¡°Grupos que no son ind¨ªgenas est¨¢n decidiendo por ellos¡±

La superficie quemada en la Amazonia brasile?a este a?o, un total de 9.700 kil¨®metros cuadrados ¡ªun 30% m¨¢s que en 2018, el peor dato desde hace 11 a?os¡ª, ha levantado las cr¨ªticas mundiales hacia las pol¨ªticas medioambientales que lleva a cabo el Gobierno del ultraderechista Jair Bolsonaro. Su ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, que se encuentra en Madrid para participar en la COP25, considera que la deforestaci¨®n no se podr¨¢ parar hasta que no se consiga un desarrollo sostenible de la zona en la que viven 20 millones de brasile?os, que carecen de alternativas. Para ello pide fondos y que Europa libere la compra de los derechos de emisi¨®n de carbono. Salles asegura tambi¨¦n que van a respetar las decisiones de los ind¨ªgenas ¡ªen el centro de la lucha contra la deforestaci¨®n¡ª, pero sin que haya grupos que decidan por ellos, como ha sucedido hasta ahora.

Pregunta. ?Cree en el cambio clim¨¢tico?

Respuesta. S¨ª. No hay duda de que lo hay.

P. La deforestaci¨®n de la Amazonia ha crecido un 30% el ¨²ltimo a?o ?C¨®mo ha ocurrido algo as¨ª?

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R. Brasil es un pa¨ªs que tiene m¨¢s del 80% del bosque amaz¨®nico protegido y lo consideramos un tesoro. El aumento de la deforestaci¨®n comenz¨® en 2012. Tenemos que encontrar el origen, que est¨¢, entre otros motivos, en la falta de un desarrollo econ¨®mico sostenible para los m¨¢s de 20 millones de brasile?os que viven ah¨ª. Deben tener una alternativa para que puedan valorar la conservaci¨®n de la Amazonia. Cuando disminuya la deforestaci¨®n, bajar¨¢n los puntos de fuego.

P. ?Qui¨¦n est¨¢ detr¨¢s de la deforestaci¨®n?

R. Por una parte, existe una presi¨®n de peque?os propietarios agropecuarios, que cultivan peque?as parcelas y abren nuevas ¨¢reas para producir para s¨ª. En segundo lugar, se encuentra la miner¨ªa, que sigue sin tener un reglamento, y en tercero el mercado de madera.

P. ?Qu¨¦ papel cumplen los ind¨ªgenas en la protecci¨®n de la Amazonia?

R. Los ind¨ªgenas son el 1% de la poblaci¨®n y cuentan con el 14% del territorio, cantidad de tierra suficiente para ellos, y el Gobierno va a respetar sus decisiones. Lo que ha pasado hasta ahora es que otros que no eran ind¨ªgenas han decidido por ellos.

P. ?Qui¨¦nes son esos otros?

R. Hay de todo, representantes pol¨ªticos, organizaciones civiles, religiosas... Gente que se pone al frente de los ind¨ªgenas diciendo lo que ellos quieren.

P. Todos sus predecesores les acusan de desmantelar la pol¨ªtica medioambiental.

R. Esto no es verdad. La gente ha construido una narrativa que acusa al Gobierno de no respetar el medio ambiente. Pero la realidad es que hemos gastado much¨ªsimo dinero en cosas que no han resultado. Nosotros queremos que se pueda medir el resultado de cada dinero p¨²blico o privado que se invierta y eso cambia el comportamiento.

P. A estas cr¨ªticas se ha sumado muchos Gobiernos del mundo

R. Es importante darles las informaciones correctas. El aumento de la deforestaci¨®n se ha producido en los ¨²ltimos siete a?os, y eso no ha cambiado en el ¨²ltimo a?o. Adem¨¢s, es un tercio de los 27.000 kil¨®metros cuadrados que se quemaban entre 2004 y 2005. Lo que hay que tener en cuenta es que las personas que viven en la Amazonia cuentan con la mayor cantidad de recursos naturales y, al mismo tiempo, son los m¨¢s pobres de todo el pa¨ªs. Si no solucionamos el tema de la pobreza no habr¨¢ preocupaci¨®n por el tema del medio ambiente. Ese es el mayor enemigo del medio ambiente.

