Juan el Canuto, el hombre de los 36 hijos y tres mujeres, absuelto de agresi¨®n sexual a una de sus hijas

La Audiencia Provincial de Granada ha absuelto a Juan Manuel H. H., el Canuto, el hombre de los 36 hijos y tres mujeres, de un delito de agresi¨®n sexual sobre una de sus hijas cuando esta era menor de edad, que durante el juicio se neg¨® a declarar contra su padre acogi¨¦ndose a la dispensa legal. La denuncia se produjo en mayo de 2017, cuando la hija ten¨ªa 14 a?os, y como consecuencia la Junta de Andaluc¨ªa asumi¨® su tutela y fue trasladada a un centro de protecci¨®n de menores. Poco antes de cumplir los 17, sin embargo, se escap¨® de la vivienda donde estaba acogida para irse a vivir con su novio y tampoco volvi¨® ya al sistema de protecci¨®n. Hoy, con 19 a?os y ya mayor de edad, vive emancipada aunque, seg¨²n fuentes cercanas, vive en un pueblo pr¨®ximo al de su familia y no ha perdido la relaci¨®n del todo con ella.

La mujer denunciante es una de los 36 hijos que el Canuto, que cumplir¨¢ en junio 65 a?os, tiene con tres esposas, con las que convive en una casa cueva del pueblo granadino de El Marchal (414 habitantes, a 60 kil¨®metros de Granada). Seg¨²n la sentencia conocida hoy, tras un juicio de dos jornadas celebrado a principios de diciembre, la ausencia de declaraci¨®n de la presunta v¨ªctima, unido a que el tribunal ha considerado ¡°insuficiente¡± la prueba pericial para destruir la presunci¨®n de inocencia del acusado, ha conllevado la absoluci¨®n del Canuto, as¨ª como el cese inmediato de las prohibiciones de acercamiento y comunicaci¨®n para con su hija que se acordaron cautelarmente

Seg¨²n el relato que hace la sentencia, la primera noticia de los presuntos abusos la tuvo una profesora con la que la ni?a ten¨ªa confianza y a la que le cont¨® que esto ven¨ªa sucediendo desde un par de a?os antes. La docente lo traslad¨® inmediatamente a la directora que, a su vez, insisti¨® en que se lo explicara a la Guardia Civil. A los agentes les cont¨®, seg¨²n el relato que hace la sentencia, que ¡°desde que le lleg¨® la menstruaci¨®n teniendo 12 a?os de edad, su padre la met¨ªa en la cama con ¨¦l, le acariciaba la vulva y los pechos manose¨¢ndoselos y mientras tanto ¨¦l se masturbaba bajo las s¨¢banas hasta eyacular, que esto se lo hac¨ªa cada tres o cuatro d¨ªas, sobre todo cuando se portaba mal en casa o en el instituto, y que para evitarlo muchas veces se acostaba en su cuarto antes de hora sin cenar¡±. El relato a?ade tambi¨¦n que ¡°su padre le pegaba mucho, tambi¨¦n a sus madres y a todos¡±. A la vez que esta denuncia, los Servicios Sociales de la Junta de Andaluc¨ªa retiraron 13 hijos menores de edad a Juan el Canuto por considerar que corr¨ªan un gran riesgo conviviendo con ¨¦l.

El caso dio un giro inesperado durante el juicio cuando se llam¨® a declarar a la hija. De hecho, el escrito judicial narra que la mujer ¡°sorprendi¨® a todos en la sala con sus primeras palabras¡±. Cuando el tribunal llam¨® a la denunciante a declarar, esta dijo, seg¨²n aparece en la sentencia, ¡°con toda vehemencia que no estaba dispuesta a declarar¡±. La Fiscal¨ªa ped¨ªa en primera instancia 10 a?os de prisi¨®n y 15 de prohibici¨®n de acercarse a su hija. La acusaci¨®n popular realiz¨® la misma calificaci¨®n y petici¨®n de pena. Seg¨²n la Sala Segunda de la Audiencia Provincial de Granada, la negativa de la hija a declarar en el juicio invalida cualquier declaraci¨®n previa ante la Guardia Civil.

La Audiencia ha analizado, no obstante, otras pruebas de cargo que s¨ª pod¨ªan tenerse en cuenta. Se trata de las declaraciones de quienes tuvieron contacto con ella durante el tiempo en el que estuvo protegida por los Servicios Sociales y del informe pericial psicol¨®gico que la Fundaci¨®n M¨¢rgenes y V¨ªnculos, a la que la Junta de Andaluc¨ªa recurre habitualmente en Granada, hizo de la entonces ni?a. Tanto en el caso de las declaraciones personales como en el informe psicol¨®gico, el tribunal considera que no est¨¢ acreditado el abuso sexual. El tribunal valora, de hecho, para absolver al Canuto la posibilidad de que la hija lo denunciara como un modo de escapar de la familia y poder as¨ª salir de casa.

¡°Ronda con ello la idea no descabellada como alternativa a la realidad de lo que A. [la hija] denunci¨®, que la revelaci¨®n se le presentara como una v¨ªa de escape de una familia tan at¨ªpica en la que hab¨ªa tantas carencias y tan poca libertad para salir y estar con el muchacho al que quer¨ªa¡±, asegura la sentencia.