Espa?a es el tercer pa¨ªs de Europa con m¨¢s mortalidad por el virus desde julio
Solo Rumania y la Rep¨²blica Checa tienen m¨¢s fallecidos por habitante. La llegada temprana de la segunda ola dibuja una curva que llegar¨ªa a Navidad con unas 8.000 muertes oficiales m¨¢s
Espa?a suma solo desde julio 7.100 fallecimientos oficiales por coronavirus, lo que supone 15 muertos por cada 100.000 habitantes. Esta tasa la sit¨²a como el tercer pa¨ªs con peores datos de Europa. Alemania registra 10 veces menos fallecidos e Italia apenas un tercio. Portugal (8), Francia (9) y B¨¦lgica (12) son los pa¨ªses del entorno europeo que m¨¢s se acercan. Adem¨¢s, Espa?a ha notificado esta semana 150 fallecidos diarios por covid-19, lo que convierte esta enfermedad en la principal causa de muerte.
Los ¨²nicos dos pa¨ªses que superan a Espa?a en la tasa de muertos por coronavirus son Rumania y la Rep¨²blica Checa ¡ªque impuso unas medidas m¨¢s o menos r¨ªgidas dependiendo de las ciudades, por ejemplo, en las m¨¢s golpeadas como Praga hubo confinamiento domiciliario¡ª, pero sufrieron menos la primera ola con un n¨²mero de muertes de marzo a junio relativamente bajo. Con las cifras de fallecidos es necesario tener cautela, porque la informaci¨®n que transmite Espa?a a las instituciones europeas proviene de los sistemas de informaci¨®n del Ministerio de Sanidad, que ha tenido constantes problemas de retraso e infranotificaci¨®n. Por ejemplo, su cuenta de fallecidos es un 30% inferior a la que publican las comunidades aut¨®nomas.
Incluso as¨ª, Espa?a ha superado esta semana la media de 150 muertes diarias, oficiales y confirmadas con pruebas diagn¨®sticas. Es la misma media diaria de fallecidos que provoc¨® el conjunto de todas las enfermedades del sistema respiratorio en 2019, y 10 veces m¨¢s que los accidentes de tr¨¢fico en 1996, que fue de los peores a?os de la serie hist¨®rica. Si el ritmo no baja, en Navidad se sumar¨¢n unas 8.000 muertes m¨¢s.
La segunda ola no ha golpeado a toda Europa al mismo tiempo. En Espa?a fue m¨¢s temprana. En Francia o Italia los casos se dispararon hace dos o tres semanas. Lo normal es que las cifras de fallecidos sigan subiendo ¡ªsuelen pasar unas semanas desde que repuntan los casos hasta que lo hacen los ingresos hospitalarios y luego las muertes¡ª. Ambos pa¨ªses est¨¢n intentando evitarlo, con un confinamiento r¨ªgido, el primero; y con el cierre de los lugares de ocio a las seis de la tarde, el segundo. En el siguiente gr¨¢fico se ve esta evoluci¨®n, a trav¨¦s de las curvas de 16 pa¨ªses (en rojo) y de la media europea (en gris).
La curva de Espa?a sigue un patr¨®n algo distinto a la mayor¨ªa de pa¨ªses. En agosto, los casos crecieron m¨¢s r¨¢pido que en ning¨²n otro territorio y a principios de septiembre Madrid ten¨ªa la incidencia m¨¢s alta del continente. Pero despu¨¦s hubo un descenso en la capital y una meseta a escala nacional, justo cuando el virus avanzaba en Francia o B¨¦lgica. Se ha especulado con el efecto de las primeras restricciones y tambi¨¦n del miedo: quiz¨¢s los malos datos de agosto hicieron que los espa?oles fuesen m¨¢s cautos en septiembre. Pero tambi¨¦n puede influir el clima: si el fr¨ªo y el aumento de la vida en interiores est¨¢ detr¨¢s del repunte en Europa, no es una sorpresa que el clima c¨¢lido espa?ol haya retrasado esos efectos. La situaci¨®n ahora es que desde octubre tanto los casos como los ingresos y las muertes han vuelto a repuntar muy deprisa en Espa?a: los positivos y las llegadas a los hospitales pr¨¢cticamente se han multiplicado por dos.
