Miles de personas protestan en Europa contra el confinamiento y la vacunaci¨®n obligatoria
Manifestaciones en Austria, Dinamarca, Croacia y Pa¨ªses Bajos por las medidas de sus gobiernos ante la nueva ola de la covid en el continente
Decenas de miles de personas han salido este s¨¢bado a la calle en Viena (Austria), Zagreb (Croacia), Copenhague (Dinamarca) y R¨®terdam (Pa¨ªses Bajos) para protestar contra las medidas impuestas por los gobiernos ante la ola de covid que atraviesa Europa. En la capital austriaca se han manifestado por el confinamiento decretado por el Gobierno a partir del lunes ante el impacto de la cuarta ola y el anuncio de que se prepara una ley que har¨¢ obligatoria la vacunaci¨®n contra la covid-19 el pr¨®ximo febrero. Un millar de daneses ha protestado contra la reinstauraci¨®n del certificado covid para acudir a lugares de ocio. Y, en la ciudad holandesa la protesta se transform¨® en la madrugada del s¨¢bado en un estallido de violencia inusitada. Al menos siete personas resultaron heridas ¡ªentre polic¨ªas, manifestantes y un periodista que cubr¨ªa los hechos y fue atacado por los segundos¡ª y hubo medio centenar de arrestos. La incidencia en 14 d¨ªas por 100.000 habitantes de Austria supera los 2.000 casos y la de Pa¨ªses Bajos y Croacia, los 1.500 y Dinamarca, los 900; Espa?a est¨¢ en 111.
La Organizaci¨®n Mundial de la Salud ha vuelto a expresar este s¨¢bado su gran preocupaci¨®n por el alza de casos de la covid-19 en Europa. El director regional de la organizaci¨®n, Hans Kluge, ha avisado en la BBC de que es posible que medio mill¨®n de personas muera de aqu¨ª a marzo de 2022 si no hay medidas urgentes, como la obligatoriedad de las mascarillas, algo que sigue en vigor en los interiores en Espa?a, pero que ya fue eliminado en muchos pa¨ªses vecinos.
Pero algunas medidas est¨¢n soliviantando a la poblaci¨®n. En Austria, varias manifestaciones han recorrido tramos del centro hist¨®rico de la capital, que han realizado tambi¨¦n concentraciones en distintos puntos, una forma de marcar presencia y, al mismo tiempo, bloquear el coraz¨®n de la ciudad. Un gran despliegue policial (13.000 agentes, seg¨²n los medios austriacos) ha vigilado las protestas para reaccionar ante posibles incidentes y por megafon¨ªa se advert¨ªa constantemente de que era obligatorio llevar la mascarilla FPP2, que muchos asistentes no se han puesto hasta ser apercibidos. Tras un arranque tranquilo animado por m¨²sica popular, se ha producido algunos incidentes y al menos cinco detenciones, adem¨¢s de denuncias por el uso de simbolog¨ªa nazi, que en Austria es un delito. Entre los motivos de esas denuncias ¨Dseg¨²n el diario Der Standard¨D est¨¢ el empleo de estrellas de David con la palabra ¡°no vacunado¡± por parte de los asistentes a la protesta. Algunos manifestantes han arrojado latas de cerveza y botellas de pl¨¢stico a la polic¨ªa, seg¨²n el mismo medio, y ha habido choques con los agentes.
Las autoridades estiman que entre 35.000 y 40.000 personas han participado en la protesta, salpicada por esl¨®ganes como ¡°resistencia¡± y ¡°corona fake¡±, entre otros. Los manifestantes marcharon por las calles portando banderas de Austria, mensajes negando la existencia de la enfermedad y contra la vacunaci¨®n.
Anton Egger, ¨®ptico de 37 a?os, y su novia, Monika Kaltschmid, de 29 y que se dedica a proyectos de iluminaci¨®n, no llevaban mascarilla y no est¨¢n vacunados. ¡°He rechazado seguir las reglas del Gobierno. No nos trata como a adultos, y la presi¨®n me ha obligado a dejar el trabajo¡±, afirm¨® Egger. Ella rechaz¨® tambi¨¦n tener que presentar pruebas negativas de la covid para trabajar en contacto con el p¨²blico. ¡°Esto huele a nazismo¡±, sostuvo el hombre.
La convocatoria principal corri¨® a cuenta del partido de ultraderecha FP?, que ha marcado el paso de la protesta y alienta el movimiento de esc¨¦pticos con la vacuna y la covid. Su l¨ªder, Herbert Kickl, que est¨¢ en cuarentena tras dar positivo, afirm¨® el viernes, tras anunciarse un nuevo confinamiento y la vacunaci¨®n obligatoria, que Austria se est¨¢ convirtiendo ¡°en una dictadura¡±. As¨ª lo han replicado este s¨¢bado varios oradores que se han dirigido a los manifestantes entre gritos de ¡°nosotros somos el pueblo¡±, ¡°dictadura¡±, ¡°resistencia¡±.
Parte de los asistentes llevaba brazaletes del partido ultra o son miembros de la formaci¨®n, como G¨¹nther M¨¹ck, de 54 a?os, que no se opone a un nuevo encierro para frenar los contagios, pero s¨ª a la vacunaci¨®n obligatoria. ¡°Va en contra de la raz¨®n, solo lo hacen para vender vacunas, no sobre una base cient¨ªfica¡±, sosten¨ªa en la plaza de los Derechos Humanos, uno de los puntos de la protesta.
Las pancartas mostraban que la decisi¨®n anunciada el viernes por el canciller democristiano, Alexander Schallenberg, que gobierna en coalici¨®n con Los Verdes, ha movido tambi¨¦n la protesta. ¡°Obligaci¨®n de pensar en vez de obligaci¨®n de vacunar¡±; ¡°por la libertad, sobre mi cuerpo decido yo¡±, dec¨ªan algunas pancartas.
