Luis Fern¨¢ndez-Vega: ¡°Operar¨ªa de miop¨ªa a algunos pol¨ªticos¡±
El emintente cirujano ocular y presidente de la Fundaci¨®n Princesa de Asturias no se opera de miop¨ªa porque ve muy bien de cerca y prefiere operar sin gafas
Estas entrevistas se hacen rostro a rostro, pero, por una vez, se realiza por videoconferencia por una doble causa. Incompatibilidad de agendas y facilidades t¨¦cnicas. Al mostrar mi reparo porque el personaje se me vaya vivo, me aseguran que podr¨¦ verle hasta el fondo del ojo, dado que usan este sistema para ver las c¨®rneas de los pacientes a distancia y contrastar opiniones al respecto. As¨ª que, por una vez, el entrevistado est¨¢ en su campo, en su cl¨ªnica oftalmol¨®gica de Oviedo, y la entrevistadora en la de Madrid, mirando un plasma. Ciertamente, se le ve todo al doctor en la pantalla. Fuera, en la sala de espera, aguardan decenas de personas que entrar¨¢n en quir¨®fano sin ver los ¨¢rboles, o el bosque y saldr¨¢n viendo la flora y fauna al completo.
?Los ojos son espejo del alma?
M¨¢s bien la ventana. Los griegos dec¨ªan que desvelar era encontrar la verdad. Si quitas una catarata, est¨¢s desvelando, rasgando la opacidad. Los ojos ense?an el interior de las personas.
En los 80 Golpes Bajos cantaban ¡°no mires a los ojos de la gente, dan miedo, siempre mienten¡±.
Los ojos no mienten. Se nota la mentira, la perspicacia, el amor, el humor, las emociones. Es al rev¨¦s, cuando alguien no mira a los ojos, es cuando oculta algo. Tengo deformaci¨®n profesional, y cuando miro a los ojos, analizo lo que ese alguien lleva dentro.
?Se puede diagnosticar a ojo?
En clase cuento siempre el caso de una mujer que ven¨ªa a consulta cada a?o, tuvo un ni?o y presum¨ªa de lo bonitos y grandes que ten¨ªa los ojos. Lo v¨ª, y ten¨ªa era un glaucoma cong¨¦nito: por eso ten¨ªa los ojos grandes. S¨ª, por la calle un oftalm¨®logo puede ver que alguien tiene algo en los ojos.
Dr. Sinest¨¦sico.
¡°Luz es un nombre verde, as¨ª que te veo verde, pero no pardo, sino clarito¡±. Luis Fern¨¢ndez Vega (Oviedo, 1952) presume de padecer, o gozar, de sinestesia -asociar colores a conceptos- hasta el punto de incluir el dato en su curr¨ªculo. ¡°Tambi¨¦n le pasaba a Einstein¡±, dice el eminente oftalm¨®lgo y flamante presidente de la Fundaci¨®n Princesa de Asturias. Cien mil pacientes al a?o mejoran su vista en sus cl¨ªnicas de Oviedo y Madrid.
Biznieto, nieto, hijo, padre, t¨ªo de oculistas. ?Qu¨¦ se mama en su casa para ser todos del gremio?
Igual vemos desde ni?os que es una profesi¨®n que nos hace felices y hace feliz a la gente. Mis hijos crecieron viendo v¨ªdeos de cirug¨ªa cuando llegaban del cole. Resolver los problemas de visi¨®n de los dem¨¢s es muy gratificante.
De su quir¨®fano salen casi ciegos viendo. ?Se siente uno Dios?
Es una especialidad agradecida, pero s¨¦ perfectamente mis posibilidades y mis limitaciones. El otro, en un estadio, lo pensaba. He operado a 30.000 personas, tantas como hab¨ªa en las gradas. Es una satisfacci¨®n, pero no siempre se puede arreglar todo.
?Sufre cuando no se puede?
