Un hombre con cuatro condenas por maltrato podr¨¢ visitar a sus hijos
Un juez suspende cuatro penas de 1 a?o y 9 meses a un condenado por violencia ¡°habitual¡± contra su exmujer y sus tres hijos y los cambia por trabajos para la comunidad. La exesposa pide que lo alejen de los ni?os hasta su mayor¨ªa de edad
Dice Paloma Delgado que ella y sus tres hijos empezaron ¡°a vivir¡± en abril de 2019, cuando su exmarido y padre de los chicos se qued¨® sin derecho a visitas por una sentencia del Juzgado Penal 1 de Huesca que le castig¨® con cuatro condenas de un a?o, nueve meses y un d¨ªa cada una por ¡°maltrato habitual¡±, una por ella y otra por cada uno de los tres menores. Delgado crey¨® entonces que ¡°el terror¡± hab¨ªa terminado para siempre, pero a¨²n quedaban por delante giros en el camino judicial que han llevado a que el condenado no entre en prisi¨®n y pueda volver a visitar a sus hijos a finales del a?o que viene.
El exmarido, Luis Antonio Irzo, recurri¨® la sentencia a la Audiencia Provincial, que ratific¨® las condenas. Acudi¨® despu¨¦s al Tribunal Supremo, que tampoco le dio la raz¨®n y subray¨® que la pena impuesta era ¡°la m¨ªnima legal imponible¡±. En noviembre de 2020, el juzgado de lo penal 1 de Huesca decidi¨® suspender las cuatro condenas. No ir¨ªa a prisi¨®n a cambio de seguir un curso formativo en violencia de g¨¦nero y 510 d¨ªas de trabajos en beneficio de la comunidad. Esa decisi¨®n ha dejado sin efecto la obligaci¨®n de estar al menos a 200 metros de la exmujer y los ni?os y anula la prohibici¨®n de las visitas desde diciembre de 2022. El hombre recuperar¨¢ la patria potestad en 2025 y no podr¨¢ tener armas hasta 2033.
¡°No puede ejercer como padre sin m¨¢s¡±
Delgado pide que los menores no tengan contacto con el padre hasta que todos alcancen la mayor¨ªa de edad. ¡°Un progenitor que ha sido condenado por maltrato no puede ejercer como padre sin m¨¢s¡±, reclama esta mujer, que asegura que ha pedido amparo sin ¨¦xito al Defensor del Pueblo, al Justicia de Arag¨®n (equivalente al defensor, pero auton¨®mico), al Defensor del Menor y al Consejo General del Poder Judicial. Tambi¨¦n recoge firmas en Change.org y ha contado su caso p¨²blicamente en televisi¨®n.
El recorrido judicial arranc¨® en 2016, cuando ella, m¨¦dica de familia, denunci¨® ante la polic¨ªa a su entonces marido, que en ese momento ejerc¨ªa como concejal del PP de Huesca, cargo del que dimiti¨® en ese mismo a?o. La sentencia recoge como hechos probados que los tres menores ¡ªun chico y dos chicas que ahora tienen 16, 14 y 10 a?os¡ª sufrieron ¡°actos de violencia f¨ªsica y verbal y de intimidaci¨®n constante¡±. El fallo sit¨²a el inicio de la violencia casi desde que se casaron. Ella le comunic¨® en septiembre de 2004, apenas dos meses despu¨¦s de la boda, que estaba embarazada. ?l quiso cont¨¢rselo a la familia y ella le pidi¨® que esperase hasta tenerlo bien confirmado. ¡°Se enfad¨® y la zarande¨® repetidamente llev¨¢ndola a empujones desde el sal¨®n hasta el dormitorio¡±, recoge la sentencia. Cuando dio a luz a su primer hijo, el marido le dijo: ¡°Te has deformado durante el embarazo, te doy nueve meses m¨¢s para que te recuperes¡±. En el momento en el que ella se neg¨® a seguir manteniendo relaciones sexuales, recoge tambi¨¦n la sentencia, ¡°le imped¨ªa dormir de forma intencionada, zarandeando la cama para evitar que su esposa descansase¡±.
