Las participantes del concurso Miss Francia tendr¨¢n contrato laboral tras una demanda feminista
La asociaci¨®n Osez le F¨¦minisme contin¨²a pese a ello su denuncia ante un tribunal laboral, al considerar que se mantienen los ¡°criterios discriminatorios¡± del programa
Las 29 misses que el 11 de diciembre participar¨¢n en una de las finales televisadas m¨¢s seguidas de Francia, el concurso de belleza Miss France, contar¨¢n este a?o con un contrato de trabajo y ser¨¢n remuneradas. Es la primera vez en la historia de este concurso nacido en 1919 y retransmitido por televisi¨®n desde 1987 que se reconoce formalmente la relaci¨®n laboral de las aspirantes con la sociedad que gestiona el programa. Una decisi¨®n que la nueva directora de Miss France, Alexia Laroche-Joubert, ha anunciado como iniciativa propia, si bien se produce a solo un mes de que una asociaci¨®n feminista, Osez le F¨¦minisme, presentara una demanda contra el concurso ante un tribunal laboral.
¡°Miss Francia es un concurso, pero tambi¨¦n es una emisi¨®n de televisi¨®n. Desde mi nombramiento, hemos trabajado en la l¨ªnea editorial. Eso tendr¨¢ consecuencias art¨ªsticas y jur¨ªdicas. Este a?o, las 29 misses que desfilar¨¢n, tendr¨¢n contratos de trabajo¡±, anunci¨® Laroche-Joubert al presentar el programa del mes pr¨®ximo ante la prensa francesa.
A mediados de octubre, Osez le F¨¦minisme present¨® una demanda contra la productora Endemol Production, que produjo hasta este a?o el concurso, al considerar que la empresa ¡°explota a las mujeres, que repiten e interpretan cada a?o un espect¨¢culo sexista, discriminatorio y lucrativo, generando millones de euros de beneficios, y todo ello violando el derecho laboral¡± que proh¨ªbe la discriminaci¨®n de un candidato a un puesto por su aspecto f¨ªsico, edad u origen, entre otros. En aquel momento, Laroche-Joubert, que ha asumido la direcci¨®n de la nueva sociedad Miss France, rechaz¨® taxativamente que se pudiera hablar de una relaci¨®n laboral en este caso. ¡°Hablamos de un concurso (¡) el trabajo es otra cosa, tienes un empleador, horarios, etc. Esto son concursos regionales y se tiene la opci¨®n de presentarse o no. No son contratos de trabajo, se llama concurso, hace cien a?os que celebramos concursos de belleza, son anteriores incluso a sus emisiones por televisi¨®n¡±, declar¨®.
Un detalle que no ha dejado de destacar Osez le F¨¦minisme que, en un comunicado, ha anunciado que pese al anuncio efectuado este mi¨¦rcoles en Par¨ªs, continuar¨¢ adelante con su demanda, que tiene ya una primera fecha fijada: una ¡°audiencia de conciliaci¨®n¡± ante el tribunal laboral de Bobigny, en Par¨ªs, el 1 de diciembre.
Seg¨²n las feministas, la decisi¨®n ha sido tomada porque el anuncio del contrato laboral para las misses es ¡°ampliamente insuficiente¡±. La existencia de un contrato ¡ªy de ah¨ª la decisi¨®n de Osez de apostar por la v¨ªa de la denuncia laboral¡ª implica, recuerdan, la aplicaci¨®n de las reglas del c¨®digo de trabajo. Ello, a su vez, consideran, ¡°debe llevar l¨®gicamente a la supresi¨®n de todos los criterios discriminatorios como los gen¨¦ticos o de apariencia f¨ªsica [uno de los requisitos es medir al menos 1,70 metros], el no haber estado nunca casada ni tener hijos o tener un comportamiento ¡®conforme a los valores de la elegancia¡¯¡±, como exige el concurso Miss Francia y que excluye a mujeres tatuadas o con piercings, entre otros.
La responsable del concurso no ha dudado en cargar contra las feministas, a las que acusa de ¡°querer matar Miss Francia¡±, seg¨²n recogen los diarios 20Minutes o Le Parisien. Laroche-Joubert lament¨® las ¡°pol¨¦micas¡± creadas, dijo, por ¡°grupos neofeministas que tienen una mirada condescendiente sobre un programa popular y amable y sobre el entusiasmo que suscita¡±. No obstante, se mostr¨® dispuesta, una vez m¨¢s, a debatir algunas normas que ya en su momento calific¨® como ¡°obsoletas¡±. ¡°Puede que sean necesarias discusiones sobre el t¨¦rmino jur¨ªdico de ¡®soltera¡¯¡±, se?al¨®. ¡°Tambi¨¦n hemos sido algo demasiado restrictivos en cuanto a los tatuajes, pero son temas que tenemos que hablar con los comit¨¦s¡± regionales, indic¨®.
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