La plaza de los H¨¦roes albergaba poco despu¨¦s del mediod¨ªa a varios miles de personas, que han reaccionado con una sonora pitada cada vez que la megafon¨ªa de la polic¨ªa advert¨ªa de que hay que llevar mascarilla ¡ªlos organizadores las ofrec¨ªan¨D y de que se grababa el acto ante posibles incidentes. Aunque la presencia de figuras de la extrema derecha y de simpatizantes del FP? era clara, la manifestaci¨®n atrajo a una variedad de personas, desde partidarios de las teor¨ªas de la conspiraci¨®n hasta personas que desconf¨ªan del poder excesivo del Estado, pasando por grupos de cristianos evang¨¦licos. ¡°No soy de ning¨²n partido, pero estoy a aqu¨ª por mi libertad y la de nuestros hijos¡±, destac¨® Bettina K., de 54 a?os, mientras esperaba uno de los discursos, y a?ad¨ªa que no se f¨ªa de la vacuna porque ¡°es un experimento¡±. Otros han venido solo para mostrar su rechazo a la vacunaci¨®n obligatoria, como Barbara K., de 29 a?os. ¡°Yo estoy vacunada, pero esto no lo pueden decidir por nosotros. Hay que votarlo¡±, exigi¨®.
Austria inici¨® el pasado lunes un confinamiento para no vacunados para intentar parar una ola que ha disparado los contagios por encima de los 15.000 diarios y con decenas de muertos. Ante el imparable aumento, el encierro se extender¨¢ el lunes durante 20 d¨ªas a toda la poblaci¨®n. La tasa de vacunaci¨®n, cercana al 66%, es una de las m¨¢s bajas de la Europa occidental.
¡°Vacunad a vuestras madres¡±
Alrededor de 15.000 personas, seg¨²n c¨¢lculos de los medios locales, se han manifestado este s¨¢bado en el centro de Zagreb contra las medidas gubernamentales para reducir los contagios de coronavirus. ¡°Libertad¡±, ¡°Vacunad a vuestras madres, dejad a nuestros ni?os en paz¡±, ¡°Stop a los certificados covid¡±, ¡°No vais a vacunar a nuestros hijos¡± y ¡°Croacia libre¡± eran algunos de los lemas de las pancartas, entre las que tambi¨¦n figuran muchas im¨¢genes de la Virgen Mar¨ªa y Jes¨²s, as¨ª como banderas croatas, informa la agencia EFE.
Entre los manifestantes, muchos de ellos sin la obligatoria mascarilla, hab¨ªa varios pol¨ªticos de la ultraderecha y activistas de asociaciones cat¨®licas ultraconservadoras. La multitud acus¨® tambi¨¦n de ¡°traidor¡± al primer ministro conservador, Andrej Plenkovic, y cant¨® canciones patri¨®ticas durante la protesta. La principal exigencia de los manifestantes es que el Gobierno anule la obligaci¨®n, en vigor desde el martes, de mostrar el certificado covid (de vacunaci¨®n, haber pasado la enfermedad o un test negativo) a la entrada en todas las instituciones p¨²blicas, como correos, oficinas municipales, comisar¨ªas de polic¨ªa o centros sanitarios.
Croacia, donde solo un 46% de la poblaci¨®n est¨¢ vacunada con la pauta completa, est¨¢ pasando por una dura cuarta ola, con r¨¦cords de contagios y elevado n¨²mero de muertos por coronavirus, mientras los hospitales ya est¨¢n al l¨ªmite de sus capacidades.
Violencia en R¨®terdam
Ahmed Aboutaleb, alcalde socialdem¨®crata de R¨®terdam, ha calificado los incidentes de la ciudad portuaria de ¡°org¨ªa de violencia¡±, y ha dicho que las fuerzas del orden han sido atacadas varias veces y se han visto obligadas a defenderse. ¡°Han efectuado varios disparos de aviso que estamos investigando¡±, informa Isabel Ferrer.
Mientras se investiga la naturaleza de los disparos, circula por las redes sociales un v¨ªdeo donde un hombre recibe supuestamente un tiro, y el Departamento Nacional de Investigaci¨®n Criminal est¨¢ analizando lo ocurrido. La concentraci¨®n deriv¨® en un disturbio en toda regla poco despu¨¦s de que varios centenares de personas empezaran a lanzar objetos y fuegos artificiales y petardos de gran calibre contra los agentes. Los coches de polic¨ªa fueron incendiados y se destrozaron bicicletas, paradas de autob¨²s y se?ales de tr¨¢fico. Hubo tambi¨¦n saqueo de tiendas. En un momento dado se cerr¨® el acceso a la estaci¨®n central de ferrocarril, y seg¨²n la polic¨ªa, se produjo una combinaci¨®n de factores. Cuando llegaron refuerzos de fuerzas antidisturbios, la polic¨ªa regular estaba cercada por los manifestantes. ¡°En varios momentos, los agentes se vieron obligados a disparar. Entonces, hubo gente que se lanz¨® contra ellos y ese grupo ya no eran manifestantes, sino algo m¨¢s¡±, ha declarado el alcalde Aboutaleb.
Por otro lado, las autoridades de Guadalupe, una de las dos principales islas de las Antillas francesas, anunciaron el viernes la instauraci¨®n de un toque de queda nocturno, tras las violentas protestas contra el pase sanitario. El prefecto de la isla, Alexandre Rochatte, anunci¨® un toque de queda inmediato hasta el 23 de noviembre (de 18.00 a 5.00, hora local) ¡°ante el malestar social en el departamento y los actos de vandalismo¡±, seg¨²n su oficina.
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