La batalla por devolver un hospital a la sanidad p¨²blica
El Gobierno valenciano se hace cargo del Hospital de Torrevieja, una concesi¨®n p¨²blico-privada durante 15 a?os, tras meses de litigios judiciales y negativas de la gerencia a facilitar informaci¨®n
Hace exactamente un a?o, la consejera de Sanidad Universal de la Generalitat valenciana, Ana Barcel¨®, anticipaba un secreto a voces. El Gobierno auton¨®mico abr¨ªa el proceso para revertir la concesi¨®n del departamento de salud de Torrevieja (Alicante), que el s¨¢bado 16 de octubre pasar¨¢ a ser de gesti¨®n p¨²blica, tras finalizar el contrato con la empresa que lo gestiona desde hace 15 a?os, Torrevieja Salud. Ahora, 12 meses despu¨¦s, el proceso se ha convertido en la cr¨®nica de una batalla campal entre ambas partes. Barcel¨® asegura que Ribera Salud, la matriz que ide¨® las concesiones publico-privadas sanitarias en la Comunidad Valenciana, ha desmantelado el hospital que encabeza el ¨¢rea y no ha parado de obstruir los tr¨¢mites de reversi¨®n, para el que no ha facilitado informaci¨®n alguna. La empresa ha tratado de frenar la p¨¦rdida del centro sanitario en los tribunales, en repetidas ocasiones, sin ¨¦xito. En v¨ªsperas del traspaso, la incertidumbre sigue reinando y demostrando lo complicado que es desmontar el entramado de concesiones sanitarias auspiciado por el Partido Popular.
El de Torrevieja es el segundo departamento sanitario que vuelve a la sanidad p¨²blica tras el de Alzira (Valencia), el hospital que dio nombre al modelo concesional. Ambas reversiones forman parte del programa del Bot¨¤nic II, el acuerdo que llev¨® a la presidencia de la Generalitat al PSOE con el apoyo de Comprom¨ªs y Podem. En ¨¦l, se estipulaba ¡°la recuperaci¨®n de los servicios p¨²blicos privatizados una vez finalizada la concesi¨®n¡±. La de Alzira se produjo en marzo de 2018 y el balance de Barcel¨® dec¨ªa que, un a?o despu¨¦s, crecieron los puestos laborales, la inversi¨®n en equipamiento y la dotaci¨®n de servicios. La de Torrevieja llega ahora y, si no hay cambios en el Ejecutivo valenciano, la misma situaci¨®n se repetir¨¢ previsible y sucesivamente en los departamentos alicantinos de D¨¦nia y Vinalop¨® (Elche), tambi¨¦n gestionados por Ribera Salud. En los dos primeros casos se ha reproducido el mismo campo de batalla. La consejer¨ªa se ve obligada a desarrollar los tr¨¢mites al margen del proceso porque la empresa reserva toda la informaci¨®n hasta el final. Y los equipos legales de ambas partes litigan sin descanso.
Sanidad se ve obligada a avanzar a ciegas y al margen de los despachos para saber con qu¨¦ se encontrar¨¢. Ribera Salud ni siquiera ha facilitado una sala en el interior del hospital al comisionado, Jos¨¦ P¨¦rez, la figura que hace de nexo de uni¨®n entre la Generalitat y la empresa privada. Y, seg¨²n fuentes sindicales que prefieren permanecer en el anonimato, lo que hallar¨¢ es una ¡°situaci¨®n ca¨®tica¡±. De los aproximadamente 1.600 trabajadores que daban servicio en el hospital y en los centros de salud diseminados por 100 municipios de la comarca de la Vega Baja, al sur de Alicante, 200 eventuales finalizaron sus contratos el pasado d¨ªa 30 de septiembre y no fueron renovados. ¡°Y este 15 de octubre prevemos que cesar¨¢n a otros tantos¡±, auguran las fuentes consultadas. El pasado mi¨¦rcoles, la consejer¨ªa empez¨® a llamar por bolsa de trabajo a los potenciales empleados que deban cubrir las bajas que se produzcan, para garantizar la atenci¨®n a una poblaci¨®n cifrada en unas 180.000 personas.
