Dimite la directora del suplemento femenino del peri¨®dico del Vaticano por los intentos de silenciarlo

El Vaticano y el Papa han sufrido una nueva baja que cuestiona directamente la apertura de la Iglesia a las mujeres y a la libertad de expresi¨®n. La directora del suplemento mensual femenino de L¡¯Osservatore Romano, Lucetta Scaraffia, y todo su equipo de 11 mujeres ha dimitido de sus funciones. En su despedida, siete a?os despu¨¦s de lanzar el primer n¨²mero, la redacci¨®n denuncia el intento de ¡°silenciar una iniciativa ¨²til¡±, la vuelta al clericalismo y a la cultura de ¡°mujeres obedientes¡±. La dimisi¨®n a¨ªsla m¨¢s al pontificado de Francisco, que pierde simpat¨ªas a ambos lados del esquema ideol¨®gico y social.

La directora de Mujeres, Iglesia, Mundo y su redacci¨®n han escrito una carta al Papa para explicar sus motivos. Algo que tambi¨¦n detallar¨¢n en el n¨²mero que saldr¨¢ el pr¨®ximo 1 de abril, pero que ya ha sido adelantado. Denuncian que su l¨ªnea editorial "no ha encontrado el apoyo de la nueva direcci¨®n de L'Osservatore Romano" [hubo un brusco cese del anterior director, Giovanni Maria Vian, el pasado diciembre] y que "se ha vuelto a la selecci¨®n de mujeres de arriba, a la elecci¨®n de colaboradores que aseguran obediencia y a renunciar a cualquier posibilidad de abrir un verdadero di¨¢logo, libre y valiente¡±.

La redacci¨®n explica en su carta al papa Francisco que tiran la toalla porque se sienten rodeadas de "un clima de desconfianza y deslegitimaci¨®n progresiva, desde una mirada sin estima y cr¨¦dito para continuar la colaboraci¨®n". "Con el cierre de Donne Chiesa Mondo se rompe, por primera vez, una experiencia nueva y excepcional para la Iglesia: un grupo de mujeres, que se han organizado de forma aut¨®noma, que han votado entre ellas la incorporaci¨®n de nuevas colaboradoras, que han podido trabajar en el coraz¨®n del Vaticano y de la comunicaci¨®n de la Santa Sede con inteligencia y coraz¨®n libres, gracias al consentimiento y apoyo de dos papas¡±.

Scaraffia explica a este peri¨®dico parte de los motivos de su renuncia y la de un heterog¨¦neo equipo donde no todas sus componentes eran cat¨®licas. "Si ten¨ªan dudas sobre nuetra l¨ªnea editorial, ten¨ªan que haber propuesto debates abiertos en lugar de poner en el en diario [en la publicaci¨®n diaria de L'Osservatore romano] una l¨ªnea completamente opuesta a la del suplemento. Nos hemos sentido desautorizadas, nos deslegitimaban", se?ala. La ex directora de la publicaci¨®n prefiere no poner ejemplos. Pero hace 10 d¨ªas se public¨® en el peri¨®dico una rese?a de Monica Mondo, periodista cercana al nuevo equipo de comunicaci¨®n del Vaticano, que echaba por tierra el documental sobre los abusos a monjas. Un tema que hab¨ªa convertido en una bandera Donne, Chiesa, Mondo. Las declaraciones del Papa en la ¨²ltima cumbre sobre los abusos, donde dijo que "cualquier feminismo termina siendo un machismo con falda" tampoco ayudaron.

El suplemento, creado durante la fruct¨ªfera direcci¨®n del anterior responsable del peri¨®dico del Vaticano, Giovanni Maria Vian, fue una publicaci¨®n contracultural dentro de los muros de una instituci¨®n masculina. Scaraffia impuls¨® la publicaci¨®n de grandes temas, incluido el del largamente silenciado abuso a las monjas por parte de sacerdotes. Este reportaje, que sac¨® a la luz una realidad inc¨®moda para la Iglesia, cay¨® como una bomba en la Santa Sede. Justo cuando la Iglesia empezaba a afrontar el tema del abuso a menores, se encontr¨® con un nuevo frente para el que no estaba preparada.

El propio director de la publicaci¨®n, Andrea Monda, ha contestado hoy a la dimisi¨®n del equipo y niega que el suplemento vaya a dejar de publicarse. "En estos pocos meses, desde que he sido nombrado director, he garantizado para Scaraffia y para el equipo editorial de mujeres, la misma autonom¨ªa y la misma libertad que han caracterizado la revista mensual desde que naci¨®, absteni¨¦ndome de interferir de cualquier manera en la creaci¨®n del suplemento mensual del peri¨®dico". Monda ha negado cualquier tipo de injerencia al tiempo que ha se?alado que el suplemento femenino de?L'Osservatore Romano "no se interrumpe" y va a continuar "sin ning¨²n tipo de clericalismo".