El confinamiento ayuda a que los flamencos se reproduzcan por primera vez en las salinas de Torrevieja

Primero fueron las lluvias torrenciales del pasado oto?o, que minimizaron el impacto de la industria salinera. Y despu¨¦s, el estado de alarma que ha suprimido durante unos meses los niveles de ruido y contaminaci¨®n. Ambos factores han convertido las lagunas de Torrevieja-La Mata (Alicante) en el espacio id¨®neo para que una colonia de flamencos decida formar familia. Y, por primera vez desde que hay registros, estas aves han optado por este humedal para reproducirse. Seg¨²n la Conselleria de Agricultura de la Comunidad Valenciana, m¨¢s de 600 pollos de esta peculiar ave zancuda ya han salido de su cascar¨®n.

Los flamencos protagonizan buena parte de las postales que representan los humedales del sur de la provincia de Alicante, desde El Hondo de Elche hasta las lagunas de Torrevieja y La Mata, pasando por las salinas de Santa Pola. Su colorido y su silueta caracter¨ªsticos destacan en una zona que les sirve de parada en su tr¨¢nsito entre zonas m¨¢s fr¨ªas o m¨¢s c¨¢lidas, seg¨²n les dicte la estaci¨®n del a?o. Sin embargo, las ocasiones en las que hab¨ªan decidido fundar una guarder¨ªa en esta ¨¢rea se pod¨ªan contar con los dedos de una mano. Desde los a?os 70, tres veces en Santa Pola y dos en el Hondo.

Hasta el pasado mes de marzo, poco antes del establecimiento del estado de alarma en toda Espa?a a causa de la pandemia de coronoavirus. Los t¨¦cnicos del Parque Natural de las lagunas de La Mata-Torrevieja, as¨ª como los empleados de la industria salinera que explota parte de este humedal, observaron la llegada progresiva de la colonia de flamencos, en un n¨²mero superior al habitual. Conforme desaparec¨ªa el rastro del ser humano en la zona, tanto en actividad industrial como en tr¨¢fico de veh¨ªculos a¨¦reos y terrestres, se pod¨ªa constatar una mayor presencia de aves rosadas.

Pero fue en la primera quincena del pasado mes de mayo cuando se constat¨® un acontecimiento hist¨®rico. En la mota central de la laguna, en el lugar m¨¢s apartado posible de cualquier orilla, las parejas de flamencos estaban nidificando. Todos los astros se hab¨ªan alineado. El mejor afrodis¨ªaco que pueden encontrar estas aves es una p¨¢tina de agua en calma, un n¨²mero considerable de ejemplares que colaboren en la protecci¨®n de la colonia y los huevos y las menores distracciones posibles. Adem¨¢s, el temporal registrado el pasado oto?o aument¨® el nivel del agua y rebaj¨® la salinidad de la laguna, con lo que el suministro de alimento estaba garantizado.

Hasta el momento, el discreto plan de vigilancia establecido, en palabras de los propios investigadores, solo ha podido determinar la gran presencia de peque?os flamencos, que presentan su t¨ªpica coloraci¨®n gris¨¢cea que deja paso al blanco ros¨¢ceo que los convierte en una de las aves acu¨¢ticas m¨¢s reconocibles. La Generalitat asegura que son m¨¢s de 600 huevos los que han eclosionado, aunque el n¨²mero definitivo de polluelos torrevejenses solo se podr¨¢ calcular una vez que mayores y peque?os abandonen el lugar.

Seg¨²n los especialistas, la fase de puesta e incubaci¨®n, el desarrollo de la nidada, la eclosi¨®n de los huevos y el crecimiento de los nuevos ejemplares est¨¢ teniendo lugar sin ning¨²n problema. Salvo, quiz¨¢, el del car¨¢cter huidizo del flamenco, al que no le gustan las incursiones del ser humano en su terreno. Y menos, cuando hay toda una chiquiller¨ªa de cientos de polluelos a los que hay que alimentar sin descanso.

El Parque Natural de las lagunas de Torrevieja-La Mata est¨¢ formado por m¨¢s de 2.000 hect¨¢reas de l¨¢minas de agua, enclavadas entre los t¨¦rminos de Guardamar del Segura, Rojales, Los Montesinos y Torrevieja. Lugar habitual de paseo para turistas y residentes, habilitado con rutas de senderismo y centros de esparcimiento y protegido del urbanismo que domina el otro lado de la carretera que lo circunda, cuenta con un n¨²mero considerable de construcciones desde las que se pueden observar las especies de aves acu¨¢ticas que las frecuentan. Aunque la estampa ic¨®nica de los flamencos los convierte en las grandes estrellas de la funci¨®n medioambiental.