El Chicle: ¡°Le apret¨¦ el cuello, le di palmadas, vi que no se mov¨ªa¡±
El autor confeso de la muerte de Diana Quer sostiene que la estrangul¨® cuando la muchacha apareci¨® por la calle y lo descubri¨® robando gasoil de camiones
"Yo estaba robando gasoil de camiones con dos garrafas y vi llegar a la chica. Iba en direcci¨®n a los gitanos y pens¨¦ que era una de ellos, una de los feriantes de las fiestas patronales que hab¨ªa all¨ª acampados. Cre¨ª que me iba a delatar. Yo no pod¨ªa cometer delitos o entrar¨ªa en prisi¨®n, porque estaba pendiente de una sentencia por drogas, con la condena suspendida". Jos¨¦ Enrique Abu¨ªn Gey, alias El Chicle, ha descrito pasado el mediod¨ªa de este martes en su juicio, con todo lujo de detalles y sin rechazar ninguna pregunta, su versi¨®n sobre la muerte de la joven Diana Quer. "Me fui hacia ella y la agarr¨¦ con la mano derecha por el cuello. Luego le sostuve la cabeza con la izquierda por detr¨¢s y apret¨¦. Se fue al suelo y se qued¨® con los ojos abiertos. Vi que no se mov¨ªa, que estaba parada. Le pegu¨¦ en la cara dos o tres palmadas. Estaba muerta. Me asust¨¦".
En la primera sesi¨®n del juicio por la muerte de Diana Quer, el ¨²nico acusado ha insistido en que acab¨® con la vida de la chica de forma accidental ("tengo mucha fuerza en los dedos, con dos de cada mano puedo levantar mi propio peso") y que una vez fallecida la carg¨® en los asientos traseros de su Alfa Romeo y la llev¨® hasta la nave abandonada de Rianxo donde finalmente arroj¨® el cad¨¢ver lastrado en un pozo de agua dulce. "S¨¦ que reaccion¨¦ mal, pero reaccion¨¦ as¨ª", se ha justificado. ?l no sab¨ªa que en aquel pozo con tapa de hormig¨®n habr¨ªa agua, pero "tuve la suerte", ha dicho, de que la hab¨ªa, y a pesar de que lastr¨® el cuerpo con dos bloques de cemento, el cad¨¢ver "qued¨® flotando". La acusaci¨®n sostiene que Abu¨ªn s¨ª sab¨ªa que hab¨ªa agua, y que aprovech¨® esta circunstancia para borrar las pruebas de su agresi¨®n sexual, con el cuerpo all¨ª oculto durante 497 d¨ªas.
El de la muerte fortuita es el relato que sostendr¨¢ en este medi¨¢tico juicio la defensa, ejercida por una abogada del turno de oficio despu¨¦s de que el letrado de pago abandonase a su cliente. Seg¨²n su versi¨®n, Abu¨ªn escondi¨® el cuerpo en la nave a 17 kil¨®metros de la calle en la que se produjo la muerte y le sac¨® la ropa "por si quedaban pelos o rastros de ¨¦l", o incluso rastros biol¨®gicos de su propia esposa, ya que el veh¨ªculo era el que usaba la que ahora es expareja de Abu¨ªn. El Chicle, autor confeso de la muerte de la madrile?a de 18 a?os que desapareci¨® del pueblo donde pasaba sus vacaciones, A Pobra do Carami?al (A Coru?a), en la madrugada del 22 de agosto de 2016, asegura que se tropez¨® con Diana porque estaba robando gasoil. Seg¨²n esta versi¨®n, aquella noche de verano, aprovechando el ajetreo de las fiestas que se celebraban en el centro de la localidad, Abu¨ªn no buscaba una presa femenina, sino que acababa de extraer garrafa y media (unos 37 litros) de gasoil de un veh¨ªculo. El acusado debe responder en las pr¨®ximas semanas por los presuntos delitos de asesinato, detenci¨®n ilegal y violaci¨®n de la chica.