Sometidos a ¡°un clima de dominaci¨®n¡±
La mujer empez¨® a grabar en 2015. Aport¨® m¨¢s de 18 horas de grabaciones. ¡°Fueron imprescindibles, sin esas grabaciones no habr¨ªa tenido ninguna posibilidad, solo con mi palabra no iba a valer¡±, valora Delgado en conversaci¨®n telef¨®nica con este peri¨®dico. ¡°Comenc¨¦ a grabar cuando ca¨ª enferma. Desde que empezaba a o¨ªr golpes lo grababa con el m¨®vil escondido, la calidad era escasa, pero pensaba que si iba acumulando podr¨ªa mostrar la situaci¨®n que ten¨ªamos en casa¡±. La Audiencia Provincial destac¨® adem¨¢s ¡°las contundentes declaraciones de las cuatro v¨ªctimas¡±. Los hechos probados recogen que Luis Antonio Irzo somet¨ªa a sus hijos ¡°a un clima de dominaci¨®n, menosprecios, insultos y constante agresividad, haci¨¦ndolos objeto de actos de violencia f¨ªsica y verbal y de intimidaci¨®n constante que exced¨ªan ampliamente el del derecho de correcci¨®n¡±. Al mayor le inflig¨ªa castigos ¡°totalmente desproporcionados¡±, seg¨²n los hechos probados que recogen tambi¨¦n que, en ocasiones, ¡°lo agarraba por el pelo llegando a levantarlo en el aire¡±. Cuando el ni?o ten¨ªa siete a?os, le golpe¨® tras haberse equivocado en una nota ¡°haci¨¦ndole sangrar por la nariz y por el labio¡±. El padre le dec¨ªa: ¡°Mira lo que me has obligado a hacer, esto te lo he hecho por tu culpa¡±. A la mediana, la pon¨ªa de rodillas contra la pared y con los brazos en cruz. La oblig¨® a comerse la comida que ¡°hab¨ªa vomitado¡±. A la peque?a la golpeaba en la espalda o en el culo cuando no quer¨ªa comer o le met¨ªa la cabeza en el plato.
Tras conocer la ¨²ltima decisi¨®n del juzgado penal, el cambio de la c¨¢rcel por trabajos a la comunidad, Paloma Delgado recurri¨®. El fiscal apoy¨® al juez en su decisi¨®n de que no fuera a prisi¨®n, pero pidi¨® que se mantuviera durante 16 a?os ¡ªel resultado de sumar todas las penas accesorias¡ª tanto la prohibici¨®n de aproximarse y comunicarse con la mujer y los ni?os como el derecho a visitas. El ministerio p¨²blico a?adi¨® que se tuviera en cuenta un informe del Instituto de Medicina Legal de Arag¨®n (IMLA) que recoge que esas visitas ¡ªque se prolongaron hasta 2019 y que los menores estaban obligados a hacer por separado seg¨²n la madre¡ª, ¡°supon¨ªan un estado de ansiedad poco beneficioso¡± para ellos. La Audiencia Provincial rechaz¨® la petici¨®n el pasado 16 de julio con una resoluci¨®n que considera que no se pueden sumar esas penas accesorias. Ya es una decisi¨®n en firme: el hombre puede acercarse ya a sus hijos y podr¨¢ visitarlos desde diciembre del a?o que viene.
El exmarido, Luis Antonio Irzo, ha se?alado a este peri¨®dico, a trav¨¦s de su abogado, que ¡°en su d¨ªa ten¨ªa confianza en la justicia, ya no¡±. El hombre sostiene que su exmujer ha utilizado ¡°espuriamente¡± la ley integral de violencia de g¨¦nero y lamenta ¡°profundamente¡± no haber tenido ¡°derecho a un juicio justo¡±. ¡°Reconoce haber cometido exclusivamente con su hijo mayor alg¨²n error en un exceso por corregirle comportamientos o conductas inadecuadas y lo lamenta¡±, traslada su letrado, Gustavo Gal¨¢n. ¡°Pero ¨¦l no es ning¨²n maltratador, ni mucho menos habitual, por mucho que lo digan los tribunales de justicia, porque los tribunales tambi¨¦n se equivocan¡±.
¡°?Qu¨¦ hay que hacer para superar el m¨ªnimo?¡±
¡°La aplicaci¨®n del C¨®digo Penal ni ha sido correcta ni resulta admisible¡±, valora Francisco Javier ?lvarez Garc¨ªa, catedr¨¢tico de Derecho Penal de la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M). ?lvarez destaca ¡°lo ins¨®lito¡± de que el juez impusiera el m¨ªnimo de pena posible con unos hechos probados ¡°tan contundentes¡±. ¡°Si en un supuesto en el que el acusado ha golpeado durante a?os a la mujer y a los hijos y ha convertido su casa en un infierno, se impone el m¨ªnimo de la pena, ?qu¨¦ se debe hacer para llegar a superar ese m¨ªnimo?¡± Pero todav¨ªa es m¨¢s sorprendente que se haya dejado en suspenso la ejecuci¨®n de la pena privativa de libertad. ¡°Es cierto que, excepcionalmente, cabe esa posibilidad, pero solo de manera extraordinaria¡±, a?ade este especialista. ¡°Y lo que ya no se entiende es que el fiscal se haya unido a la petici¨®n de esa suspensi¨®n, pues choca con los criterios que la Fiscal¨ªa de Violencia viene sosteniendo¡±.
La sentencia ¡°ha terminado en nada, absolutamente en nada¡±, considera Paloma Delgado. Con todo, asegura que volver¨ªa a repetir el proceso judicial: ¡°Estamos hablando de salvar la vida de los ni?os. Hay que saber la situaci¨®n en la que est¨¢bamos para entender que esto ha compensado a pesar de todo¡±. Se ha sentido cuestionada a lo largo del proceso: ¡°Desde que denuncias, eres t¨² la juzgada y ves c¨®mo hay un intento desesperado para descubrir d¨®nde est¨¢ el fin maquiav¨¦lico, d¨®nde te pueden pillar¡±.
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