Un estudio estima que el peaje urbano sacar¨ªa 190 millones de coches de Madrid y Barcelona

La poluci¨®n vuelve a ser un problema estos d¨ªas para Madrid y Barcelona. Sus dos ayuntamientos han activado sus protocolos de actuaci¨®n por exceso de part¨ªculas contaminantes. La existencia de peajes urbanos podr¨ªa haber evitado ese problema. Un informe elaborado por la consultora Idencity asegura que su puesta en marcha reducir¨ªa, de promedio, un 11,4% las part¨ªculas PM10 (de un di¨¢metro de entre 2,5 y 10 micr¨®metros) y un 9,2% las de ¨®xidos de nitr¨®geno. Esa reducci¨®n ser¨ªa consecuencia directa de que el pago para entrar en las dos grandes ciudades espa?olas habr¨ªa evitado la circulaci¨®n de 113 millones de veh¨ªculos al a?o en Madrid y de otros 76 millones en Barcelona.

Los autores del estudio llegan a esas conclusiones tras analizar y extrapolar lo qu¨¦ ha sucedido en otras ciudades desde que se implant¨® la entrada condicionada por un pago a sus centros urbanos: Londres, Estocolmo, Gotemburgo y Mil¨¢n. Esos casos pr¨¢cticos han demostrado la bonanza del peaje con una reducci¨®n de la contaminaci¨®n, una menor congesti¨®n vinculada a la menor competencia de veh¨ªculos por el espacio de circulaci¨®n y un aumento del uso del transporte p¨²blico (especialmente el autob¨²s) y otras f¨®rmulas de movilidad: la bicicleta.

Los servicios sanitarios tambi¨¦n han registrado mejoras: ca¨ªda de la actividad por accidentes de tr¨¢fico y por las visitas m¨¦dicas de personas con problemas de asma. La movilidad en el centro de la ciudad es la gran beneficiada de los peajes urbanos, concluye el estudio, al que ha tenido acceso este diario.

La implantaci¨®n del peaje urbano en las cuatro ciudades analizadas supuso una importante reducci¨®n del uso del coche, situado en una horquilla de entre el 12% y el 34%. Para Madrid, el informe estima que una medida de ese calado agudizar¨ªa la ca¨ªda de tr¨¢fico que ya se est¨¢ notando actualmente. Si en 2018 circularon por Madrid en torno a 543 millones de veh¨ªculos, este a?o (en el caso de que se hubiera implantado el peaje) esa cifra pasar¨ªa a 430 millones, 113 millones menos. Y en Barcelona el salto ser¨ªa de 371 millones de veh¨ªculos a 295, 76 millones menos.

Menor densidad

Derivado de ese menor uso para entrar en la ciudad, la reducci¨®n de la congesti¨®n en las dos ciudades espa?olas ser¨ªa importante. Barcelona, que adolece de un mayor problema en este sentido a causa de que es urban¨ªsticamente m¨¢s densa, pasar¨ªa del 31% actual de congesti¨®n al 20%. El efecto sobre Madrid ser¨ªa inferior: del 25,5% al 16,5%. El lobi automovil¨ªstico RACC ha cuantificado en 137 millones de euros las p¨¦rdidas ocasionadas solo en la capital catalana por sus problemas de congesti¨®n, a causa de las horas perdidas por las personas que se trasladan en transporte privado.

El estudio sostiene que la circulaci¨®n tarificada del coche por la ciudad comportar¨ªa "una tendencia generalizada hacia f¨®rmulas alternativas, m¨¢s sostenibles y respetuosas con el cambio clim¨¢tico". Pone como ejemplo c¨®mo creci¨® el uso del servicio p¨²blico de bicicleta (un 31,7% de promedio). La extrapolaci¨®n de esos datos supondr¨ªa que en Barcelona el Bicing (su modelo p¨²blico) pasar¨ªa de los actuales 105.000 usuarios a los 138.000, mientras que para Madrid se plantea un aumento del 15,8%, hasta superar los 57.000 inscritos. Y el n¨²mero de viajes validados en el transporte p¨²blico alcanzar¨ªa en Barcelona los 230 millones (un 15% m¨¢s) y en Madrid los 493 millones. Hay, no obstante, un problema de infraestructura: las dos ciudades deber¨ªan ampliar su oferta de aparcamientos disuasorios a las entradas de las dos ciudades.

Efectos sobre la salud

Un informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente cifr¨® en 2017 en 31.520 las muertes asociadas a la contaminaci¨®n atmosf¨¦rica en Espa?a. El informe de Idencity no efect¨²a valoraciones cuantitativas de ese tipo, pero realiza una aproximaci¨®n aprovechando un estudio previo realizado en Estocolmo sobre episodios graves de asma para personas de entre 5 y 20 a?os. Este arroj¨® una conclusi¨®n tras los primeros seis meses del peaje urbano funcionando: las visitas m¨¦dicas por cada 10.000 ni?os cayeron un 12%. Esa reducci¨®n fue mayor transcurrido m¨¢s tiempo, hasta suponer una ca¨ªda del 46%.

Otro ejemplo de que la reducci¨®n del tr¨¢fico reducir¨ªa la mortalidad y la presi¨®n sobre los servicios sanitarios es la ca¨ªda de la siniestralidad. El estudio calcula que Madrid reducir¨ªa en un solo a?o sus accidentes de 10.500 a unos 9.000, mientras que las estad¨ªsticas de Barcelona caer¨ªan de los 8.360 de 2018 a 7.100.

Uno de los debates que suscita la implantaci¨®n del peaje a las puertas de una ciudad es la falta de equidad, y aunque castiga menos a quien tiene menos recursos. El informe niega esa conclusi¨®n y sostiene que un sistema de peaje deber¨ªa contribuir a la financiaci¨®n de un sistema de transporte p¨²blico de mayor calidad y m¨¢s eficiente