emisiones¡±. Pero, para auxiliar al conductor, los nuevos autobuses llevan ¡°dispositivos que vigilan la forma de conducci¨®n¡±, como apunta Jos¨¦ Mar¨ªa L¨®pez, del Instituto Universitario de la Investigaci¨®n del Autom¨®vil. ¡°Algunos de ellos ya se han puesto en marcha en algunos turismos. Supervisan la somnolencia o las distracciones del conductor, o avisan en caso de cambio involuntario de carril¡±.
Pero por m¨¢s innovador que sea el autob¨²s, es necesario integrarlo en el sistema de transportes para que sea eficaz. "La clave es la velocidad comercial, es decir, lo que tarda en recorrer la l¨ªnea que sirve", indica Guida. "Hay una relaci¨®n lineal: si se aumenta la velocidad comercial un 20%, las emisiones se reducen en ese mismo 20%". Y defiende los carriles exclusivos para autobuses. "Separar?el autob¨²s del resto del tr¨¢fico es fundamental".?
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