10.000 suicidios m¨¢s en Europa, Canad¨¢ y Estados Unidos por la crisis

De no haberse producido el estallido de la crisis y sus consecuencias en forma de p¨¦rdida de empleo, dificultades para llegar a fin de mes o aumento de problemas de salud mental (depresi¨®n, ansiedad), el n¨²mero de suicidios registrados entre los a?os 2008, 2009 y 2010 en Europa, Estados Unidos y Canad¨¢ ser¨ªa, al menos, inferior en 10.000 casos.

Esta es la conclusi¨®n de un trabajo que se publica este jueves en el British Medical Journal. El estudio, elaborado por investigadores de la Universidad de Oxford y la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, arranca del an¨¢lisis de los datos previos a la crisis (1999-2007), a partir de los cuales dibuja una tendencia descendiente, y compara esta inercia con los registros de suicidio de 2008, 2009 y 2010, todos ellos en aumento. La conclusi¨®n que extrae es que los datos ¡°se han incrementado notablemente¡±.

En los 24 pa¨ªses europeos analizados, la ca¨ªda de suicidios se corrigi¨® en 2007, el a?o cero de la gran recesi¨®n, hasta aumentar un 6,5% en 2009, una tasa que se ha mantenido en 2011. En Canad¨¢ los casos se incrementaron un 4,5% entre 2007 y 2010. Durante el mismo periodo de tiempo, los datos aumentaron un 4,8% en Estados Unidos. La conversi¨®n de estas tasas a casos de ¡°suicidios econ¨®micos¡±, como los definen los autores del trabajo arroja la cifra de m¨¢s de 10.000 y corresponde a una estimaci¨®n ¡°conservadora¡±, a?aden. En todo caso, el aumento de suicidios es ¡°sustancialmente mayor de lo que cabr¨ªa esperar¡±.

El trabajo advierte de que hay sensibles diferencias entre pa¨ªses. Austria, Suecia y (algo menos) Finlandia son algunos de los estados donde el incremento ha sido m¨¢s contenido. De esta observaci¨®n los autores extraen una conclusi¨®n: all¨ª donde las autoridades invierten en pol¨ªticas preventivas se mitiga el riesgo de suicidio. Y ello se puede conseguir tanto mediante estrategias estrictamente sanitarias, como la prescripci¨®n de antidepresivos o la potenciaci¨®n de la atenci¨®n en salud mental, como con medidas laborales, como las pol¨ªticas activas de empleo.

De hecho, este es, seg¨²n uno de los autores del trabajo, David Stuckler, la principal aportaci¨®n del art¨ªculo. "El aspecto m¨¢s importante es la conclusi¨®n de que los suicidios no son inevitables", comenta a EL PA?S a trav¨¦s de correo electr¨®nico. "Hemos visto que se pueden prevenir si los pol¨ªticos dan los pasos adecuados en la protecci¨®n de los grupos m¨¢s vulnerables".?

La comunidad cient¨ªfica no es coincidente a la hora de establecer una relaci¨®n entre crisis y suicidios en Espa?a

El art¨ªculo apuesta claramente por la relaci¨®n entre crisis econ¨®mica y suicidio. Incluso en Espa?a, como apunta Stuckler, "en consonancia con su profunda recesi¨®n y las medidas de austeridad adoptadas". Esta conexi¨®n que no es totalmente compartida por toda la comunidad cient¨ªfica, al menos, en lo que se refiere a la actual depresi¨®n y el caso de Espa?a.

Los ¨²ltimos datos del Instituto Nacional de Estad¨ªstica apuntan que los suicidios aumentaron en 2012 un 11% respecto al a?o anterior. Sin embargo, hay especialistas que no consideran que se trate de datos alarmantes ni que se pueda establecer una relaci¨®n directa con la crisis. Para ello aluden a que la tasa est¨¢ en 7,5 por 100.000 habitantes, similar a la de 2008 y notablemente inferior a los 8,5 casos del a?o 2000, con una situaci¨®n econ¨®mica en clara expansi¨®n.

Marta Miret, del Centro de Investigaci¨®n Biom¨¦dica en Red de Salud Mental, se encuentra entre quienes creen que, de momento, no se puede afirmar que el aumento de suicidios en Espa?a -"las diferencias no son significativas"- se deba a la crisis.

Miret y Jos¨¦ Luis Ayuso-Mateos, ambos del departamento de Psiquiatr¨ªa de la Universidad Aut¨®noma de Madrid, son autores de un trabajo que compara las actitudes tanto de ideas como de intentos de suicidio antes y durante la crisis. Los datos se han obtenido al comparar encuestas realizadas entre 2011 y 2012, y entre 2001 y 2002. Las respuestas m¨¢s recientes indican que el 3,6% de la poblaci¨®n hab¨ªa pensado en quitarse la vida y el 1,4% hab¨ªa intentado suicidarse en alg¨²n momento de su existencia, unas cifras muy similares a las obtenidas hace 10 a?os, que no recogen un cambio de tendencia apreciable y avalar¨ªan la tesis de que la crisis no ha tenido un papel determinante.

Cuesti¨®n distinta es la repercusi¨®n que pueden tener los recortes en el sistema de salud. "No negamos que los suicidios son un problema y que se tengan que tomar medidas preventivas", indica. "Si se reducen las prestaciones y no se trata adecuadamente a los pacientes con depresi¨®n podemos encontrarnos con un problema en el futuro".?