Greta Thunberg pide ayuda para cruzar el Atl¨¢ntico y acudir a la cumbre del clima en Madrid

La activista sueca Greta Thunberg, que no se desplaza en avi¨®n por las emisiones de CO₂,?ha pedido este viernes ayuda a trav¨¦s de sus redes sociales para poder encontrar un "transporte" con el que cruzar el oc¨¦ano Atl¨¢ntico de nuevo y acudir a la Conferencia sobre Cambio Clim¨¢tico de Naciones Unidas, conocida como COP25, que se celebrar¨¢ en Madrid tras la renuncia del Gobierno chileno. "Ahora que la COP25 se ha trasladado oficialmente de Santiago a Madrid, necesitar¨¦ algo de ayuda. Resulta que me he cruzado medio mundo en sentido contrario", ha explicado Thunberg en su cuenta de Twitter. "Necesito encontrar una forma de cruzar el Atl¨¢ntico en noviembre", ha a?adido.

La ministra espa?ola de Transici¨®n Ecol¨®gica, Teresa Ribera,? encantada con la noticia ha contestado a la activista tambi¨¦n en Twitter: "Querida Greta, ser¨ªa estupendo tenerte en Madrid. Has hecho un largo viaje y nos ayudas a tomar conciencia, abrir la mente y mejorar nuestras acciones. Nos gustar¨ªa ayudarte a cruzar el Atl¨¢ntico?de vuelta. Abierta a estar en contacto para hacerlo posible".

M¨¢s informaci¨®n

La ONU da luz verde a que Madrid acoja la cumbre del clima dentro de un mes

Espa?a asume el reto de acoger en un mes la cumbre del clima de la ONU cancelada en Chile por las protestas

Thunberg ha emprendido una campa?a de concienciaci¨®n que le ha llevado a Canad¨¢ como ¨²ltimo destino. La activista ha lamentado que no pueda visitar "esta vez" pa¨ªses del centro y el sur de Am¨¦rica, pero ha explicado que quiere viajar a Madrid para seguir alertando de la "emergencia clim¨¢tica y ecol¨®gica". "Si alguien me pudiese encontrar alg¨²n transporte, le estar¨ªa agradecida", ha escrito.

El cambio de sede de la cumbre? ha sorprendido en medio del Atl¨¢ntico a un grupo de 36 j¨®venes ecologistas europeos reunidos en torno a Sail to the Cop (navegando hacia Cop) que se dirig¨ªan al encuentro a bordo de la nave Regina Maris. Partidarios de cambiar el futuro del transporte para que sea sostenible a escala mundial, ¡°van camino de Belem, en Brasil, y decidir¨¢n en los pr¨®ximos d¨ªas si siguen adelante o ponen rumbo a Espa?a¡±, seg¨²n el equipo de apoyo que sigue el viaje.

La embarcaci¨®n Regina Maris parti¨® de ?msterdam el pasado 2 de octubre, y tras una parada de emergencia en Francia para solucionar problemas con el sistema de purificaci¨®n de agua, deb¨ªa llegar a Recife, en Brasil, hacia el 7 de noviembre. All¨ª les espera el l¨ªder ind¨ªgena Jefe Raoni Metuktire, que vive en una reserva protegida del territorio brasile?o, para hablar de la preservaci¨®n del Amazonas. Los activistas del clima de Sail to the Cop quer¨ªan llegar luego por tierra hasta Chile. ¡°Que la ciudad elegida para la cumbre sea ahora Madrid es un cambio radical. Por lo que sabemos, tomar¨¢n una decisi¨®n entre todos porque parece que un grupo querr¨ªa ir a la cita, y otros prefieren seguir adelante y cumplir con los compromisos previstos¡±, indican fuentes de la organizaci¨®n ecologista holandesa Milieudefensie, una de las entidades involucradas en la traves¨ªa. El Ministerio de Infraestructuras y Aguas, la Universidad de Wageningen ¡ªespecializada en desarrollo y alimentaci¨®n¡ª, y ProRail, la compa?¨ªa p¨²blica holandesa responsable de la red de ferrocarriles figuran a su vez entre los promotores.

De edades comprendidas entre 18 y 31 a?os, entre los 36 viajeros hay estudiantes de Relaciones Internacionales, Ciencias Medioambientales y Psicolog¨ªa, as¨ª como artistas procedentes de Dinamarca, Finlandia, Alemania, Francia, B¨¦lgica y Holanda, entre otros. Una de las pasajeras, la belga Anuna de Wever, pidi¨® consejo a Greta Thunberg, que en agosto pasado acudi¨® a la Cumbre sobre la Acci¨®n del Clima de la ONU, celebrada en Nueva York, cruzando a su vez el Atl¨¢ntico. Durante dos semanas, la adolescente naveg¨® a bordo del catamar¨¢n Malizia II, equipado con paneles solares y turbinas para general energ¨ªa el¨¦ctrica, y De Wever asegura que ¡°Greta me dijo que fue muy relajante apartarse de las presiones a bordo del buque, y espero que as¨ª sea¡±, seg¨²n recoge el Centro de Informaci¨®n Regional de la ONU para Europa Occidental, con sede en Bruselas.