La letalidad del virus
La tabla anterior tambi¨¦n recoge los datos de letalidad m¨¢s b¨¢sica. Es lo que se llama letalidad CFR bruta (case fatality ratio, es decir ratio de casos por fallecidos) y representa el n¨²mero de muertes por cada caso confirmado. Esta cifra ronda el 0,8% tomando los n¨²meros desde julio. Es decir, que por cada 100 casos conocidos, ha fallecido casi una persona. La letalidad de Espa?a es ligeramente peor que la media. Hay pa¨ªses peores, como Rumania, Bulgar¨ªa o Hungr¨ªa, donde es probable que muchos casos sigan sin detectarse. Pero al contrario de lo que ha repetido el portavoz del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Sim¨®n, no estamos al nivel de Alemania, donde solo un 0,4% de los casos conocidos han fallecido en estos meses. Estas cifras son una aproximaci¨®n: la letalidad CFR aumentar¨¢, porque una parte de los contagios recientes todav¨ªa no han tenido tiempo de producir el fallecimiento de los enfermos. Y tambi¨¦n porque las muertes se notifican a menudo con m¨¢s retraso que los contagios.
Adem¨¢s es importante distinguir entre letalidad por casos confirmados (CFR) y por infectado (IFR). La segunda es la m¨¢s interesante: ?qu¨¦ porcentaje de las personas infectadas acaban falleciendo? Conocer esta cifra exige saber cu¨¢ntas infecciones hay sin detectar, porque son asintom¨¢ticas o personas que no acuden al m¨¦dico. Esta semana se publicaba un estudio minucioso del Imperial College que estima la letalidad IFR en los pa¨ªses ricos para la primera ola. Creen que el virus habr¨ªa matado alrededor del 1,1% de los infectados. Eso teniendo en cuenta, con estudios de serolog¨ªa, los contagios no detectados. El mismo trabajo recuerda que el IFR de la gripe es al menos diez veces inferior y no llega al 0,1%, con datos de Estados Unidos.
Grandes diferencias por comunidades
Las diferencias de mortalidad desde el verano tambi¨¦n son importantes entre comunidades aut¨®nomas. Arag¨®n tuvo una segunda ola temprana, con brotes que empezaron en julio entre trabajadores del campo. La incidencia dej¨® de crecer despu¨¦s, pero nunca ha bajado realmente y las muertes se han ido sucediendo durante meses. Tiene la peor mortalidad desde julio: 54 muertes por 100.000 habitantes. Casi dobla las cifras en Castilla y Le¨®n (32), Madrid (30), La Rioja (29), Navarra (26) o Pa¨ªs Vasco (23). En el extremo contrario est¨¢n Canarias, Cantabria o La Comunidad Valenciana, donde las muertes son cuatro o cinco veces menos.
Por ¨²ltimo, hay que recordar que las cifras oficiales de muertes confirmadas por coronavirus solo reflejan una parte del impacto de la pandemia. Primero, por los problemas de notificaci¨®n ya mencionados. El caso m¨¢s extremo es Catalu?a: ha informado al ministerio de 306 muertes por covid confirmadas por PCR desde julio, es decir solo un 20% de las 1.400 que cuenta como ¡°sospechosas de covid¡±, cifra que seguramente es m¨¢s precisa porque coloca su letalidad en l¨ªnea con el resto de regiones europeas.
El otro dato clave son las cifras de fallecidos seg¨²n los registros civiles, lo que se conoce como el exceso de muertes. Durante la segunda ola, esos registros ¡ªseg¨²n informa el INE¡ª han observado 13.000 muertes m¨¢s que el a?o pasado y los anteriores. Esa cifra incluye muertes por covid que la estad¨ªstica oficial ha pasado por alto, pero tambi¨¦n el probable aumento de muertes por otras patolog¨ªas, de personas que no se han diagnosticado en estos meses de crisis o que han recibido un peor tratamiento. Son igualmente muertes an¨®malas, que no cabe atribuir a la enfermedad covid-19, pero s¨ª a la crisis sanitaria que ha provocado el virus.
Informaci¨®n sobre el coronavirus
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