No somos magos. M¨¢s bien electricistas. La frontera es el nervio ¨®ptico. Es como el cable y la bombilla. El ojo es la bombilla. Podemos casi hacer un trasplante del cristal, reparar el fusible. Pero si el cable est¨¢ roto, de momento, no hay forma de arreglarlo.
'Grosso modo', lo que hacen es rebanar ojos, con perd¨®n.
Bueno, pero rebanamos muy bien y de distintas formas: por la parte de delante, por la de detr¨¢s. Tenemos muchos especialistas, cada uno en una parte del ojo, y tenemos un ¨¦xito superior al 99%.
?El m¨®vil nos come la vista?
Si se usa mucho tiempo y a edades tempranas, los ni?os pueden aumentar la miop¨ªa, al estar todo el santo d¨ªa con las pantallas en vez de estar en la calle o en el campo mirando a lo lejos. S¨ª.
Con lo que se dejan en su cl¨ªnica y en comer y en dormir sus pacientes en Oviedo, es usted un buen porcentaje del PIB astur.
Recibimos a 100.000 pacientes al a?o de Espa?a y de todo el mundo. Creo que tardar¨¦ en jubilarme, pero tengo un equipo buen¨ªsimo, y mis hijos est¨¢n muy bien formados y tomar¨¢n el relevo. Hay Fern¨¢ndez Vega para rato.
Se estrena este a?o como presidente de los Princesa de Asturias. Ya me contar¨¢ su 'momento fan' con Mart¨ªn Scorsese.
Pues s¨ª, estamos todos muy ilusionados. Me gusta mucho su cine. Los premios reconocen el esfuerzo, el talento y la solidaridad de los premiados, y la verdad es que se van todos encantados con Oviedo, Asturias y Espa?a.
?No es m¨¢s cierto que les ponen ciegos a cabrales, sidra y gaiteros y se quedan entregaditos?
Jaja. Los gaiteros, el Asturias patria querida y las fabes ponen la emoci¨®n. Para nosotros, pero para los guiris tambi¨¦n. Se quedan impresionados, se derriban muros, y les gusta mucho a todos.
Si no hubiera gafas ni cirug¨ªa, preferir¨ªa no ver de cerca o de lejos. ?Los ¨¢rboles o el bosque?
Ser hiperm¨¦trope limitar¨ªa m¨¢s. Significar¨ªa que, a partir de los 45, no podr¨ªa leer, o ver un cuadro de cerca, o hacer un trabajo fino de manos. Sin embargo, si no tienes mucha miop¨ªa, pues te puedes defender con alguna dificultad, pero lees y ves lo cercano hasta una edad muy avanzada.
?La expresi¨®n ¡°vista cansada¡±, tan po¨¦tica, es exacta?
Los ojos se cansan, s¨ª. El m¨²sculo empieza a agotarse, se endurece y ya no puede amoldarse para ver de cerca. La gente lo suele retrasar, ya no tanto por est¨¦tica, porque es de los primeros signos de envejecimiento. Ves que ya no eres un adolesente.
Paso de los 50 y veo fatal de cerca. Me opero o me espero?
Yo esperar¨ªa. Si ve bien de lejos, espere unos a?os hasta que est¨¦ establecido el defectro refractivo. Si no tiene cataratas, claro. Pero eso suele ser m¨¢s tarde.
O sea, que en 100 a?os, todos con presbicia y cataratas.
Es as¨ª. Cosas de la edad.
Lleva lentes. En casa del cirujano ocular, gafas de pasta. ?No se atreve a operarse?
Ah¨ª lo tienes: soy un miope de dos dioptr¨ªas y de cerca veo fenomenal. Opero sin gafas y no me molesta usarlas para ver de lejos. No me interesa operarme.
?Y c¨®mo ve el panorama?
Pues bien, en general, aunque en algunos asuntos no lo veo tan claro. Operar¨ªa de miop¨ªa a muchos pol¨ªticos. Tienen una visi¨®n demasiado cortoplacista de las cosas, y ah¨ª s¨ª que vienen bien las luces largas.
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