Condenado a cinco a?os un m¨¦dico que grab¨® a 94 mujeres en los aseos del hospital de Menorca

El m¨¦dico menorqu¨ªn que grab¨® a 94 mujeres con c¨¢maras ocultas instaladas en los vestuarios y aseos del Hospital Mateu Orfila de Ma¨® y en su propia casa ha aceptado una condena de cinco a?os de c¨¢rcel por delitos de descubrimiento y revelaci¨®n de secretos. En el juicio celebrado este mi¨¦rcoles en la Audiencia Provincial de Palma, el facultativo ha aceptado un acuerdo de conformidad alcanzado entre su defensa y la Fiscal¨ªa por el que tambi¨¦n indemnizar¨¢ a las v¨ªctimas con 270.000 euros.

Las acusaciones aprecian que el m¨¦dico sufr¨ªa en el momento de los hechos un trastorno de voyeurismo y adaptaci¨®n, por lo que han rebajado sensiblemente su petici¨®n inicial de 10 a?os de prisi¨®n. Tambi¨¦n han aplicado la circunstancia atenuante de reparaci¨®n del da?o, ya que antes del juicio hab¨ªa consignado 50.000 euros para pagar las posibles responsabilidades civiles.

El caso se destap¨® cuando una enfermera descubri¨® una c¨¢mara oculta en uno de los aseos del centro sanitario. El facultativo, especialista del ¨¢rea de medicina intensiva, hab¨ªa estado grabando a escondidas durante los a?os 2016, 2017 y 2018. Coloc¨® los dispositivos de grabaci¨®n y reproducci¨®n de im¨¢genes en el interior de los vestuarios y aseos femeninos de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Mateu Orfila de Mah¨®n. All¨ª logr¨® captar im¨¢genes de las profesionales sanitarias y de las personas ingresadas en la unidad, haci¨¦ndose con un total de 1.672 fragmentos de v¨ªdeo que afectan a 76 mujeres. Aprovechaba que las v¨ªctimas utilizaban estas dependencias para cambiarse de ropa y escondi¨® las c¨¢maras en la parte superior de las taquillas de los vestuarios y en la papelera, dentro de una caja de cart¨®n envuelta con un pl¨¢stico negro.

El m¨¦dico aprovech¨® su trabajo para entrar y salir libremente de los vestuarios y los aseos, tanto del personal como de los ba?os p¨²blicos, e incluso se hizo con las llaves que se encontraban en el despacho com¨²n del personal de servicio de la unidad para hacer una copia y poder seguir entrando en el vestuario. El condenado no solo instal¨® c¨¢maras en el hospital, sino que tambi¨¦n capt¨® im¨¢genes mediante dispositivos instalados en el cuarto de ba?o de su casa. Aprovechaba para situar el tel¨¦fono m¨®vil en la papelera o la ducha del ba?o que utilizaban las visitas. All¨ª capt¨® im¨¢genes de otras 11 personas. Tambi¨¦n lleg¨® a grabar a una compa?era por debajo de la falda durante una reuni¨®n en el centro sanitario.