Israel extrema el confinamiento tras dispararse los contagios de covid en el ¨²ltimo mes

Israel se aproxima ¡°al borde del abismo¡±, seg¨²n reconoce el primer ministro, Benjam¨ªn Netanyahu, despu¨¦s de haberse duplicado en el ¨²ltimo mes el n¨²mero de casos de covid-19 hasta alcanzar los 200.000. El Gobierno ha decidido este jueves endurecer el confinamiento general en vigor desde hace una semana e imponer, al menos hasta el 10 de octubre, restricciones m¨¢s estrictas que las aplicadas en primavera durante la primera ola de la pandemia. El sistema sanitario, que est¨¢ a punto de verse desbordado por la presi¨®n asistencial, registra en los dos ¨²ltimos d¨ªas cerca de 7.000 positivos diarios por coronavirus en un pa¨ªs de nueve millones de habitantes.

La segunda ola de la pandemia atraviesa el umbral del oto?o con una orden de clausura redoblada en Israel. ¡°Hemos tenido que echar el freno de emergencia¡±, admite el viceministro de Sanidad, Yoav Kisch. Tras una reuni¨®n de m¨¢s de ocho horas del gabinete de crisis, el Gobierno israel¨ª ha ratificado el confinamiento reforzado a pesar de que amenaza con causar un impacto estimado en m¨¢s de 8.500 millones de euros sobre la maltrecha econom¨ªa local. Solo un 27% de los israel¨ªes aprueba la gesti¨®n de la crisis por el Ejecutivo de Netanyahu, de acuerdo con un sondeo del Instituto para la Democracia.

A falta de la aprobaci¨®n final por la Kneset (Parlamento), las nuevas restricciones ser¨¢n efectivas a partir de las dos de la tarde del viernes, poco antes del inicio del sabbat, y en v¨ªsperas del Yom Kipur o D¨ªa del Arrepentimiento, jornada sagrada jud¨ªa en la que se paraliza la actividad en Israel.

El l¨ªmite de mil metros en torno a la vivienda de los ciudadanos solo podr¨¢ traspasarse a partir de ahora para compras o servicios esenciales. La posibilidad de desplazarse por razones de trabajo se ve tambi¨¦n limitada por la suspensi¨®n de la actividad en la mayor parte del sector privado y en los centros p¨²blicos.

La oposici¨®n de centroizquierda ha acusado a Netanyahu de haber intensificado las restricciones para impedir de hecho las manifestaciones de protesta en su contra. Pese al confinamiento general, unas 10.000 personas se congregaron el pasado fin de semana ante la residencia oficial del primer ministro en Jerusal¨¦n para exigir su dimisi¨®n tras haber sido procesado por corrupci¨®n. Desde hace m¨¢s de tres meses, las marchas y concentraciones de protesta han ido creciendo en paralelo al descontento social por la gesti¨®n gubernamental de las crisis sanitaria y econ¨®mica. A partir de ahora solo ser¨¢ posible manifestarse en grupos de hasta 20 personas y dentro de un radio de un kil¨®metro del domicilio habitual.

Los mercados al aire libre, el comercio en general, los centros de educaci¨®n especial que a¨²n segu¨ªan abiertos y, previsiblemente, el aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv cerrar¨¢n sus puertas mientras el transporte p¨²blico se ver¨¢ sensiblemente reducido.

Las sinagogas y dem¨¢s lugares de culto tambi¨¦n van a ser clausurados temporalmente, aunque en una concesi¨®n a los partidos ultrarreligiosos que sostienen la coalici¨®n de Netanyahu, se permitir¨¢ con limitaciones de aforo el tradicional rezo de Yom Kipur. Las poblaciones y distritos con mayor¨ªa de jud¨ªos ultraortodoxos figuran entre las m¨¢s afectadas por la pandemia.

Golpe al sistema sanitario

La elevada tasa de infecciones, que este mi¨¦rcoles lleg¨® a 531,6 por mill¨®n de habitantes en siete d¨ªas ¨Dfrente a los 199,3 de hace tres semanas¨D ha golpeado adem¨¢s al sistema sanitario. Algunos hospitales de Jerusal¨¦n y el norte del pa¨ªs, como en Haifa, se encuentran ya por encima del 100% de su capacidad de admisi¨®n de enfermos graves de covid-19, con 657 casos a escala nacional, de los que 161 precisan de respiradores.

Con una media de poblaci¨®n m¨¢s joven que en Europa, Israel solo ha contabilizado 1.325 muertes desde la declaraci¨®n oficial de la pandemia en marzo. Las ¨®rdenes de cuarentena se han disparado mientras tanto entre el personal sanitario, al pasar de 3.157 el lunes a 4.331 el mi¨¦rcoles, entre ellas para un millar de enfermeros y cinco centenares de m¨¦dicos, seg¨²n datos del Ministerio de Sanidad recopilados por el diario Haaretz.

Las grandes celebraciones jud¨ªas del oto?o, que van desde A?o Nuevo a Sukot o Fiesta de los Tabern¨¢culos, se est¨¢n viendo ensombrecidas este a?o por la segunda oleada del coronavirus. Tras el relativo ¨¦xito en la contenci¨®n de la primera ola, el Gobierno de Netanyahu aceler¨® al m¨¢ximo la desescalada en un intento de resucitar la econom¨ªa, que se desplom¨® un 28% en el segundo trimestre de a?o. Ahora el Estado jud¨ªo paga el precio de sufrir una de las m¨¢s altas tasas de contagio per c¨¢pita del mundo, y el Banco de Israel maneja ya su escenario m¨¢s pesimista: no prev¨¦ una recuperaci¨®n econ¨®mica mientras no est¨¦ disponible una vacuna efectiva para la covid-19. Israel entra de facto en situaci¨®n de estado alarma.