Los molinos que tiramos entre todos

Entre las cientos de cajas que cargaron parte de las 150 toneladas de materiales sanitarios que Telef¨®nica trajo desde China para donarlas a Sanidad destacaba la imagen de un Quijote abrazando a una enfermera. El dibujo, que termin¨® dando vueltas por todas las redes sociales, pertenece a Niko G¨®mez, el creador de C¨¢lico Electr¨®nico, la primera webserie espa?ola, que en 2004 se abri¨® paso en el entorno digital cuando no exist¨ªan Facebook ni Twitter. ¡°Como Don Quijote, C¨¢lico Electr¨®nico no tiene superpoderes¡±, explica G¨®mez sobre el protagonista de su saga m¨¢s exitosa, que limpiaba en unas oficinas y que para atacar y defenderse utilizaba artefactos que consegu¨ªa en la tienda ElectronicaWeb. ¡°Son antih¨¦roes, humildes, movidos por hacer el bien¡±, reflexiona. Y son los que m¨¢s gustan en Espa?a. Nada de Supermanes. No se comparan con aquellos que cada d¨ªa a las ocho de la tarde desde hace dos meses son aplaudidos desde los balcones. ¡°Estos son h¨¦roes reales¡±, advierte G¨®mez. ¡°Un¨ª al Quijote con una enfermera para mostrarles nuestro agradecimiento, para arroparlos a trav¨¦s de un abrazo¡±, explica al tel¨¦fono desde Barcelona, donde vive desde los cinco a?os, cuando sus padres regresaron de Suiza por motivos laborales.

En 2004, G¨®mez (Lausana, Suiza, 1973) cre¨® C¨¢lico Electr¨®nico y fue consciente del ¨¦xito de la saga cuando, seis meses despu¨¦s de su lanzamiento, lo invitaron a una proyecci¨®n de sus episodios en una sala de cine por el festival Animadrid. Hab¨ªa inventado algo digital, lo que ahora los expertos en contenido llaman nativo. Su primer episodio tuvo 5.000 visualizaciones, pero fue solo cuando vio las reacciones del p¨²blico en carne y hueso cuando se dio cuenta de lo que hab¨ªa logrado. ¡°Los ve¨ªa re¨ªr, algunos se ca¨ªan de la silla. Me di cuenta de c¨®mo reaccionaba la gente. Por aquel entonces no exist¨ªan ni Facebook ni YouTube y no pod¨ªa ver los comentarios de la gente¡±.

Su carrera lo llev¨® a Telef¨®nica, donde trabaja hace casi dos temporadas. Desde marzo est¨¢ en el equipo de contenidos digitales y storytelling del ¨¢rea de Comunicaci¨®n Interna. El 12 de marzo, la empresa le encomend¨® un dibujo para homenajear en sus redes sociales con el hashtag #GraciasH¨¦roes al personal sanitario que, por entonces, ya luchaba minuto a minuto contra la covid-19. El primero fue, por idea de un compa?ero, con el oso de Madrid, porque era la zona m¨¢s afectada en los primeros d¨ªas de marzo, pero luego lo reconvirti¨® en un Quijote porque quer¨ªa representar a toda Espa?a. ¡°Es una ilustraci¨®n simb¨®lica. No es un se?or disfrazado de caballero sino algo m¨¢s parecido a una estatua de bronce porque nos representa a todos. El Quijote es el antih¨¦roe por completo, est¨¢ un poquito loco¡±, dice G¨®mez. Le causa gracia que ese hero¨ªsmo se traslade a toda la sociedad: ¡°Lo ¨²nico que nos piden es quedarnos en casa¡±.

Su dibujo sirvi¨® tambi¨¦n para inspirar a las 10 ¨¢reas de Telef¨®nica que trabajaron coordinadamente en esos d¨ªas para conseguir material sanitario en China, mientras cientos de pa¨ªses intentaban lo mismo, y traerlo a Espa?a. ¡°Hemos sido capaces de identificar una oportunidad, validar el producto con las autoridades sanitarias, evaluar los riesgos del proveedor, generar contratos y comprar en menos de 24 horas¡±, explican desde la compa?¨ªa. A mediados de abril recibieron uno de los pedidos m¨¢s importantes: 52 respiradores invasivos para las UCI. Ahora est¨¢n centrados en conseguir, ya a trav¨¦s de fabricantes espa?oles, los tests PCR, tan necesarios para la detecci¨®n del virus.

¡°Los sanitarios son los m¨¢s emblem¨¢ticos, pero las fuerzas de seguridad, los empleados de los servicios esenciales y muchos otros est¨¢n representados en mi dibujo¡±, explica G¨®mez. El Quijote los abraza a todos en un momento en el que #seguimosconectados: tal vez conseguir 150 toneladas de mascarillas en un mercado colapsado es m¨¢s dif¨ªcil que tumbar un molino con una lanza.