Despu¨¦s de declarar El Chicle, ha llegado el turno para los padres de Diana Quer. Juan Carlos Quer ha asegurado que el crimen "ha dejado cuatro v¨ªctimas", la fallecida, su padre, su madre y su hermana peque?a, Valeria. "Yo escenifico la imagen [del asalto] como si mi hija fuera un cervatillo indefenso frente a este individuo", ha descrito el progenitor de Diana. "Mi hija no era una persona que supiera ponerse en defensa; naci¨® muy prematura, con apenas un kilo de peso y eso segu¨ªa arrastr¨¢ndolo. No era atl¨¦tica, era absolutamente vulnerable". Juan Carlos Quer (que hace tres a?os dej¨® de trabajar para dedicarse al cuidado de su hija Valeria y tratar de sacar adelante una fundaci¨®n, con el nombre de Diana, por el derecho a justicia de los desaparecidos) ha explicado ante el tribunal del jurado los "efectos devastadores" que la desaparici¨®n y muerte de Diana ha causado en la hermana menor, que entonces ten¨ªa 16 a?os.
"Ha perdido a su compa?era de juegos, de vida, de todo. Ha dejado los estudios, ha estado ingresada durante meses, ha pasado por diferentes centros y acude a cuatro sesiones semanales con psic¨®logos", ha contado Quer sobre la hija que le queda. "Vive recluida en casa, tiene miedo, no quiere tener relaciones sociales con nadie y sus ¨²nicos compa?eros son dos perros de defensa", ha proseguido. "Una vez se provoc¨® 15 quemaduras sin manifestar una sola expresi¨®n de dolor. El dolor f¨ªsico le supuso un alivio" ante tanto dolor que llevaba dentro. "Me llevar¨¢ muchos a?os restablecer su equilibrio emocional para que sea como una persona normal", ha concluido su padre.
La madre de Diana, la ¨²ltima en prestar declaraci¨®n, al filo de las dos y media de la tarde, ha descrito a su hija fallecida entre l¨¢grimas como "una ni?a tremendamente bondadosa, un ¨¢ngel. Muy miedosa y precavida". "No pod¨ªa ver pel¨ªculas de terror", ha contado tratando de reponerse a los sollozos, "siempre fue muy fr¨¢gil". La joven era "obediente" y en su pueblo gallego de vacaciones siempre hac¨ªa la misma ruta para regresar a casa, que no coincide con la calle poco transitada, oscura y con naves industriales en ruinas en la que, seg¨²n la versi¨®n del acusado, este se la top¨® aquella madrugada del 22 de agosto de 2016. Diana volv¨ªa a casa "siempre" por el paseo litoral y luego segu¨ªa el ¨²ltimo tramo hasta la urbanizaci¨®n donde se ubica el chal¨¦ en el que veraneaba desde ni?a "por la carretera principal". Diana L¨®pez-Pinel ha confirmado tambi¨¦n que tanto Valeria como ella han tenido "ingresos m¨¦dicos" porque se han "muerto de pena", una situaci¨®n "agravada por el escarnio p¨²blico al que fuimos sometidas". En tratamiento "por depresi¨®n", no era capaz de "caminar": "Me arrastraba", ha descrito.
"Ustedes van a tener que mandar un mensaje muy claro a la sociedad. Aqu¨ª no hay patente de corso. El que la hace la paga", ha encomendado al jurado durante su turno el abogado de los padres de Diana Quer, Ricardo P¨¦rez Lama, que tambi¨¦n hab¨ªa ejercido la acusaci¨®n popular en el caso Asunta. "?Para qu¨¦ detiene [Abu¨ªn] a una chica joven, guapa, con una melena lacia muy bonita si no es para atentar contra su libertad sexual?", se ha preguntado el tambi¨¦n representante legal de la Asociaci¨®n Clara Campoamor, "Es un depredador, un cazador sexual", ha calificado al acusado. Y ha insistido en que El Chicle "mat¨® a Diana Quer para ocultar su fechor¨ªa. Ten¨ªa la experiencia de lo que le hab¨ªa pasado con su cu?ada, que lo denunci¨®" por una violaci¨®n en 2005, un asunto archivado que se ha reabierto siguiendo la estela del caso Quer.
