Las huidas del padre de Nadia

El proceso judicial contra Fernando Blanco es tambi¨¦n el relato de una huida hacia adelante. O de varias. Pese a las evidencias en su contra ¡ªen el juicio ha quedado acreditado que no ten¨ªa pasaporte¡ª, el acusado insiste en que llev¨® a su hija Nadia Nerea al extranjero para someterla a diversas operaciones. En esas intervenciones, insiste, se gast¨® la mayor parte del dinero que cientos de personas aportaron voluntariamente para la ni?a Nadia, afectada por una enfermedad rara llamada ticotiodistrofia. Los m¨¦dicos han dicho que la vida de la peque?a no corr¨ªa peligro, pero ¨¦l insiste en que s¨ª, y en que en ¡°dos o tres a?os¡± se ver¨¢.

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Blanco se sienta en el banquillo de los acusados de la Audiencia de Lleida desde el martes. Vestido con traje impecable y con un pendiente en su oreja izquierda, escucha con atenci¨®n y toma notas en una libreta. De vez en cuando, cuando oye algo que no le gusta, niega con la cabeza. A las preguntas del fiscal se mostr¨® entre indignado y desafiante. ¡°?Me lo pregunta o lo afirma?¡±, le ret¨®. Siempre adelante, el presunto estafador de 1,1 millones de euros se mantuvo en sus trece pese a incurrir en evidentes contradicciones.

En un momento del duro interrogatorio, el fiscal le pregunt¨® por unas manifestaciones suyas de hace bastantes a?os en las que afirmaba que sufr¨ªa un c¨¢ncer de p¨¢ncreas terminal. Blanco agreg¨® que prefer¨ªa no tratarse para dedicar todos los recursos posibles a la ni?a. En el juicio, sin embargo, asegur¨® que jam¨¢s hab¨ªa pronunciado tales palabras, aunque s¨ª matiz¨® que le hab¨ªan detectado ¡°tres tumores junto al h¨ªgado¡± y que tuvo la fortuna de que ¡°resultaron ser benignos¡±.

La huida de Blanco es, en algunos casos, literal. Despu¨¦s de que EL PA?S destapara las contradicciones de su historia a finales de 2016, y ante la posibilidad de ser investigado, huy¨® a Francia. Lo hizo, de hecho, cuando los Mossos ya andaban tras ¨¦l. Pero el acusado, que afronta una petici¨®n de seis a?os de c¨¢rcel, tiene explicaciones para todo. Afirm¨® que s¨ª, que se march¨® a Toulouse, pero solo para intentar probar que su historia era cierta. ¡°Intent¨¦ hablar con la gente de Toulouse que sabe lo que se le hace a Nadia, sea o no legal el tratamiento, para que vieran que lo que contaba era as¨ª¡±.

Blanco regres¨® finalmente a Espa?a y las conversaciones telef¨®nicas revelaron que estaba intentando dar esquinazo a la polic¨ªa. ?l, en cambio, dijo que a quienes quer¨ªa evitar no era a los polic¨ªas, sino a los medios de comunicaci¨®n, que hab¨ªan empezado una ¡°cacer¨ªa¡±. ¡°Empezaron las amenazas de muerte, hasta a mi hija la amenazaron¡±. Para los Mossos, es una m¨¢s de las artima?as de Blanco. Un sargento que lider¨® la investigaci¨®n del caso Nadia explic¨® despu¨¦s que los Mossos montaron controles cerca de la frontera porque sab¨ªan que hab¨ªa huido. Se instalaron en la carretera nacional que une Francia con Puigcerd¨¤. ¡°Sab¨ªamos que estaba por la zona, porque pod¨ªamos seguirle. Pero nunca lo vimos en los controles porque iba todo el tiempo por caminos de tierra y carreteras secundarias. La actitud evasiva era total¡±. Fue su ¨²ltima huida porque, despu¨¦s de eso, fue detenido e ingresado en prisi¨®n provisional, donde permanece desde entonces.