Protesta de estudiantes contra el veto parental y la violencia machista
Miles de personas se manifiestan en 40 ciudades espa?olas en una jornada en la que el alumnado estaba llamado a la huelga por el Sindicato de Estudiantes
El grito reson¨® en la calle de Alcal¨¢ de Madrid. Por el altavoz, una de las organizadoras acababa de pedir ¡°un rugido contra Vox¡±. Era el final de una manifestaci¨®n que hab¨ªa comenzado dos horas antes en la Puerta del Sol contra ¡°la violencia machista, la justicia patriarcal y la ofensiva que la extrema derecha y sus aliados han lanzado contra las mujeres y el colectivo LGTBI¡±, en una jornada de ¡°huelga general estudiantil feminista y antifascista¡± convocada por el Sindicato de Estudiantes. Ha habido movilizaciones en 40 ciudades. En Madrid, la protesta ha terminado con una sentada frente al Ministerio de Igualdad: reclamando una asignatura de educaci¨®n sexual, obligatoria y evaluable, ¡°contra el veto parental¡±, una medida por la cual se implanta el control de los padres sobre el contenido extracurricular que imparten profesores ajenos al centro, como por ejemplo, charlas de educaci¨®n sexual o sobre el colectivo LGTBI.
Las manifestaciones m¨¢s numerosas se han celebrado en Madrid ¡ªdonde la Delegaci¨®n del Gobierno ha cifrado en 3.000 los asistentes y los organizadores, en m¨¢s de 15.000¡ª y en Barcelona ¡ªdonde la Guardia Urbana ha informado de 4.000 participantes y el sindicato, de 30.000¡ª. La mayor¨ªa eran mujeres. Los convocantes hablaron de ¡°m¨¢s de 100.000¡± asistentes a la protesta en ciudades a lo largo del pa¨ªs. Como Murcia, donde el veto parental ya es una realidad y salieron a la calle unos dos centenares de personas. La organizaci¨®n estima que dos millones de estudiantes hicieron huelga, con un 80% de seguimiento en institutos. En Madrid, la Consejer¨ªa de Educaci¨®n no ofrece datos en huelgas estudiantiles. En Catalu?a, el Departamento de Ense?anza calcula un 40,48%.
El sindicato reclama una asignatura de educaci¨®n sexual, obligatoria y evaluable, que se recoja en las normativas de los institutos el respeto a la libertad sexual y a que los estudiantes elijan c¨®mo vestir, el fin de las subvenciones a la concertada, adem¨¢s de que se acabe con el veto parental. ¡°Este ¨²ltimo es solo un ejemplo de lo que nos tienen preparado, que es hacer de la educaci¨®n su plataforma pol¨ªtica e ideol¨®gica. No lo vamos a permitir¡±, ha explicado este viernes Carol Latorre, secretaria general del Sindicato de Estudiantes. ¡°La ultraderecha es una amenaza muy seria y responderemos en la calle¡±, dec¨ªa. Y ha insistido en que la movilizaci¨®n de este viernes es el pistoletazo de salida de la manifestaci¨®n del 8 de marzo.
¡°Ahora que mujeres del PP y Ciudadanos han vuelto a decir de repente que vuelven a ser feministas, o muchas de ellas participar¨¢n en la protesta del 8-M, aprovechamos esta manifestaci¨®n para decirles, por muy mujeres que sean, que aquellas que fomentan el machismo, la homofobia y condenan a mujeres a desahucios, trabajos basura y precariedad no son nuestras aliadas y no son bienvenidas¡±, ha afirmado Latorre.
La protesta estaba convocada adem¨¢s por la plataforma feminista Libres y Combativas, que lanza un mensaje al Gobierno de coalici¨®n y a Unidas Podemos, a trav¨¦s de su portavoz Ana Garc¨ªa: ¡°Ahora que son ministras, que lleven a cabo las reivindicaciones de la calle. Esto exige confrontar a quienes nos oprimen, a la Iglesia, a los banqueros...¡±
En primera fila, la pancarta rezaba: Educaci¨®n sexual inclusiva y en libertad. Fuera el machismo de nuestras aulas. Contra la violencia machista y la educaci¨®n franquista. No pasar¨¢n. Una de las que sosten¨ªa el cartel en Madrid era Alba S¨¢nchez. 17 a?os. Labios pintados de lila. Pendientes con el s¨ªmbolo femenino. ¡°Lucho por nuestros derechos, por que haya m¨¢s educaci¨®n sexual y por que no me opriman", explicaba esta joven. Laura Garc¨ªa, de 18 a?os, dec¨ªa ¡°basta" a la violencia. Y remataba: ¡°Estoy aqu¨ª porque necesitamos igualdad. Si hay que conseguirlo gritando, lo haremos¡±.
Con informaci¨®n de Virginia Vadillo.
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