La ONU trata de definir la agenda contra el cambio clim¨¢tico
Los compromisos que anuncien los pa¨ªses en la Cumbre del Clima servir¨¢n de base para la negociaci¨®n del futuro Tratado
Naciones Unidas celebra una cumbre especial para volver a colocar la lucha contra el cambio clim¨¢tico sobre los carriles, presionada por la opini¨®n p¨²blica y por las nuevas evidencias cient¨ªficas. La ret¨®rica habitual de los l¨ªderes mundiales sobre las consecuencias de la inacci¨®n ha venido acompa?ada esta vez de iniciativas espec¨ªficas para reducir los gases de efecto invernadero y financiar proyectos verdes. Compromisos que ahora deber¨ªan plasmarse jur¨ªdicamente en un Tratado que se espera adoptar en Par¨ªs en 2015.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, afirm¨® ante los 126 jefes de Estado y de Gobierno reunidos en Nueva York, que ¡°no estamos aqu¨ª para hablar¡±. El cambio clim¨¢tico, se?al¨®, ¡°amenaza la paz, la prosperidad y los sue?os de miles de millones de personas¡±. Por eso, el surcoreano pidi¨® a los miembros una visi¨®n clara para conseguir que al final del siglo no se emita m¨¢s de lo que la naturaleza puede absorber.
Al Gore, una de las voces m¨¢s influyentes de la lucha contra el calentamiento, record¨® en la ceremonia de apertura de la Cumbre del Clima que ¡°solo un grado¡± marca la diferencia entre el hielo y el agua, para dar dimensi¨®n al problema y al reto de limitar la elevaci¨®n de la temperatura global. El exvicepresidente de EE UU dijo: ¡°Hemos entrado en un periodo de consecuencias¡±. ¡°Vivimos en el mundo que hemos creado¡±.
Leonardo DiCaprio, nuevo mensajero de la ONU contra el cambio clim¨¢tico, dijo que el calentamiento global se ha visto hasta ahora como una ficci¨®n. ¡°Sabemos que no lo es. Nada es ret¨®rica o histeria¡±, insisti¨® ante los l¨ªderes mundiales a los que adviriti¨® de que est¨¢ en sus manos hacer historia salvando al planeta o ser vilipendiados si fracasan.
¡°Como actor, finjo para vivir. Vosotros no¡±, concluy¨® en su emotiva y directa alocuci¨®n. El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, como representante de la ciudad anfitriona, dijo que todos saben que ¡°la humanidad afronta una amenaza a su existencia¡±. Es un reto para todos, nadie se libra¡±. Para la ciudad de los rascacielos ¡°es particularmente urgente¡±, defendi¨®.
Camino a Par¨ªs
La cumbre convocada por Ban, sin embargo, no se pens¨® en principio para negociar y el proceso que debe llevar a la firma de un nuevo tratado internacional se sigue viendo entorpecido por las diferencias sobre qui¨¦n tiene que pagar que mantienen los pa¨ªses desarrollados y los emergentes? El objetivo era servir m¨¢s bien de catalizador de cara a los pr¨®ximos 15 meses de discusiones. "Tenemos que acelerar el paso para proteger nuestra casa com¨²n", dijo el presidente de M¨¦xico, Enrique Pe?a Nieto.
La cumbre de Copenhague hace cinco a?os fue una gran decepci¨®n y, como dijo el primer ministro franc¨¦s Francois Hollande, hay que evitar que se repita. Los pa¨ªses fueron incapaces entonces de llegar a un acuerdo para limitar las emisiones de gases de efecto invernadero. Solo un grupo peque?o decidi¨® ir por su cuenta, tras casi dos semanas de discusiones.