La acusaci¨®n (tanto fiscal¨ªa como el abogado que representa a los padres de Diana) reclama la prisi¨®n permanente revisable por un supuesto asesinato ligado a una violaci¨®n y un rapto. La letrada defensora, Mar¨ªa Fernanda ?lvarez, pide tan solo dos a?os y medio por un delito de homicidio imprudente. ?lvarez ha explicado al jurado que se encuentra "ante el caso m¨¢s dif¨ªcil" de su carrera como abogada. "Me tengo que enfrentar a una condena social. A un bombardeo medi¨¢tico, a un linchamiento", ha argumentado, y luego se ha dirigido a los miembros del tribunal: "Les pido encarecidamente que se desinfecten del juicio medi¨¢tico". Seg¨²n ella, si no se han encontrado rastros biol¨®gicos de Abu¨ªn en el cuerpo de la v¨ªctima "en unos tiempos en que se puede extraer ADN de f¨®siles de hace millones de a?os" es porque "no los ha habido".
La representante del ministerio fiscal, Cristina Margalet,? ha mantenido, por el contrario, que El Chicle desarroll¨® un "modus operandi" para "violarla, asesinarla y esconder su cad¨¢ver, tir¨¢ndolo a un pozo". Para ello, la transport¨® viva, encerrada en el maletero de su veh¨ªculo, "durante al menos 25 minutos". Tambi¨¦n le quit¨® el tel¨¦fono m¨®vil, que tir¨® al mar desde el coche en marcha, a la altura de un viaducto de la autov¨ªa. La agresi¨®n sexual, para la fiscal, se produjo dentro de la nave de Rianxo donde tambi¨¦n muri¨® y donde apareci¨® el cad¨¢ver dentro del pozo, desnudo, boca abajo y lastrado con bloques de cemento. Fue v¨ªctima de "un estrangulamiento con rotura del hueso ioides", compatible "con el uso de una brida", ha concretado bas¨¢ndose en la autopsia y en el hallazgo de una cincha pl¨¢stica enredada en la melena de la muchacha.
Antes de empezar el juicio, la madre de Diana Quer, Diana L¨®pez-Pinel, enfrentada con el padre, al que ha denunciado recientemente dos veces por presuntos malos tratos, ha abandonado el juzgado, seg¨²n dijo, para no tener que esperar su turno "dos horas con el se?or Quer". M¨¢s tarde, ante el jurado, se ha mostrado muy molesta por no haber sido debidamente informada sobre la organizaci¨®n del juicio en el que deb¨ªa declarar y sobre el propio sumario, de 14 tomos, que no ha visto. "Vengo en blanco a este juicio, no se me ha aportado ninguna documentaci¨®n", ha protestado al llegar a la sala donde se celebra la vista en los juzgados de Santiago. Al terminar su declaraci¨®n, despu¨¦s de que el presidente del tribunal, el magistrado de la Audiencia de A Coru?a ?ngel Pant¨ªn, levantase la sesi¨®n, ha hecho adem¨¢n de aproximarse hacia el acusado pero dos personas han bloqueado su avance.
La ropa en un contenedor
La acusaci¨®n sostiene que Diana sufri¨® "el horror" del rapto y el traslado en el maletero y que en la nave, un escenario de "pel¨ªcula de terror", fue forzada sexualmente durante toda una hora hasta que El Chicle la mat¨® con la brida al cuello. La abogada de Abu¨ªn basa su defensa en que "no hay ninguna prueba objetiva" de eso y que la autopsia efectuada a los restos mortales no pudo revelar m¨¢s que la rotura de huesos compatible con el estrangulamiento, que pudo ser en la vieja f¨¢brica de muebles abandonada de Rianxo, pero tambi¨¦n en el lugar donde Diana y El Chicle se encontraron.
