Teolog¨ªa para transformar el mundo

Pablo Richard, uno de los te¨®logos y biblistas latinoamericanos de la liberaci¨®n m¨¢s reconocidos en Am¨¦rica Latina y a nivel mundial, falleci¨® el lunes en San Jos¨¦ de Costa Rica a los 81 a?os. Ten¨ªa una excelente formaci¨®n interdisciplinar. Estudi¨® Filosof¨ªa en Austria, Teolog¨ªa en Chile, Sagradas Escrituras en el Instituto B¨ªblico de Roma y en la Escuela B¨ªblica de Jerusal¨¦n y Sociolog¨ªa en la Sorbona de Par¨ªs, donde en 1978 obtuvo el doctorado con una tesis sobre la muerte de las cristiandades y el nacimiento de la Iglesia que marc¨® sus futuras investigaciones, sus opciones pol¨ªticas liberadoras y sus pr¨¢cticas eclesiales como miembro y animador de las comunidades de base.

Era un profundo conocedor del marxismo en su vertiente ut¨®pica, humanista y cr¨ªtica, cuyos an¨¢lisis sociales, pol¨ªticos y econ¨®micos utiliz¨® como mediaci¨®n socioanal¨ªtica para el an¨¢lisis de la realidad latinoamericana, con los correspondientes correctivos desde el punto de vista del cristianismo jesu¨¢nico.

Vivi¨® activamente la elecci¨®n de Salvador Allende y el proceso democr¨¢tico y pac¨ªfico de transici¨®n al socialismo en su pa¨ªs, Chile, donde naci¨® el movimiento Cristianos por el Socialismo, que posteriormente se extendi¨® por otros pa¨ªses, entre ellos Espa?a en 1973. Richard fue uno de sus fundadores, dirigentes y principales te¨®ricos y sobre el que escribi¨® varias obras. El movimiento buscaba un di¨¢logo p¨²blico y una convergencia entre el cristianismo y el socialismo en su perspectiva ¨¦tica liberadora, emancipados ambos de sus respectivos dogmatismos y de sus incompatibilidades.

La dictadura de Pinochet le oblig¨® a salir de Chile camino de Francia, donde, seg¨²n confesi¨®n propia, tom¨® distancia de la Iglesia y del sacerdocio. ¡°Fue un exilio en todos los sentidos posibles, pero tambi¨¦n un tiempo duro de reflexi¨®n y reconstrucci¨®n interior¡±, afirm¨®. El encuentro con ?scar Arnulfo Romero, arzobispo m¨¢rtir de San Salvador, le marc¨® para siempre en su vida y en su teolog¨ªa y signific¨® el fin de su exilio eclesial.

Los tres pilares

En 1978, se traslad¨® a San Jos¨¦ de Costa Rica para trabajar en el Departamento Ecum¨¦nico de Investigaciones, centro de di¨¢logo entre Biblia, teolog¨ªa y econom¨ªa y lugar de formaci¨®n de agentes de comunidades de base, l¨ªderes de movimientos sociales y j¨®venes investigadores, donde Pablo y yo compartimos encuentros interdisciplinares bajo la gu¨ªa del economista y te¨®logo Frantz Himkelammert y en el horizonte de la teolog¨ªa de la liberaci¨®n. All¨ª trabaj¨® ininterrumpidamente durante 40 a?os, sin duda los m¨¢s fecundos y creativos tanto en el terreno educativo como en la producci¨®n teol¨®gica y b¨ªblica.

Tres son los pilares en los que se sustenta la teolog¨ªa de Pablo Richard: la pr¨¢ctica de la liberaci¨®n, la Iglesia de los pobres y la lectura popular de la Biblia. Su teolog¨ªa no se limita a pensar e interpretar el mundo, sino a transformarlo, aplicando a los te¨®logos la tesis XI de Marx sobre Feuerbach: ¡°Los fil¨®sofos se han limitado a interpretar de distintas formas el mundo, pero de lo que se trata es de transformarlo¡±. Pablo Richard acompa?¨® los procesos revolucionarios latinoamericanos, especialmente la revoluci¨®n sandinista de Nicaragua, a trav¨¦s de la formaci¨®n de los dirigentes del movimiento cristiano de base y del surgimiento de otro modelo de Iglesia. Teor¨ªa y pr¨¢ctica de la liberaci¨®n fueron inseparables en su vida y su pensamiento.

Desempe?¨® un papel fundamental en el paso de la ¡°Iglesia de Cristiandad¡±, ubicada en la clase dominante y en las estructuras de poder, a la ¡°Iglesia de los Pobres¡±, sita en los sectores empobrecidos de la sociedad y orientada a la transformaci¨®n de las relaciones eclesiales jer¨¢rquicopatriarcales y autoritarias en estructuras comunitarias y relaciones fraternosororales.

Richard cre¨® el movimiento de lectura popular y comunitaria de la Biblia destinado a la formaci¨®n de los agentes de pastoral de toda Am¨¦rica Latina a trav¨¦s de una hermen¨¦utica liberadora de la Biblia como fuente de vida y esperanza, orientada a la transformaci¨®n global de la sociedad desde la opci¨®n radical por las personas y los colectivos empobrecidos como sujeto colectivo privilegiado de la palabra de Dios.

Su memoria seguir¨¢ viva en su esposa Gabriela y sus hijos, en las comunidades eclesiales de base, en el mundo de la mendicidad a quien acompa?¨® y en sus libros, que seguir¨¢n iluminando nuestro caminar hacia la utop¨ªa de otro mundo posible.

Juan Jos¨¦ Tamayo es te¨®logo espa?ol de la liberaci¨®n, autor de Teolog¨ªas del Sur. El giro descolonizador (Trotta).