Los Pirineos perder¨¢n la mitad del espesor de nieve en los pr¨®ximos 30 a?os

Las evidencias cient¨ªficas sobre el r¨¢pido incremento del calentamiento global se han convertido en un goteo constante e imparable. La ¨²ltima, un informe elaborado por m¨¢s de 100 expertos durante dos a?os para el Observatorio Pirenaico de Cambio Clim¨¢tico (OPCC). En ¨¦l se desglosan los impactos ya visibles en una cadena monta?osa de tanta relevancia como los Pirineos. Los glaciares se encuentran en v¨ªas de extinci¨®n, algunas aves migratorias han adelantado su llegada 10 d¨ªas y otras especies seguir¨¢n subiendo metros hasta que no les quede m¨¢s espacio, las precipitaciones son cada vez menores, la nieve est¨¢ en retirada y los bosques avanzan.

Los Pirineos, que el OPCC agrupa en una biorregi¨®n, se enfrentan a un incremento de temperatura de 1,2 grados cent¨ªgrados, un 30% mayor que la media mundial, de 0,85 grados, desde 1950. La cifra replica la tendencia de crecimiento que los cient¨ªficos han observado en otras zonas de alta monta?a, m¨¢s afectadas por la emisi¨®n de gases de efecto invernadero que otras partes llanas.

El observatorio pretende que el estudio sirva de base para tomar decisiones que se adelanten a unos cambios que se desarrollan con m¨¢s aceleraci¨®n de la prevista. La subida de temperatura, con medidas entre 1949 y 2010, no se ha producido de una forma regular, sino con altibajos. Hasta los a?os ochenta hubo una tendencia al descenso. A partir de esa fecha, el escenario se invirti¨®, y el mercurio comenz¨® a marcar valores en alza. El a?o m¨¢s c¨¢lido fue 1997 y el m¨¢s fr¨ªo 1972. A este marco se a?ade el descenso en el volumen anual de precipitaciones, un 2,5% por d¨¦cada en los ¨²ltimos 50 a?os, tampoco lineal. Los d¨ªas con heladas han disminuido alrededor de 0,3 d¨ªas por d¨¦cada entre 1985 y 2014.

Es m¨¢s complicado determinar c¨®mo ha evolucionado el manto de nieve desde 1950, porque faltan datos hist¨®ricos, refleja el informe. Pero, a partir de balizas instaladas en la vertiente sur de los Pirineos, ¡°se ha identificado un descenso significativo del manto de nieve¡±. Con semejantes antecedentes, el OPCC considera que para el horizonte 2030, el aumento anual de las temperaturas m¨¢ximas respecto al periodo de referencia 1961-1990 podr¨ªa estar, ¡°en promedio y para toda la zona pirenaica, entre 1?C y 2,7?C". Adem¨¢s, la falta de precipitaciones podr¨ªa disminuir la recarga de los acu¨ªferos un 20% a mediados del siglo y podr¨ªa suponer una reducci¨®n del caudal de muchos manantiales.

Otro de los sufridores silenciosos es la fauna. Hay especies de aves como la perdiz nival, adaptada a los sistemas ¨¢rtico-alpinos, que est¨¢n viendo alterados su estado fisiol¨®gico y abundancia. Por ejemplo, las aves migratorias han adelantado su fecha de llegada, y se han registrado adelantos en los primeros avistamientos de mariposas. Entre los grupos de vertebrados, los anfibios son los m¨¢s vulnerables. ¡°Se han constatado descensos poblacionales considerables entre las poblaciones del trit¨®n pirenaico coincidiendo con los a?os de eventos clim¨¢ticos extremos¡±, concretan los estudiosos

Muchas especies responden al cambio clim¨¢tico desplaz¨¢ndose a zonas m¨¢s altas en busca de las condiciones climatol¨®gicas que se pierden en sus espacios habituales, aunque llegar¨¢ un momento en que queden aisladas aumentando su vulnerabilidad, a?aden. ¡°Se ha estimado que en los ¨²ltimos a?os las especies europeas se han desplazado de media 11 metros por d¨¦cada hacia altitudes superiores¡±, concreta el OPCC. Todo ello, en un escenario donde los bosques suben: en los ¨²ltimos 50 a?os la altura del l¨ªmite del bosque se ha desplazado 35 metros, ¡°algo m¨¢s de medio metro por a?o¡±.

Las actividades como la pr¨¢ctica del esqu¨ª tambi¨¦n est¨¢n afectadas, y se traducir¨ªa, en el caso de que se cumplan las predicciones, en una reducci¨®n del turismo invernal. Como prueba, el OPCC indica que el inicio de la temporada de esqu¨ª se ha ido retrasando entre 5 y 55 d¨ªas en las estaciones que se encuentran m¨¢s bajas y entre 5 y 30 en las cotas medias. Especialmente dram¨¢tica es la situaci¨®n de los glaciares, los m¨¢s meridionales de Europa. Desde 1984 han desaparecido m¨¢s de la mitad de los contabilizados (quedan 19), algunos son tan solo neveros y los que se mantienen han menguado su masa y superficie. Como contrapartida, las temperaturas m¨¢s suaves en oto?o y primavera, podr¨ªan incrementar los visitantes en verano.

En este marco, ¡°es altamente probable¡± que los Pirineos sufran un aumento de los fen¨®menos meteorol¨®gicos extremos. "La evoluci¨®n m¨¢s documentada en este sentido es la de las olas de calor, pero es muy probable que sequ¨ªas, lluvias intensas y olas de fr¨ªo tambi¨¦n aumenten su frecuencia e intensidad. Sin embargo, las granizadas solo lo har¨¢n en intensidad", preconizan los cient¨ªficos.

El OPCC es una iniciativa transfronteriza de cooperaci¨®n territorial en materia de cambio clim¨¢tico de la Comunidad de Trabajo de Pirineos (CTP), lanzada en 2010 bajo la presidencia de Midi-Pyr¨¦n¨¦es. Los miembros de la CTP, y por lo tanto del OPCC, son el Principado de Andorra y los Gobiernos de Nouvelle-Aquitaine, Arag¨®n, Catalunya, Euskadi, Navarra, y Occitanie.