¡°Esta podr¨ªa ser la ¨²ltima ola del virus si lo hacemos bien¡±

Elena Vanessa Mart¨ªnez (Madrid, 47 a?os) est¨¢ al frente de la Sociedad Espa?ola de Epidemiolog¨ªa (SEE). Trabaja en la Direcci¨®n General de Salud P¨²blica del Ministerio de Sanidad, pero aclara que habla como presidenta de la SEE, cargo que asumi¨® en plena pandemia, el pasado oto?o, cuando Espa?a se sumerg¨ªa en la segunda ola de coronavirus. Ahora, el pa¨ªs va por la quinta.

Pregunta. Espa?a va por el quinto envite del virus. ?C¨®mo se ha llegado hasta aqu¨ª?

Respuesta. No hemos llegado a cumplir las medidas preventivas que ten¨ªamos que ir tomando en cada momento. Desde el principio de la pandemia, las medidas se han cumplido a rajatabla en los momentos en los que hab¨ªa muchos casos, y cuando esas medidas hac¨ªan efecto y parec¨ªa que est¨¢bamos con menos transmisi¨®n se han levantado restricciones demasiado r¨¢pido y al mismo tiempo.

P. ?La vuelta del p¨²blico a los eventos deportivos con aforos reducidos es buena idea en este momento?

R. A nivel te¨®rico es correcto, los aforos son aceptables manteniendo una distancia de una silla, estando al aire libre y sin permitir comer o beber y asegurando el uso de mascarilla. Pero hay un problema, sobre todo en los estadios m¨¢s grandes, donde va a suponer un movimiento de miles de personas, que puede provocar concentraciones en aleda?os donde las medidas no se cumplan. Ah¨ª es donde se corre un riesgo que con las incidencias actuales no es para nada deseado. Ya hemos comprobado el resultado de los conciertos en Barcelona, donde se ha puesto de manifiesto que las condiciones ideales no corresponden con las condiciones reales, provocando una gran cantidad de casos tras los mismos.

P. Llevamos ya cinco olas. ?Por qu¨¦ el virus siempre va por delante?

R. Es un virus nuevo, que no conocemos exactamente. Todo lo que hemos ido haciendo y las recomendaciones han sido en funci¨®n de lo que se conoc¨ªa de ¨¦l. Se intentaba asimilar el conocimiento que se ten¨ªa de otros tipos de coronavirus a que este virus se pod¨ªa comportar igual. Pero no siempre ha sido as¨ª. Todos los virus realizan cambios, como las nuevas variantes. En general, este coronavirus no muta tanto como el de la gripe, pero todav¨ªa tenemos que ir aprendiendo y, sobre todo, el organismo, que no hab¨ªa estado expuesto nunca a ¨¦l.

P. Los epidemi¨®logos tambi¨¦n han errado en sus previsiones y recomendaciones. ?Se les ha quedado grande a ustedes tambi¨¦n?

R. Siempre actuamos dentro de un marco de incertidumbre, y en este caso, era muy amplio. Una de las cosas que ha pasado es que no se entend¨ªa que ahora se recomendaba una cosa y ma?ana otra. Nosotros estamos acostumbrados a que cambiamos la actitud y la recomendaci¨®n en funci¨®n de los conocimientos que tienes. Y eso desde fuera se ha visto como una falta de coherencia. Uno de los grandes errores es que igual habr¨ªa que haber empezado a actuar antes en el inicio, pero creo que nadie se pod¨ªa imaginar que iba a llegar a tal magnitud. El trabajo que hay que hacer ahora es detectar cu¨¢les han sido los errores. Los que detectas en el momento son los que corriges. Pero seguro que hay alguno m¨¢s que habr¨ªa que intentar analizar para tenerlos en cuenta en futuras pandemias que nos puedan venir.

P. ?Qu¨¦ es lo que no hemos aprendido?

R. El problema es que cada uno ve la pandemia desde su propio punto de vista y es muy dif¨ªcil ponerte en la piel de otra persona. Tu percepci¨®n es totalmente diferente. Conjugarlo todo es muy dif¨ªcil.

P. ?Qu¨¦ se prev¨¦ para las pr¨®ximas semanas?

R. La evoluci¨®n est¨¢ siendo buena. Est¨¢n empezando a tener efecto las medidas y aumentan las personas con vacunaci¨®n completa que hacen que al virus le sea m¨¢s dif¨ªcil poder transmitirse. Ahora mismo no bajamos de forma acelerada, pero s¨ª constante, as¨ª que hay que mantener la guardia y empezar a hacer hincapi¨¦ en dos puntos en los que puede estar escap¨¢ndose: se est¨¢n empezando a ver brotes en residencias donde los mayores est¨¢n vacunados y en muchos casos se debe a que el personal sociosanitario que trabaja all¨ª no estaba correctamente vacunado. Hay que hacer hincapi¨¦ en que este personal tiene que estar 100% vacunado para poder proteger a los mayores.

