As¨ª se unieron las v¨ªctimas ante la pederastia en Francia
Una pel¨ªcula contar¨¢ pr¨®ximamente la historia de esta organizaci¨®n que ha sentado a un cardenal en el banquillo
¡°Me dec¨ªa mon gar?on, mi ni?o, esto es un secreto, no hay que cont¨¢rselo a nadie. Luego me quitaba el pantal¨®n y me acariciaba¡±. ¡°Me dec¨ªa que le siguiera al ¨²ltimo piso. Cada vez, yo iba d¨®cilmente. Sent¨ªa su respiraci¨®n jadeante. En mi cerebro de ni?o, el interruptor se apagaba. Dur¨® tres a?os¡±. Los testimonios de los tocamientos, felaciones o masturbaciones a los que les someti¨® el cura Bernard Preynat desde finales de los a?os 70 hasta 1990, cuando eran chavales de 10 o 12 a?os que pertenec¨ªan al grupo scout de ese sacerdote, enmudecieron a la abarrotada sala del tribunal de Lyon donde ocho de sus v¨ªctimas declararon en un juicio con el que reclaman responsabilidades a la Iglesia que protegi¨® a ese religioso durante d¨¦cadas. Desde el banquillo de acusados escuchaba, cabizbajo, el cardenal Philippe Barbarin. Es el miembro m¨¢s alto de la jerarqu¨ªa cat¨®lica francesa que ha tenido que? responder por la cultura de silencio que impuso la Iglesia ante la pederastia en su seno. No ha sido f¨¢cil llegar hasta aqu¨ª. Ni siquiera hablar de ello, mucho menos p¨²blicamente. Algunos de los que contaron lo sufrido en manos del cura pederasta callaron durante 30 a?os o m¨¢s. Hasta que naci¨® Palabra Liberada.
¡°Con Palabra Liberada fue la primera vez que habl¨¦ de lo sucedido y, sobre todo, que me di cuenta de que no estaba solo¡±, cuenta Pierre-Emmanuel Germain-Thil, de 40 a?os. Ten¨ªa diez cuando sufri¨® los abusos de Preynat. Call¨® durante m¨¢s de 25. ¡°Sent¨ªa miedo y verg¨¹enza. Pero hablar fue una verdadera liberaci¨®n¡±.
Esa ¡°liberaci¨®n¡± lleg¨® en enero de 2016, cuando su madre le envi¨® dos art¨ªculos sobre la asociaci¨®n que acababa de crear Fran?ois Devaux, otra de las v¨ªctimas del ¡°padre Bernard¡±.
La idea de crear un espacio de encuentro, di¨¢logo y organizaci¨®n de las v¨ªctimas de Preynat ¡ªy de otros curas pederastas¡ª la tuvo Devaux por una llamada de la fiscal¨ªa que investigaba la primera denuncia contra el sacerdote. Entonces supo que la di¨®cesis de Lyon, pese a que en 1991 reconoci¨® ante sus superiores que hab¨ªa abusado de menores a su cargo, permiti¨® al cura seguir trabajando en contacto con ni?os otros 25 a?os. Hasta que una de sus primeras v¨ªctimas, Alexandre Hezez, lo descubri¨® por casualidad y desat¨® el esc¨¢ndalo.
¡°Me sent¨ª tan anonadado ante la falta de discernimiento de la di¨®cesis de Lyon, que no hab¨ªa hecho nada¡±, explica Devaux con una ira a¨²n lejos de apaciguarse. Ah¨ª se dio cuenta de que, m¨¢s all¨¢ de la v¨ªa judicial, ¡°hab¨ªa necesidad de informar¡± a la sociedad para que otros ni?os no sigan expuestos en la Iglesia a depredadores sexuales. Comenz¨® as¨ª una batalla contra el silencio de la Iglesia cuya resonancia no pod¨ªan imaginar cuando apenas un pu?ado de antiguos scouts de Lyon, entre ellos Devaux, Hezez y Germain-Thil, empezaron a organizarse.
La demanda que present¨® Germain-Thil contra Preynat tras contactar con Palabra Liberada es la que llev¨® a la detenci¨®n del sacerdote, que ser¨¢ juzgado este a?o. Luego est¨¢ el muy mediatizado juicio al cardenal Barbarin, que niega haber actuado mal y cuyo fallo se conocer¨¢ en marzo. Independientemente del veredicto, Germain-Thil y Devaux se declaran ya satisfechos. ¡°M¨¢s all¨¢ del proceso en s¨ª, hemos logrado que ciertas instituciones empiecen a interrogarse sobre el silencio de la Iglesia: la familia, los legisladores, la justicia, el gobierno¡±, enumera Devaux, presidente de Palabra Liberada.
El trabajo de la asociaci¨®n ha sido clave, entre otros, para la ampliaci¨®n en diez a?os de la prescripci¨®n de los delitos sexuales contra menores aprobada el verano pasado. Tambi¨¦n para la decisi¨®n de la Conferencia Episcopal de crear una comisi¨®n independiente que deber¨¢ analizar todos los casos de pederastia en la Iglesia francesa desde 1950.
Devaux est¨¢ convencido de que la estrategia de denuncia p¨²blica es la clave de su ¨¦xito. ¡°Solo hay una v¨ªa para las v¨ªctimas ante la Iglesia, que es constituirse en asociaci¨®n. Y solo hay una estrategia, la mediatizaci¨®n. Es la ¨²nica manera de quebrar esa omert¨¢, ese sistema de silencio de la Iglesia, y de obligar a la sociedad a evolucionar¡±.
La mediatizaci¨®n de Palabra Liberada alcanzar¨¢ un nuevo hito en febrero con el estreno de Gracias a Dios, una pel¨ªcula sobre los inicios de la asociaci¨®n que retrata a Devaux, Hezez y Germain-Thil aunque aparecen con otros nombres, ya que oficialmente se trata de un trabajo de ficci¨®n. ¡°Es nuestra vida, nuestra historia, lo que pas¨® en nuestras familias en el periodo que va de 2014 a mediados de 2016¡±, explica Germain-Thil, que se dice muy satisfecho con la que ya es conocida como ¡°el Spotlight franc¨¦s¡±.
Con su estreno, que la defensa de Preynat est¨¢ intentando retrasar para que no interfiera en su juicio, los miembros de Palabra Liberada esperan seguir levantando ese velo de silencio que ha pesado tantas d¨¦cadas sobre la Iglesia y que, tambi¨¦n desde dentro, ¡°se empiecen a cuestionar cosas, dejen de proteger a la instituci¨®n y denuncien lo que vean¡±, explica Germain-Thil. Porque a¨²n queda un paso clave, subraya: ¡°El sentimiento de verg¨¹enza tiene que cambiar de bando¡±.
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