"Jos¨¦ Enrique pudo haberse callado y entonces no estar¨ªamos aqu¨ª, porque a la investigaci¨®n le faltaba mucho camino. Est¨¢ claro que no miente", ha argumentado Mar¨ªa Fernanda ?lvarez. "Soy madre, tengo una hija, es un dolor infinito para una familia que el cuerpo estuviese oculto tanto tiempo, pero esa rabia no nos puede cegar", ha dicho al tribunal, "si no se toma una decisi¨®n en virtud de las pruebas, no de miles de informes que son meras suposiciones, las consecuencias ser¨¢n catastr¨®ficas".
La abogada ha reprochado que nunca le dieran acceso a la supuesta arma homicida, la brida pl¨¢stica: "No la pude ver, se destruy¨® en el laboratorio en esa obsesi¨®n por encontrar rastros". Y tambi¨¦n ha recordado que las partes de tejido blando del cad¨¢ver de Diana no presentaban "desgarros, fisuras o hematomas". Durante el juicio, el abogado de los padres de Diana ha solicitado que se exhiba "una brida an¨¢loga" a la que apareci¨® junto al cad¨¢ver.
El Chicle ha explicado que al d¨ªa siguiente de matar a Diana condujo m¨¢s de 30 kil¨®metros hasta Escravitude (Padr¨®n, A Coru?a) y que arroj¨® la ropa "enrollada" de la v¨ªctima en un contenedor situado junto a un desguace y un mes¨®n. Nunca fueron recuperadas esas prendas. En el pozo, sin embargo, aparecieron el tanga de la chica y su bolso de Yves Saint Laurent con objetos personales.
Seg¨²n la versi¨®n del acusado, su idea inicial era abandonar el cuerpo a medio camino, en la zona del muelle de Tarago?a (Rianxo), donde s¨ª arroj¨® el iPhone 6 blanco de la chica. No lo hizo, ha justificado, porque al llegar comprob¨® que "hab¨ªa gente". Una vez que lleg¨® a la nave de Asados (Rianxo), que conoc¨ªa bien porque hab¨ªa entrado varias veces para robar muebles abandonados para su propia casa, introdujo el coche y descarg¨® el cad¨¢ver de su v¨ªctima. Lo baj¨® a peso por unas escaleras hasta el s¨®tano, y cuando consigui¨® abrir la tapa del pozo (atando un cable el¨¦ctrico que encontr¨® all¨ª mismo a la argolla met¨¢lica de la plancha de hormig¨®n) sent¨® al borde el cuerpo de la muchacha y lo fue "descolgando" poco a poco hasta la altura del agua. Solo hab¨ªa, ha detallado, "metro y medio" de pozo sin llenar.
Jos¨¦ Enrique Abu¨ªn no ha ahorrado pinceladas en su dibujo de los hechos. Ha explicado c¨®mo se abre el dep¨®sito de un cami¨®n para sustraer combustible y c¨®mo se sabe, introduciendo una manguera, si est¨¢ lleno. Ha reconocido que la muchacha lo intent¨® "empujar" para "salvar su vida". Ha contado que aquella tarde, antes de salir a por gasoil, fue con su cu?ado a ver un incendio forestal que hab¨ªa en la comarca. Y ha negado que en la nave, entre los trastos viejos que quedaban, hubiese camas, como sostiene la fiscal¨ªa.
"?A usted le gustan las mujeres altas, morenas, j¨®venes?", le ha preguntado Ricardo P¨¦rez Lama. "Como a todo el mundo", ha respondido El Chicle. "As¨ª que usted mat¨® a Diana para evitar ser delatado por un delito menor como es robar combustible, un hurto con pena de 90 euros?", le ha planteado la fiscal Margalet. Abu¨ªn ha dicho que s¨ª.
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