P. ?Es partidaria de una vacunaci¨®n obligatoria en sanitarios y personal de residencias de ancianos, como proponen algunas comunidades?

R. La experiencia ya nos ha demostrado que la obligatoriedad no garantiza coberturas vacunales mejores. Espa?a tiene de las mejores coberturas vacunales en enfermedades inmunoprevenibles, incluso por encima de pa¨ªses donde s¨ª es obligatoria la vacunaci¨®n. Lo que s¨ª ha demostrado que mejora las coberturas es una buena informaci¨®n a la ciudadan¨ªa sobre los beneficios y riesgos de la vacuna. Es cierto que en el caso de personal sanitario o personal que atiende a personas vulnerables es a¨²n m¨¢s importante que todos est¨¦n vacunados. Pero creo que ser¨ªa mucho mejor conseguir esa vacunaci¨®n entendiendo la raz¨®n de su rechazo y as¨ª poder conseguir informarles mejor.

P. ?Ser¨¢ esta la ¨²ltima gran ola?

R. Estar¨ªa bien [r¨ªe]. Hay que tener precauci¨®n. No nos debe volver a pasar lo de pensar que hemos llegado al final de la pandemia. Podr¨ªa ser la ¨²ltima ola si lo hacemos bien.

P. Lo del 70% vacunado para lograr la inmunidad de grupo ya ha quedado obsoleto con la variante delta. Pero ?se llegar¨¢ a alcanzar una inmunidad de grupo real o conviviremos con el virus?

R. Todav¨ªa hay cosas que desconocemos. Todav¨ªa no sabemos hasta cu¨¢ndo dura la inmunidad, tanto la producida por la infecci¨®n como la de la vacuna. Sabemos que es duradera. Si es as¨ª y no existen variantes que pueden escapar a esa inmunidad, probablemente se nos quedar¨¢ como un virus m¨¢s estacional.

P. ?Ser¨¢ precisa una tercera dosis?

R. Ahora mismo, con lo que conocemos, no parece necesaria. La vacuna confiere una gran inmunidad y duradera. Aunque s¨ª que es verdad que se ha visto que, a lo mejor, podr¨ªa ser posible en determinados pacientes inmunodeprimidos en los que s¨ª parece que con dos dosis no se llega a unos niveles de anticuerpos suficientes.

P. Para los ni?os no hay vacunas todav¨ªa. ?Pueden acabar siendo reservorios del virus?

R. Evidentemente, se transmitir¨¢ entre ellos, pero si la inmunidad que produce la enfermedad es lo suficientemente fuerte como la de la vacuna, se inmunizar¨¢n autom¨¢ticamente en la primera infecci¨®n. El virus probablemente seguir¨¢ circulando porque siempre habr¨¢ alguien que tenga falta de inmunidad. En realidad, el problema de los m¨¢s peque?os es, primero, que hay que tener la vacuna y luego estudiar los riesgos y beneficios. Con respecto a la gravedad es mucho menos severa, pero pueden tener efectos secundarios como la covid persistente, que tambi¨¦n es valorable.

P. ?Esto nos lleva a asumir que conviviremos con el virus?

R. Con todas las enfermedades, cuando se habla de inmunidad de grupo se trata de proteger a las personas vulnerables. No cortas la transmisi¨®n, si no, hubi¨¦ramos erradicado m¨¢s enfermedades y en el mundo solo hemos erradicado una [la viruela]. Habr¨¢ que ver c¨®mo se comporta el virus. Igual con suficiente inmunidad en la poblaci¨®n es incapaz de ni siquiera transmitirse y aparecen solo casos espor¨¢dicos. No podemos preverlo.

P. ?Cu¨¢les son las grandes inc¨®gnitas del virus?

R. Hay un gran camino por aprender de la covid persistente, qu¨¦ consecuencias puede tener a largo plazo. Se ha avanzado mucho en el conocimiento de la enfermedad y el tratamiento, pero todav¨ªa no se ha encontrado una terapia eficaz, que hubiese sido otra arma muy decisiva para combatir el virus. A nuestro nivel [como epidemi¨®logos], nos queda por aprender del comportamiento del virus, la forma que tiene de trasmisi¨®n y los cambios que se pueden producir en funci¨®n de los cambios del entorno.

P. ?C¨®mo repercutir¨¢ la pandemia en la patolog¨ªa no covid?

R. Lo primero que hay que hacer es estudiarlo. Hay que medir cu¨¢l ha sido el efecto, la cantidad de gente que no ha acudido al m¨¦dico. Se necesita un buen diagn¨®stico para poner las herramientas para paliarlo lo antes posible.