Claudia Tecglen, emprendedora: ¡°La discapacidad y el talento conviven de forma natural¡±
La Fundaci¨®n Princesa de Girona distingue a la madrile?a por impulsar una asociaci¨®n de ayuda a personas con el trastorno motor de la espasticidad
Claudia Tecglen naci¨® el 12 de septiembre de 1986, tres meses y medio antes de lo previsto, 900 gramos de vida que los m¨¦dicos dijeron a sus padres que ser¨ªa un ¡°vegetal¡±. Unas sonrisas y unos lloros hicieron que sus progenitores no creyeran en el diagn¨®stico y lucharon para dar a su hija, que sufre una par¨¢lisis cerebral, las mejores atenciones, tratamientos y colegios. Su vida ha estado llena de obst¨¢culos, pero a partir de los 16 a?os, cuando le implantaron cerca de la cadera un dispositivo m¨¦dico que le suministra un medicamento a la m¨¦dula, todo cambi¨®. Pudo calzarse unos zapatos por primera vez y quiso tener la oportunidad de ayudar a m¨¢s gente. En 2008 fund¨® Convives con Espasticidad, una asociaci¨®n que tiene el objetivo de ¡°quitarle al azar y a la desinformaci¨®n la oportunidad de limitar una vida¡±. Este a?o ha sido distinguida con los Premios de la Fundaci¨®n Princesa de Girona (FPdGi), junto con otras cuatro mujeres, por su impacto social al impulsar la igualdad de oportunidades en sus acciones y por su ¡°ejemplaridad como modelo inspirador y referente para otros j¨®venes¡±.
¡°Doy gracias por haber encontrado mi prop¨®sito vital¡±, afirma esta madrile?a. La falta de ox¨ªgeno en el cerebro al nacer provoc¨® que sufra una par¨¢lisis cerebral infantil con un trastorno motor asociado que se llama espasticidad. Tuvo problemas para que la quisieran en alg¨²n colegio porque no entend¨ªan que su discapacidad no era cognitiva. A los tres a?os ya hablaba y a los cinco batallaba con el ingl¨¦s. A los 12, la operaron de la rodilla, cadera y abductores y cuando todas sus amigas pensaban en faldas y zapatos, ella aguantaba intensos dolores con la mitad del cuerpo enyesado. ¡°Lo pas¨¦ muy mal. La operaci¨®n me vino muy bien a nivel f¨ªsico pero en plena adolescencia, compar¨¢ndome con mis amigas, fue una ¨¦poca muy dura a nivel psicol¨®gico y f¨ªsico¡±, cuenta. Aunque no le gusta recordarlo, admite: ¡°Se me quitaron las ganas de vivir¡±. Pero acto seguido recuerda, visiblemente emocionada: ¡°Un abrazo de mi hermano peque?o de cuatro a?os me hizo reencontrar la esperanza y la ilusi¨®n por la vida¡±.
Claudia convive con el dolor. ¡°Se puede convivir con espasticidad pero no con dolor. Ambos se deben tratar y aliviar para tener calidad de vida¡±, asegura. Tampoco tuvo una secundaria f¨¢cil, ni una selectividad, que tuvo que repetir porque no hab¨ªa adaptaciones previstas para ella. Pero encontr¨® grandes complicidades en la UNED. Se medica diariamente, pero su esperanza es tan intensa como el color verde de la ropa que viste hoy. Y tiene algo claro: ¡°Nadie puede sentenciar la vida de una persona, para ser un gran profesional primero debes ser una buena persona¡±.
Considera que su vida se ha caracterizado ¡°por golpes de suerte¡±. ¡°Suerte de nacer en Madrid, en una familia con posibilidades, que se dieran cuenta de que no iba a ser un vegetal, que sus padres lucharan por ella¡±, y la suerte de haber encontrado por el camino a profesores, m¨¦dicos y amigos. Es una firme defensora de la educaci¨®n: ¡°Es lo que nos permite ser independientes¡±, defiende. Cree que ¡°hay que transformar el sistema educativo, centrarnos en el proceso y la persona, personalizarlo y no solo en los objetivos, porque hay mucho talento que se queda por el camino por un sistema r¨ªgido¡±.
Es conferenciante, psic¨®loga, consultora estrat¨¦gica y de comunicaci¨®n especializada en ONG, y combina todo ello con fisioterapia y cirug¨ªas programadas cada seis a?os. En su Twitter se define como ¡°so?adora con ganas de comerse el mundo¡±. Ahora, con el premio de la FPdGi, siente que es ¡°una gran oportunidad para visibilizar que la discapacidad y el talento conviven de forma natural¡±. Quiere contribuir a la concienciaci¨®n de que ¡°la discapacidad puede tocar a cualquiera y debemos asegurarnos de construir un mundo en el que nadie se quede atr¨¢s, ni por cuesti¨®n de discapacidad, ni raza, ni sexo, ni edad, ni por razones socioecon¨®micas¡±. Su asociaci¨®n est¨¢ centrada en el ¡°afrontamiento activo¡±. ¡°Dotamos a las personas de las estrategias psicol¨®gicas para tener una mayor fortaleza mental y acepten sus limitaciones, reconozcan sus talentos y sean felices con sus circunstancias. No siempre podemos cambiar los hechos, pero s¨ª elegir nuestra actitud ante ellos y la felicidad es una actitud que tambi¨¦n se aprende¡±, apunta.
Cree que las administraciones p¨²blicas deben ser conscientes de que las personas con discapacidad pueden ser productivas. ¡°Debemos fomentar una sociedad en la que quien pueda contribuir con su trabajo lo haga, aunque sea teletrabajo, una gran herramienta de inclusi¨®n¡±, indica. Espera con el premio ¡°lanzar un mensaje de esperanza y optimismo a las personas y familias ¨Cno hay personas con discapacidad, hay familias¨C¡±. Tambi¨¦n quiere ¡°tender mayores puentes para lograr que la discapacidad no sea la protagonista y que estas personas vivan la vida, como dec¨ªa Sinatra, a su manera¡±.
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