Los que tienen contrato en vigor han tenido que proporcionar sus datos al comisionado en mano, en una oficina alquilada en Torrevieja. ¡°La consejer¨ªa pidi¨® al comit¨¦ de empresa que comunicara a los trabajadores que entregaran su documentaci¨®n¡±, sostienen las fuentes sindicales, para poder tramitar sus n¨®minas y puestos de trabajo. ¡°Desde junio hasta hoy mismo¡±, contin¨²an, ¡°los empleados han tenido que facilitar sus acreditaciones de categor¨ªa profesional, su DNI, su vida laboral y hasta los datos bancarios para que se les pueda ingresar la n¨®mina¡±. El proceso fue lento y tortuoso, ya que Ribera Salud ha hecho todo lo posible para mantener el control del ¨¢rea sanitaria. Pero todo cambi¨® el 28 de septiembre, cuando el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) aval¨® el procedimiento emprendido por Sanidad para tomar las riendas de Torrevieja. Era la quinta vez que validaba tanto la finalizaci¨®n del contrato como las normas establecidas para la reversi¨®n. ¡°Ese d¨ªa, la plantilla se tranquiliz¨®¡±, relatan las fuentes, ¡°porque hasta entonces no sab¨ªan si la empresa seguir¨ªa al frente¡±.
Tambi¨¦n desde ese d¨ªa comenz¨® a moverse la jerarqu¨ªa del hospital. Se lleg¨® a decir que 17 jefes de servicio hab¨ªan abandonado el centro sanitario. En realidad, la mayor¨ªa de ellos daban servicio tanto en Torrevieja como en el Hospital del Vinalop¨®, una medida con la que la empresa reduc¨ªa costes. Son ¡°los sinergiados¡±, seg¨²n la denominaci¨®n sindical. ¡°Algunos no eran ni jefes de servicio, sino trabajadores externos de especialidades que no exist¨ªan en la cartera de Torrevieja y que cobraban por cada asistencia¡±. Tras el auto del TSJCV, ¡°algunos se van a quedar¡±, confirman.
En una comparecencia ante los medios el pasado 8 de octubre, Ana Barcel¨® denunci¨® tambi¨¦n el ¡°desmantelamiento¡± de las instalaciones. Y puntualiz¨® que un equipo de tomograf¨ªa axial computerizada (TAC) cuyo ¡°renting o leasing¡± hab¨ªa finalizado ¡°iba a continuar¡± en el centro. Las fuentes consultadas inciden en que la dotaci¨®n no est¨¢ mermada y que almacenes del centro, como el de farmacia, siguen surtidos.
Sin embargo, parte de los servicios s¨ª se han clausurado. ¡°En los ¨²ltimos 15 d¨ªas¡±, explican, ¡°se ha cerrado una planta de Cirug¨ªa General, con 30 camas, media planta compartida por Pediatr¨ªa y Maternidad, de 10 camas, y tres boxes de los 18 que hab¨ªa en la UCI¡±, que lleg¨® a disponer de 21 en pleno apogeo de la covid. Tambi¨¦n sostienen que ¡°han cerrado citaciones y han bajado a m¨ªnimos las consultas externas, la actividad programada de quir¨®fano y la plantilla de la puerta de Urgencias¡±.
Mientras tanto, Ribera Salud, que acaba de denunciar a Sanidad ante la Guardia Civil por un supuesto acceso ilegal a su sistema inform¨¢tico desde la oficina del comisionado, ha presentado este jueves sus n¨²meros y califica el departamento que debe entregar como ¡°el mejor de la Comunidad Valenciana seg¨²n los datos oficiales de la Generalitat¡±. En opini¨®n de Jos¨¦ David Zafrilla, gerente del ¨¢rea, la concesi¨®n ¡°finaliza con excelentes indicadores asistenciales y de gesti¨®n¡±, lo que demuestra, a su juicio, que reversiones como la de Alzira son ¡°un aut¨¦ntico fracaso¡±, con ¡°el empeoramiento del servicio, el aumento de las listas de espera, el deterioro de las infraestructuras y el mal ambiente laboral¡±.
El modelo Alzira arranc¨® en 1997 con las obras del hospital del municipio que le da nombre, impulsado por el PP que entonces lideraba Eduardo Zaplana. Se basa en una concesi¨®n administrativa por la que una empresa construye y gestiona las instalaciones sanitarias y contrata una plantilla que no forma parte de personal de la administraci¨®n. A cambio, recibe un canon, la c¨¢pita, estipulado a partir de la poblaci¨®n atendida. Este modelo lo import¨® Esperanza Aguirre a Madrid, comunidad en la que Ribera Salud sigue al frente del Hospital de Torrej¨®n. Tambi¨¦n gestiona centros en Galicia, Extremadura, Murcia y, fuera de Espa?a, en Per¨².
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