La pr¨®xima cita ser¨¢ el pr¨®ximo diciembre en Lima (Per¨²), donde se deber¨ªan sentar las bases de la negociaci¨®n para poder cerrar un nuevo tratado en la cumbre prevista para finales de 2015 en Par¨ªs. Hollande dijo que la convenci¨®n internacional convertir¨¢ en actos jur¨ªdicos los compromisos que se adopten hasta entonces. El futuro acuerdo deber¨ªa entrar en vigor en 2020.
Esta vez, a diferencia de Copenhague, desde la ONU se pretende afrontar el proceso con estrategia y t¨¢cticas diferentes, para evitar un fiasco similar. La cumbre convocada por Ban Ki-moon establecer¨¢ as¨ª ¡°una agenda de soluciones¡± que marque el camino hacia Par¨ªs, cuyos compromisos anunciados se puedan integrar en el texto final. Un tratado que la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff , dijo debe ser ¡°vinculante y universal¡±.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha asegurado por su parte que "no hay conflicto entre un ambiente sano y un crecimiento robusto". Adem¨¢s, ha dicho que las grandes econom¨ªas como la de EE UU y China tienen la responsabilidad de liderar este proceso, porque "ninguna naci¨®n puede afrontar este reto por si sola". Obama se declar¨® a favor de llegar un acuerdo "ambicioso, inclusivo y flexible", aunque un texto vinculando podr¨ªa crearle problemas con el Congreso.
Juan Manuel Santos, presidente de Colombia, tambi¨¦n advirti¨® de que si no se alcanza en Par¨ªs la meta de limitar la temperatura, "los cambios ser¨¢n catastr¨®ficos". Por eso pidi¨® un acuerdo "aplicable para todos". En este sentido, se mostr¨® partidario de aplicar un precio al carbono que desincetive las emisiones, asunto que se abordar¨¢ en el almuerzo de los l¨ªderes. La chilena Michelle Bachelet pidi¨® que los principios de "igualdad y justicia" social se integren en el futuro marco legal.
Iniciativas
La cumbre de Nueva York sirvi¨®, adem¨¢s, para poner en evidencia que la lucha contra el calentamiento del planeta no la lideran los gobiernos, sino las empresas, las comunidades, las ciudades y las regiones. Se cre¨®, por ejemplo, lo que se ha bautizado como el Compact of Mayors, un grupo integrado por cerca de 200 ciudades mundiales que voluntariamente se comprometen de forma colectiva a reducir las emisiones por un valor equivalente al 50% del uso de carb¨®n en todo el mundo.
Tambi¨¦n ha nacido una alianza similar en el sector del transporte, con el objetivo de desarrollar tecnolog¨ªas que permitan aumentar la flota de veh¨ªculos el¨¦ctricos o para aumentar la eficiencia energ¨¦tica del ferrocarril y la aviaci¨®n. Si se mantiene la situaci¨®n actual, las emisiones de este sector crecer¨¢n un 50% para 2030 y un 80% para 2020 frente a los niveles de 2009.
Las multinacionales del sector energ¨¦tico tambi¨¦n participaron en la cumbre, porque se considera que los contaminantes tambi¨¦n deben ser parte de la soluci¨®n. En concreto, compa?¨ªas como la italiana ENI, la mexicana Pemex o la noruega Statoil sumaron fuerzas con los gobiernos para reducir las emisiones de metano derivadas de su actividad productiva.
Los pa¨ªses siguen jugando, sin embargo, un papel clave en el proceso para que haya una acci¨®n concertada que permita acelerar el abandono de la econom¨ªa f¨®sil. Los activistas de Greenpeace, WWF o Sierra Club insisten en que el fin de la recesi¨®n econ¨®mica, el avance tecnol¨®gico y las evidencias cient¨ªficas no dan margen para seguir bloqueados en este atolladero y por eso urgen a que act¨²en con decisi¨®n y de forma colectiva. ¡°Aqu¨ª no hay opciones¡±, como dijo Gore. "Los seres humanos somos la causa pero tambi¨¦n debemos ser la soluci¨®n", a?adi¨® Nieto.
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