P. ?Qu¨¦ medidas ha adoptado su Gobierno para paliar la deforestaci¨®n?

R. En primer lugar, se plantea solucionar la falta de seguridad legal por la regularizaci¨®n de los certificados de propiedad. Sin esto es imposible responsabilizar a la gente. En segundo lugar, es importante desarrollar el plan de ocupaci¨®n territorial de la Amazonia, para ordenar la ocupaci¨®n y utilizaci¨®n de la tierra. Tambi¨¦n planteamos el pago por los servicios ambientales que presta el bosque, no solo a la poblaci¨®n brasile?a sino a todo el mundo. Si se reconoce que la Amazonia tiene un papel importante, es necesario un apoyo financiero considerable para ayudar a la conservaci¨®n. Por ¨²ltimo, apostamos por la bioeconom¨ªa, con inversiones del mercado de cosm¨¦ticos, de f¨¢rmacos o industria de transformaci¨®n de alimentos. Negocios que generen oportunidades de empleo para que la gente que vive aqu¨ª lo pueda hacer de forma sostenible. Mientras estos puntos son implementados tenemos toda una estrategia de control, con fiscalizaci¨®n por parte de la polic¨ªa y las fuerzas armadas. Pero eso solo no es suficiente.?

P. ?Qu¨¦ esperan de la COP?

R. Es el momento de facilitar el comercio de carbono. Europa ha cerrado su mercado y no permite que haya una compra de cr¨¦ditos de carbono de otros pa¨ªses, incluso del bosque amaz¨®nico. De esa manera est¨¢n cortando las l¨ªneas de financiaci¨®n y los propios europeos pagan un precio m¨¢s alto. No es una buena alternativa.

P. Existen dudas de la fiabilidad de los proyectos que generan derechos de emisiones en Brasil.

R. Est¨¢n auditados por entidades p¨²blicas extranjeras y tienen total credibilidad.

P. Piden financiaci¨®n, pero el Fondo de la Amazonia (instrumento que financian Noruega y Alemania para recompensar el descenso de la deforestaci¨®n) est¨¢ paralizado y rechazaron el dinero ofrecido por el G7 en verano.

R. Son temas distintos. Una cosa es lo prometido en el Acuerdo de Par¨ªs, 100.000 millones de d¨®lares para la lucha contra el cambio clim¨¢tico, una cantidad de dinero casi 100 veces mayor que lo que aporta el Fondo de la Amazonia en 10 a?os. Es dinero tambi¨¦n muy bienvenido, pero tiene que respetar la estrategia del Gobierno brasile?o, que es convertir estos fondos en resultados concretos, que se puedan ver.

P. ?Significa que el Gobierno quiere incrementar el control sobre esas inversiones?

R. No necesariamente, pero s¨ª saber c¨®mo se ponen en marcha. Estos fondos van a ser invertidos en acciones, en estrategias. Hasta ahora el Gobierno estaba muy poco involucrado con el destino de ese dinero y, por lo tanto, la estrategia p¨²blica ten¨ªa poco que ver con esos recursos.

P. Su presidente acus¨® la semana pasada al actor Leonardo Di Caprio de ¡°prender fuego a la Amazonia¡± con sus donaciones. ?l lo ha negado ?Tienen alg¨²n tipo de prueba al respecto?

R. La investigaci¨®n policial en el Estado de Par¨¢ ha reconocido que hab¨ªa una relaci¨®n entre la gente que ha sido detenida ah¨ª con organizaciones internacionales y con el origen de estos fondos. Lo que hizo el presidente fue repetir lo que ya se hab¨ªa dicho. Ahora estamos esperando a que la investigaci¨®n llegue al final y tener una conclusi¨®n.

P. La semana pasada se detuvo a cuatro bomberos voluntarios acusados de causar incendios. ?Son los ¨²nicos detenidos?

R. En este caso espec¨ªfico no hay m¨¢s detenidos, pero hay otras investigaciones en marcha.

P. ?Se est¨¢ produciendo un enfrentamiento con las ONG?

R. Lo que hay es una necesidad de utilizar los recursos con transparencia, objetividad y resultados y todos tienen que someterse a eso.