La muerte de tres pacientes pone en cuesti¨®n a la sanidad gallega

Ante la mirada horrorizada de su esposa, Jos¨¦ Manuel Brey, de 65 a?os, muri¨® asfixiado una tarde de s¨¢bado del pasado agosto en un centro de urgencias de Galicia en el que no hab¨ªa ning¨²n m¨¦dico. El Punto de Atenci¨®n Continuada (PAC) de A Estrada (Pontevedra) es uno de los 52 centros de los 90 de este tipo que funcionan en esta comunidad con un solo equipo sanitario, calculan los trabajadores, una controvertida falta de personal que obliga a los facultativos a dejar desatendidos a los pacientes cuando tienen que salir a atender alguna emergencia fuera.

¡°La culpa la tienen los recortes y una atenci¨®n primaria muy mal gestionada. En este caso fue mi primo Jos¨¦ Manuel, pero queremos que se sepa para que no vuelva a pasar¡±, denuncia Manuel Pereira, portavoz de la familia del fallecido. Los trabajadores de estos servicios sanitarios est¨¢n en huelga desde el pasado lunes para exigir, entre otras cosas, que el Gobierno gallego resuelva esta grave carencia que acab¨® en desgracia.

La plantilla de los PAC no es la ¨²nica en huelga en la sanidad gallega. El personal de Urgencias del complejo hospitalario de Santiago acumula dos meses de paro para reclamar m¨¢s medios y el pasado jueves protagonizaron una manifestaci¨®n por la capital gallega. Sus representantes presentaron ayer denuncia ante la fiscal¨ªa por la muerte de dos ancianos el pasado d¨ªa 2 que agravaron su estado mientras esperaban en los pasillos para ser atendidos.

Las m¨¢s de dos horas que pas¨® el PAC de A Estrada sin personal sanitario aquel s¨¢bado de agosto en el que muri¨® Jos¨¦ Manuel Brey no es una situaci¨®n excepcional. Se repite en los servicios de urgencia de atenci¨®n primaria de Galicia que solo tienen un m¨¦dico. ¡°Son los de las zonas rurales, los m¨¢s alejados de los hospitales y los que tienen menos poblaci¨®n pero m¨¢s envejecida y dispersa¡±, explica Pilar Rodr¨ªguez, enfermera en el PAC de A Guarda (Pontevedra) y miembro de la plataforma PACs en Pie de Guerra que lidera las movilizaciones con el apoyo de todos los sindicatos.

El centro donde trabaja Rodr¨ªguez es as¨ª, como el de A Estrada. Atiende a una poblaci¨®n de 20.000 personas y de lunes a viernes solo dispone de un equipo de m¨¦dica y enfermera que realiza frecuentes salidas, lo que provoca que el centro quede sin sanitarios una media de dos horas al d¨ªa. ¡°Si pasa algo, la ¨²nica referencia que tiene el celador que se queda all¨ª es llamar al 061 para que mande una ambulancia. Lo que pasa es que, como los que salieron se llevaron la que est¨¢ m¨¢s cercana, puede tardar media hora o 45 minutos en llegar al PAC¡±, detalla Rodr¨ªguez.

El PAC de A Guarda, relata Rodr¨ªguez, se ha quedado sin m¨¦dicos ¡°muchas veces con personas en la sala de espera o en medio de una asistencia¡±. El pasado verano hubo que salir en ambulancia hacia Oia, a unos 30 kil¨®metros, para socorrer a un hombre que se hab¨ªa ca¨ªdo en el monte en un lugar de dif¨ªcil acceso. ¡°La asistencia nos llev¨® cinco horas en las que el centro se qued¨® sin m¨¦dico¡±, denuncia.

Falta de aclaraciones de la Xunta

El Gobierno de Alberto N¨²?ez Feij¨®o elude aclarar cu¨¢ntos PAC en Galicia pueden quedarse durante horas sin m¨¦dico porque solo tienen uno y puede ser reclamado en el exterior. Sobre esta situaci¨®n, fuentes del Servicio Gallego de Salud alegan que no todo el servicio que prestan estos centros es de urgencias y que ¡°no es habitual la atenci¨®n de urgencias vitales¡±. Y argumentan que es el 061 el que, cuando se dan esas circunstancias, se encarga de coordinar c¨®mo se atienden las posibles incidencias, ya sea en el propio edificio del PAC o en un domicilio.

En el caso de Jos¨¦ Manuel Brey, un hombre que padec¨ªa p¨¢rkinson pero que acudi¨® al PAC de A Estrada el 4 de agosto de 2018 por una indisposici¨®n intestinal, el 061 no lleg¨® a tiempo. La titular del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 2 de A Estrada ha abierto una investigaci¨®n para esclarecer si la presencia de un m¨¦dico hubiera salvado a Brey y si detr¨¢s de su muerte subyacen responsabilidades penales. ¡°Si es un PAC all¨ª ten¨ªa que haber personal m¨¦dico, porque si no, se convierte en una ratonera¡±, afirma Rub¨¦n Fern¨¢ndez, abogado de la familia y miembro del despacho Fern¨¢ndez y Taboada de Santiago, quien considera, no obstante, que desde el punto de vista jur¨ªdico ¡°es pronto para saber si hay delito¡±.

La familia present¨® denuncia ante la Guardia Civil inmediatamente despu¨¦s de la muerte de Jos¨¦ Manuel, pero la maquinaria procesal acaba de arrancar esta semana. A falta del informe definitivo de la autopsia, la juez de A Estrada ha llamado a declarar a los testigos que aquella tarde estaban en el PAC y ha pedido datos al Sergas (Servizo Galego de Sa¨²de) sobre la organizaci¨®n del personal en este tipo de centros sanitarios. Los denunciantes esgrimen una orden de la Xunta de 2008 que, a su juicio, obligaba a que aquel fin de semana hubiese dos m¨¦dicos en las urgencias de atenci¨®n primaria a las que acudi¨® el fallecido.

La huelga indefinida que mantiene el personal de los PAC en Galicia no tendr¨¢ repercusi¨®n en los pacientes porque, al igual que la de las Urgencias del hospital de Santiago, se han establecido un 100% de servicios m¨ªnimos. Los trabajadores quieren que la protesta sirva para concienciar a la ciudadan¨ªa. Aseguran que debido al recorte en el gasto sanitario que emprendi¨® la Xunta en 2009 cuentan con el mismo personal que hace una d¨¦cada, pese a que la poblaci¨®n est¨¢ cada vez m¨¢s envejecida, los pacientes cr¨®nicos se multiplican, aumenta la hospitalizaci¨®n a domicilio y la sobrecarga de los ambulatorios se traduce en un aumento de los enfermos que llaman a su puerta. ¡°La gente tiene que ver las condiciones en las que nosotros trabajamos y lo que puede suponer para ellos¡±, apuntan desde la plataforma PACs en Pie de Guerra.

Manuel Pereira sospecha que su primo fue v¨ªctima de un fr¨ªo c¨¢lculo estad¨ªstico de los gestores sanitarios del Gobierno de Feij¨®o, que ¡°debieron de valorar que las probabilidades de que alguien muriera eran escasas¡±. Los trabajadores dicen que llevaban tiempo alertando del riesgo y que el Sergas les acusaba de ser alarmistas. ¡°Se me ponen los pelos de punta cuando pienso lo que le ocurri¨® a este hombre¡±, expresa la portavoz de PACs en Pie de Guerra. ¡°El tiempo nos dio tristemente la raz¨®n¡±.